Las comunidades de Castilla: poema en siete cantosLa Ilustración española, 1856 - 221 páginas |
Otras ediciones - Ver todo
Términos y frases comunes
acude Acuña Adriano aguarda amor aquesta arma armas arrojo ausilio batalla Bravo brazos Caliope CANTO Cárlos Cartago Castilla caudillo causa César comuneros Conde Cortes de Ávila cruda cruel defender despotismo Despues dice Duero ecsisten egército enemigo espanto España español esposa estrago estrangero estremado fatal feliz feroz fiel fiero Fonseca fortuna Francisco Maldonado fuego fuerte furia furiosos furor gefe ginetes Giron gloria guerra habia horrores humillado huyen Iberia imperiales imperio infeliz inquisicion instante libertad libertára liga llega Maldonado mando María Pacheco Medina mira mónstruo morir muerte mundo murallas muro nacion noble nombre Numancia obispo Acuña orgullosa Padilla patria pecho perecer piélago Pisuerga poder pronto pudiera pueblo punto quiero rabia regentes reina retirada ruinas Sagunto salvar sangre sarracena Sertorio soldado suerte tambien terrible tiranos toledano Toledo Tordesillas Torrelobaton traicion traidor triste triunfo trono tropas valiente Valladolid valor vencer victoria villa Villalar Viriato
Pasajes populares
Página 207 - No quiero más dilatar, por no dar pena al verdugo que me espera, y por no dar sospecha que por alargar la vida alargo la carta. Mi criado Sosa, como testigo de vista é de lo secreto de mi voluntad, os dirá lo demás que aquí falta; y así quedo dejando esta pena, esperando el cuchillo de vuestro dolor y de mi descanso.
Página 208 - ... tu legítimo hijo, Juan de Padilla, te hago saber como con la sangre de mi cuerpo se refrescan tus victorias antepasadas. Si mi ventura no me dejó poner mis hechos entre tus nombradas hazañas, la culpa...
Página 207 - Quisiera tener más espacio del que tengo para escribiros algunas cosas para vuestro consuelo: ni á mi me lo dan, ni yo querría más dilación en recibir la corona que espero. Vos, señora, como cuerda llorad vuestra desdicha y no mi muerte, que siendo ella tan justa, de nadie debe ser llorada.
Página 207 - ... vuestra desdicha y no mi muerte, que siendo ella tan justa, de nadie debe ser llorada. Mi ánima, pues ya otra cosa no tengo, dejo en vuestras manos; vos, señora, lo haced con ella como con la cosa que más os quiso. A Pero Lopez mi señor no escribo porque no oso, que aunque fui su hijo en osar perder la vida, no fui su heredero en la ventura.
Página 208 - ... mi agravio. Muchas lenguas habrá que mi muerte contarán, que aun yo no la sé , aunque la tengo bien cerca : mi fin te dará testimonio de mi deseo. Mi ánima te encomiendo , como patrona de la cristiandad: del cuerpo...
Página 207 - López, mi señor, no escribo porque no oso, que aunque fui su hijo en osar perder la vida, no fui su heredero en la ventura. No quiero...
Página 208 - Padilla , te hago saber , como con la sangre de mi cuerpo se refrescan tus victorias antepasadas. Si mi ventura no me dejó poner mis hechos entre tus nombradas hazañas, la culpa fue en mi mala dicha, y no en mi buena voluntad.
Página 208 - Muchas lenguas habrá que mi muerte contarán, que aun yo no la sé, aunque la tengo bien cerca: mi fin te dará testimonio de mi deseo. Mi ánima te encomiendo, como ' patrona de la cristiandad: del cuerpo no hago nada, pues ya no es mió. ni puedo mas escribir, porque al punto que esta acabo, tengo á la garganta el cuchillo, con mas pasión de tu enojo que temor de mi pena...
Página 206 - Señora: si vuestra pena no me lastimara más que mi muerte, yo me tuviera enteramente por bienaventurado; que siendo á todos tan cierta, señalado bien hace Dios al que la da tal, aunque sea de muchos plañida y de él recibida en algún servicio. Quisiera tener...
Página 206 - ... en recibir la corona que espero. Vos, señora, como cuerda, llorad vuestra desdicha y no mi muerte, que siendo ella tan justa, de nadie debe ser llorada. Mi ánima, pues ya otra cosa no tengo, dejo en vuestras manos. Vos, señora...