Trabajos de Persiles y Sigismunda: Historia setentrional, Volumen 1

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En la Imprenta de Sancha, 1802 - 394 páginas
 

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Pasajes populares

Página xiv - ... -Sí, sí; éste es el manco sano, el famoso todo, el escritor alegre, y, finalmente, el regocijo de las Musas.
Página xv - ... -Eso me han dicho muchos -respondí yo-; pero así puedo dejar de beber a todo mi beneplácito, como si para sólo eso hubiera nacido. Mi vida se va acabando; y, al paso de las efemérides de mis pulsos -que, a más tardar, acabarán su carrera este domingo-, acabaré yo la de mi vida.
Página xi - Ayer me dieron la Extremaunción, y hoy escribo ésta: el tiempo es breve, las ansias crecen, las esperanzas menguan, y con todo esto llevo la vida sobre el deseo que tengo de vivir...
Página xi - Puesto ya el pie en el estribo, Con las ansias de la muerte, Gran Señor ,. esta te escribo.
Página xvi - ¡Adiós, gracias! ¡Adiós, donaires! ¡Adiós, regocijados amigos! Que yo me voy muriendo y deseando veros presto contentos en la otra vida.
Página iii - Con esto le despedí, y con esto me despido, ofreciendo a Vuestra Excelencia Los TRABAJOS DE PERSILES Y SIGISMUNDA, libro a quien daré fin dentro de cuatro meses, Deo volente; el cual ha de ser, o el más malo o el mejor que en nuestra lengua se haya compuesto, quiero decir de los de entretenimiento; y digo que me arrepiento de haber dicho el más malo, porque, según la opinión de mis amigos, ha de llegar al extremo de bondad posible.
Página xv - Esta enfermedad es de hidropesía, que no la sanará toda el agua del mar Océano que dulcemente se bebiese: vuesa merced, señor Cervantes, ponga tasa al beber, no olvidándose de comer, que con esto sanará sin otra medicina alguna.
Página 339 - De tal manera — respondió Auristela — ha contado su sueño mi hermano, que me iba haciendo dudar si era verdad o no lo que decía. A lo que añadió Mauricio: — Esas son fuerzas de la imaginación, en quien suelen representarse las cosas con tanta vehemencia que se aprehenden de la memoria, de manera que quedan en ella, siendo mentiras, como si fueran verdades.
Página xi - Todavía me quedan en el alma ciertas reliquias y asomos de las Semanas del jardín y del Famoso Bernardo. Si a dicha, por buena ventura mía, que ya no sería ventura, sino milagro, me diese el cielo vida, las verá, y con ellas fin de La Calatea, de quien sé está aficionado vuesa excelencia; y con estas obras, continuando mi deseo, guarde Dios a vuesa excelencia como puede.
Página 57 - ... no pensando que en ello ofendía a nadie, y deste entrego resultó haberle dado dos hijos, como los que aquí veis, que acrecientan el número de los que alaban al Dios verdadero; en veces le truje alguna cantidad de oro de lo que abunda esta isla, y algunas perlas que yo tengo guardadas...

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