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compañías que ha de haber para la guardia desta ciudad y galeras, y estas son del tercio,deste reino que no está á

mi cargo.

Cuanto á las personas que V. M. manda que queden este invierno cerca de la mia, ya escribí desde Corfú que el Conde de Santa Flor se habia ido á su casa con licencia mia: lo mismo ha hecho Ascanio de la Corna con que me ha prometido que vendrá siempre que le llame. Francisco de Ibarra se irá á Milan donde tiene su casa como se vaya el Comendador mayor, porque me ha significado que son muy importantes las causas familiares que tiene de ir á ella. Los demas oficiales quedan aquí con los cuales se dará recaudo á lo que hubiere que hacer sin que haya falta ninguna.

Con las personas que aquí se entretienen se hará lo que V. M. manda cerca de lo que toca á sus sueldos. Lo mismo se hará con el Doctor Morcat, y se le escribirá á Taranto donde le envié á prevenir victualla, que se vaya á Nápoles, pues este invierno tendrá poco que hacer aquí. Guarde nuestro Señor la Católica Real Persona de V. M. etc. De Mesina á 11 de noviembre de 1571-Don Juan de Austria.

Carta de D. Juan de Austria á D. García de Toledo.

Mesina 15 de noviembre de 1571.

Avisa á D. García de Toledo que partia aquella noche de Mesina el capitan Luis de Acosta con seis galeras para su transporte, encargándole lo verificase con la mayor brevedad.

Muy Ilustre Señor-El capitan Luis de Acosta parte de aquí esta noche con seis galeras de España en las cuales y en la capitana de Juan Andrea Doria ha de venir Vm.

po

á

Héle ordenado que use de toda la diligencia que fuere sible en llegar de aquí á Lisina, y que dende allí pase Génova á traer diversas cosas de que tienen falta estas galeras, y particularmente diez mil ducados que de allí se han de traer. Vm. le mande lo que habrá de hacer y procure de venirse con la mayor brevedad posible porque ya comienzo á sentir mucho su soledad. Nuestro Señor guarde la muy ilustre persona de Vm. como desea. De Mesina á 15 de noviembre 1571-A servicio de Vm.Don Juan.

Carta de D. Juan de Austria á D. García de Toledo.

Mesina 15 de noviembre de 1571.

Avisa á D. García que despues de escrita la antecedente se resolvió embarcar en las mismas galeras ochocientos infantes, y le encarga que si por mal tiempo no pudiesen pasar á Génova ordene su desembarco en Liorna para evitar los gastos que causarian con su dilacion.

Despues de haber escripto otra carta que lleva el capitan Luis de Acosta, se tomó resolucion de embarcar en las galeras que van á su cargo hasta ochocientos infantes italianos de la coronelía de Segismundo de Gonzaga; y porque podria ser que por el mal tiempo estas galeras no pudiesen pasar á Génova con brevedad, en tal caso ha de ordenar Vm. questos soldados se desembarquen en Liorna y se vayan á Lombardía por la via que les parescerá, pues no es bien questén consumiendo la victualla y gastando las galeras pudiéndose escusar. Guarde nuestro Señor la muy ilustre persona de Vm. como desea. De Mesina á 15 de noviembre de 1571-A servicio de Vm.Don Juan.

Carta de D. Juan de Austria á D. García de Toledo.

Mesina 25 de noviembre de 1571

Incluye á D. García un traslado del despacho que enviaba á S. M. acerca de la continuacion de la liga y los efectos que con ella se habian de hacer el año siguiente, encargándole que visto su contenido avisase á Roma al embajador D. Juan de Zúñiga lo que le pareciese en esta materia.

Por no saber si este despacho alcanzará á Vm. en Pisa, pues ha ya diez dias que partieron las galeras que le han de traer, seré breve en esta, y tanto mas por remitirme á los treslados de los despachos que van para S. M., los cuales Vm. vea. Conviene mucho que en caso que esta carta llegue antes de su partida, avise á Roma al embajador D. Juan de Zúñiga de todo lo que cerca dello se le ofrecerá, aunque á la verdad yo no veo que se pueda tomar resolucion alguna hasta saber la voluntad de S. M. Quedo con salud, á Dios nuestro Señor gracias, que guarde la muy ilustre persona de Vm. como desea. De Mesina á 25 de noviembre de 1571.

De puño propio.

Vm. se nos dé priesa á venir, que demas de quedarle yo esperando con gran deseo de que llegue, conviene verdaderamente mucho su asistencia por acá-A servicio de Vm.-Don Juan.

Copia del despacho enviado por D. Juan de Austria á Felipe 2, que

se cita en la carta anterior.

Sacra Católica Real Majestad-El Comendador mayor de Castilla partió de aquí para Nápoles á 15 del presente con el Marques de Santa Cruz, con resolucion de pasar de allí á Roma, y estar en aquella córte algunos dias

atendiendo á las cosas de la liga, conforme á la órden que tiene de V. M.; y aunque antes que este despacho llegue, soy cierto que V. M. habrá ya ordenado como es servido que se proceda con el Papa cerca de las cosas que se habrán de hacer el año que viene, y que tambien se habrán visto mis despachos y los del Comendador mayor en que se ha escripto largo sobre esta materia; habiendo tenido algunas cartas del embajador D. Juan de Zúñiga, en que me escribe que el Papa habia ya comenzado á dar priesa para que conforme á la capitulacion de la liga se diese principio á resolver lo que se ha de hacer el año que viene, y que está muy presto en que se haga la expedicion general, me ha parescido por lo que al servicio de V. M. debo escribir lo que se me ofrece en este negocio tan grave segun el estado en que las cosas presentes se hallan, que será casi lo mismo que por otros tengo escripto antes de agora.

Tratando primero de lo que particularmente toca al servicio de V. M. en que todos sus criados y vasallos, y yo mas que otro ninguno estamos obligados á nos desvelar, en dos maneras parece que se podria gozar y sacar fruto de la victoria que Dios nuestro Señor ha sido servido de darnos contra sus infieles: una atendiendo á las cosas de Berbería y principalmente á lo de Argel, y otra siguiendo la victoria por estas partes y haciendo daño al enemigo. En la primera aunque convenga lo que todos sabemos, veo una gran dificultad porque el Papa y venecianos no han de venir en ello, y á la verdad parece que no seria observar la capitulacion de la liga cuando venecianos fuesen invadidos en sus estados como se ha de tener por sin dubda que lo han de ser el año que viene, á lo menos por tierra á la parte de Cataro, donde la arma

de

da de la liga los podria ayudar mucho, pues el capítulo 6. trata particularmente de lo que á esto toca; demas que habiendo perdido ellos á Chipre tan poco tiempo ha, tambien podrian pretender que se tratase de cobrarla, á lo cual añadirán lo que todos dicen comunmente que si el año que viene se goza de la ocasion por hallarse el Turco desarmado por mar, se le podrá hacer gran daño, lo que no será si se le da tiempo que se arme. Y así cuanto á mí tengo por sin dubda que el Papa y venecianos se han de ofender mucho en solo que se trate de otra cosa que de la expedicion general.

Siendo esto así y estando entendida la grand magnanimidad de V. M. que de tan atrás ha acostumbrado á posponer sus cosas particulares por las que tocan al beneficio comun de la república cristiana, y considerándose tambien la terribilidad de la condicion del Papa y de cuanto momento son las gracias que ha concedido por causa de la liga, no veo que en ninguna manera se pueda dejar de condescender á lo que propone de la expedicion general.

Es agora de ir considerando si habria forma para que cumpliendo con la capitulacion de la liga y con lo que el Papa quiere, se pudiese atender á las cosas particulares de Berbería. Y á esto digo como por otros despachos mios se habrá visto, que tengo por cierto que lo de Tunez y Biserta lo podré allanar yo por todo marzo, y á lo mas tarde por mediado el mes de abril, quedando la armada de V. M. en órden para el tiempo que está capitulado.

A este fin pues soy de parecer que se vayan encaminando los medios que se habrán de tener y provisiones que se habrán de hacer con muy gran diligencia. Cuales estos habrán de ser, V. M. y los que le sirven en sus Con

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