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49 De este celo del santo

por el bien de san Millan, resultó una furiosa persecucion que le echó de la casa y de aquella tierra. Reynaba alli D. García de Nígera, Rey de Navarra y de Rioja hasta el monte de Oca. Este vino á S. Millan con fin de apoderarse del oro y plata de la casa, diciendo que todo lo habian dado sus antecesores. El Abad y monges quedaron muy confusos al oir tal propuesta, sin haber quien se atreviese á responder: y viendo aquel conflicto el Prior, sacó la cara diciendo no ser lícito á ninguno usurpar los bienes de la iglesia: pues aunque fueron de los Reyes pasados, dejaron de ser suyos luego que los concedieron á Dios. Sintió el Rey tanto esta y otras respuestas, que cegándo le el enemigo, dijo le sacaria los ojos y la lengua, y á la tercera vez, que le quitaria la vida. El santo sin alterarse respondió, que solo tenia potestad sobre el cuerpo, pero no en el espíritu: y tomando el Rey todo esto á desprecio, se retiró del monasterio muy airado, aunque vol vió á intimar al Abad le priva se del Priorato y le echase fuera del monasterio. El Abad condescendió, y le señaló tres sitios (que Grimaldo llama celdi,

llas) donde pudiese vivir, aun

que con pena, por ser muy infelices.

50: Pero aun alli le fue el Rey á perseguir: pues viendo la prosperidad con que Dios bendecia sus trabajos, le pidió las riquezas que ni tenia, ni habia recibido de su mano. El Sto. viendo la terquedad y avaricia del Rey, resolvió no ser ocasion de mayor mal, y retirarse donde viviese en paz. Díjole

que

buscase para los monasterios administradores que le sir viesen con sus rentas: que á él le proveeria Dios donde vivir, y descansar en paz el resto de sus dias, como en efecto aconteció, disponiendo aquello la divina providencia para llevarle donde tenia predestinado, y hacerle padre de muchas almas en casa glorificada por su nombre, como fue la de Silos.

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Retirase el santo á Burgos, y restablece el monasterio de Siles.

51 Despedido el santo del monasterio de san Millan, en que la avaricia del Rey D. García de Nágera no le dejaba habitar, pasó á Burgos, donde reynaba su hermano D.Fernando I. de Castilla, y la piedad pa

ra con Dios y con sus templos. Este le recibió con amor y reverencia, alegrándose toda la corte y el pueblo, de que Dios les enviase un tan gran varon, conocido ya por la mucha fama de santidad.

52 Viendo el santo el gusto y aceptacion del Rey, pidió le concediese sitio apartado del comercio, donde pudiese vivir , y el Rey se lo concedió, como expresa Berceo, verso 185.

1

Ruégote que me dones una hermitanía,
Do sirva al que nasció de la Virgen María.
Pláceme (dijo el Rey) esto por la fé mia.

53 EIR. P. Castro escribió sobre esto, lo siguiente. Es tradicion antigua en la ciudad de Burgos, y consta del libro antiguo de los milagros del santo Cristo de aquella ciudad, que luego que Sto. Domingo de Silos llegó á Burgos, y besó la mano al Rey D. Fernando, le pidió licencia para edificar una casa fuera de los arrabalés, en un valle, que llamaban Semela (poco distante del convento de san Agustin, llamado entonces san Andres) Aqui hizo el santo su casa, y un erenitorio, y en él vivió todo el tiempo que estuvo en aquella ciudad, hasta que el Rey le envió á Silos por su Abad........... Aqui estuvo entregado en los brazos de Raquel, gastando los dias y las noches en oraciones, ayunos, y vigilias, y asistiendo de noche y de dia, con los santos religiosos del

convento de S.Andres á las alabanzas divinas. Hasta aqui Castro, alegando despues lo que escribió Castel Blanco en la vida de S. Juan de Sahagun, de que consta haber asistido Sto. Do mingo al coro con los religio sos ermitaños agustinos de Burgos, y Castro dice ser verdad, aunque no alega para ello documento. Acaso constará por alguno del mismo monasterio de Silos.

1.54 El sitio donde vivió el santo, es hoy ermita de la Magdalena, desde el año 15Ɛ0. en que un ciudadano puso alli una Imágen de la santa: y aunque el Obispo de Burgos D. Gomez dedicó al mismo Sto. Domingo despues de su glorioso tránsito aquella ermita (como refiere Castro) prevaleció la invocacion de la Magdalena, la cual es hasta hoy de la jurisdiccion de

Silos con algunas heredades que personas devotas concedieron al santo mientras vivió en aquel sitio. Esto fue en el año de 1040. ó muy cerca.

55 No consta el tiempo de su mansion en Burgos. Vergara en el núm. 14. de su Prólogo dice llegó alli en Diciembre del 1040. ó á primeros de Enero del 41. y que tomó posesion de la Abadía de Silos á 24. de Enero del 1041. Este es muy estrecho tiempo, reducido á pocos dias entre los primeros de Enero y el 22. con lo cual no puede verificarse lo referido por Castro sobre que el santo edificó la ermita, y recibió tierras, y que pasaba al coro de los Agustinos. Esto pide mas tiempo, que sin prueba antigua no puede establecerse á punto fijo.

56 Lo cierto es, que el cielo iba dirigiendo los pasos de Domingo desde la Rioja á Castilla, para restaurar por su medio el monasterio de san Sebastian de Silos, cuya decadencia lloraba el santo monge Liciniano, clamando al cielo sobre que enviase un digno restaurador, como ya prevenimos. Al mismo tiempo inspiró Dios en el corazon del Rey D. Fernando el restablecimiento de aquella antigua casa, cuya antigua gloria, y cuya actual destruccion era pública, y propia de su dominio: y como Dios le puso por delante un tan famoso varon como era el Prior de san Millan, conoció ser este el enviado por Dios. Asi lo apunta Berceo (vers. 199. y 200.

Aspiró en el Rey, Príncipe de bona vida,
Una cosa que ante non avie comedida.
Vínole á desoras al Rey en corazon
De dar el Monasterio al precioso Varon &c.

57 Convocó á los señores de su consejo, y díjoles como era notoria la infeliz constitu cion del monasterio de Silos, antes glorioso, ya casi destruido: que como por una casa de religion es ilustrado un Reyno por las alabanzas que de dia y

de noche se dan á Dios, asi puede, ser desgraciado, si es des atendida. Quisiera, dijo el Rey, poner alli sugeto que la redugese á su debido honor: y como en el Prior de S. Millan, á quien Dios nos ha enviado, florece tanto cúmulo de prendas, qui

siera enviarle allá con cargo pastoral, pues nadie podrá desempeñar la empresa con mas satisfaccion. Aprobaron todos con aplauso el pensamiento del Rey: y dando cuenta al Obispo de Burgos, se complació en lo mismo. El Rey, gozoso de la eleccion, hizo que se anunciase al pueblo, seguro de la general aclamacion con que todos celebrarian el aci. rto, como afirma Grimaldo: y añade Berceo, que cuando los Monges de Silos lo supieron, se alegraron cual nunca, y al punto cantaron el Te Deum con indecible júbilo.

58 Dió el Obispo la bendicion de Abad al Santo ya Prelado de Silos: y el Rey hizo la demostracion de su gozo, enviando al Santo á Silos con una numerosa comitiva de Prelados, y Señores, como afirma Grimaldo, y expone Berceo. Esto fue en el año de 41, 6 principio del siguiente: pues en 1.° de Julio del año 1042. se halla ya confirmando un privilegio del Rey D. Fernando al Obispo de Burgos D. Gomez con expresion de Abad de Silos: Dominicus Abba in S. Sebastiani de Silos conf. como prueba la escritura 87. de Berganza, la cual convence el mal informe de los que ponen la posesion del Santo Tomo XXVII.

en Silos despues del expresado año de 42. en el 45. pues consta tres años antes.

59 Conviene examinar el tiempo en que empezó, pues de aqui pende el saber cuántos años gobernó la Casa, en todo lo cual hay variedad, y en Santo tan esclarecido debemos prevenir cuanto se pueda averiguar.

60 El año y dia de la posesion se deduce por el caso que refiere entre los milagros. Pero Marin, Monge del mismo Monasterio, en el cap. 24. (aunque no está numerado) pag. 153. de Vergara. Alli vemos que el Prior del Monastesio en el año 1283. dijo delante de la Comunidad, y de mas de cien hombres (sin que nadie le contradigese) que el Santo fue alli Abad 23. años, menos 35. dias. Aqui debe leerse 33. en lugar de 23. sin duda alguna, porque desde el 42. en que le hallamos confirmando como Abad, hasta el 73. en que sin duda acabó, van 31. años; y asi de ningun modo puede leerse alli el número de 23. sino decir que el copiante puso 23. en lugar de 33. me¬ nos 35. dias: y de estos resulta que empezó el Santo en 24. de Enero del 1041. desde cuyo dia y año hasta el 20.de Diciembre Ee

del 1073. en que falleció, van los 33. años menos 35. dias: pues si hubiera sobrevivido estos 35. dias hasta 24. de Enero del 74. resultaban desde el 24. de Enero del 41. los 33. años cabales y como dice le faltaron 35. dias para cumplirlos, resulta que empezó en 24. de Enero del 41. desde el cual año dia van los 33. menos 35. dias, hasta el 20. de Diciembre del 73. en que acabó.

y

61. Explícase de otro modo. El decir 33.años menos 35.dias, es lo mismo que 32. años y 331. 32. años y 331. dias (pues añadidos los 35. dias, sale un año entero, de 32. á 33.) Cuenta desde 24. de Enero del 41. al 73. y tienes 32. años. Añade desde 24. de Enero los dias hasta 20. de Diciembre, y tienes los 331. dias que vivió sobre los 32. años: y esto es lo mismo que 33. años menos 35. dias.

62 Insistimos en esta prueba, por cuanto de ella sola pende el principio de la Abadía del Santo: y el esmero de referir los años menos tantos dias, denota que entonces (esto es, 110. años despues de su glorio. so tránsito) tenia la Casa ave riguado el tiempo de su Abadía con puntualidad.

63 Yepes y Castro dicen que

el Rey D. Fernando dió orden de que el Abad de Silos D. Nuño renunciase la Abadía, para que la poseyese S. Domingo. Vergara reduce esto á equivocacion, y dice que D. Nuño no era Abad de S. Sebastian, sino de S. Miguel, Monasterio que se unia con el otro por una esquina, cuyas Iglesias perseveran hoy. Pero por otro lado incide en lo que escribieron los otros: pues dice que D. Nuño se retiró á la Iglesia de S. Miguel: y si se retiró, es prueba que no vivia antes alli: y como no resta mas que la Iglesia de S. Sebastian, resulta que estaba en ella, pero que la dejó cuando el Santo llegó.

64 Lo cierto es que D. Nu ño era Abad en S. Miguel en el año 1056. en el año 1056. en que cedió aque, lla Casa, con todos sus bienes al Abad S. Domingo. Esto prueba que eran Casas diversas las de S. Miguel y de S. Sebastian, hasta que D. Nuño incorporó la una con la otra por la Escritura que propone Castro lib. 3. cap. 3. pag. 287. Antes de aquel año 1056. presidia en una D. Nuño, y en otra S. Domingo desde el 1041. La duda es si antes del 41. pertenecian ambas Casas á D. Nuño: y los que di→ cen haberse retirado á S. Miguel

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