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estuviese Vm. tan cerca que los pudiese yo tomar como lo deseo. Lo que de presente pido con todo encarecimiento es que me avise Vm. en diligencia cual le paresce que sea mas conviniente á una armada, juntándose con la del enemigo, disparar primero la artillería, ó aguardar que la dispare el contrario, porque siendo cosa tan importante como es, veo aquí diversos paresceres y opiniones sobre ella, y deseo yo ver el de Vm., el cual tendré por el mas acertado que el de ningun otro, cuya muy ilustre persona guarde nuestro Señor como desea. De Mesina á 31 de agosto 1574.

De puño propio.

Cosa es esta sobre que se ha debatido los unos en contra de los otros: algunos alegan que tirar primero causa en el enemigo confusion y embarazo: los otros, que dejarlo para despues de haber tirado el enemigo se corre el riesgo y ceguedad del humo, y el temor que se cobra por la gente, siendo primero acometidos: materia es en que puede haber disputa; pero con el parescer de Vm. saldré yo della-A servicio de Vm.-Don Juan.

Carta de D. Juan de Austria á D. García de Toledo.

Mesina 6 de setiembre de 1571.

Participa á D. García haber llegado los venecianos á aquel puerto con sesenta galeras, y tambien el Marques de Santa Cruz y Juan Andrea Doria con las de su cargo, y que saldria á la mar con toda el armada puesta en órden de batalla de 9 á 10 del mismo mes.

Muy Ilustre Señor- A los 31 del pasado escribí á Vm. avisándole del estado en que se hallaban las cosas desta armada hasta aquella hora: lo que en esta tengo que decir es, que las sesenta galeras de venecianos que

se esperaban llegaron al puerto desta ciudad á 1.° del presente. Juan Andrea llegó el siguiente dia con once galeras: ayer que fueron los cinco el Marques de Santa Cruz con las treinta de su cargo: de su llegada he recibido tan gran contentamiento como me daba congoja su tardanza. A los 9 ó 10 del presente, á Dios placiendo, saldré de aquí con el armada, dende donde irá tan á punto y en órden de pelear como si se hobiese de encontrar la del enemigo á la boca del Faro. Espero en su Majestad Divina que mediante su favor se han de hacer tales efectos que él sea muy servido, y aumentada su santa Religion. Lo que se entiende del armada enemiga se verá por los avisos que con esta irán: de lo demas que subcediere daré aviso á Vm, Guarde nuestro Señor la muy ilustre persona de Vm, como desea. De Mesina á 6 de setiembre 1571-A servicio de Vm.-Don Juan,

Carta de D, Juan de Austria á D. García de Toledo.

Mesina 9 de setiembre de 1571,

Avisa que si el tiempo lo permitia pensaba salir la tarde del mismo dia á la Fosa de S. Juan con toda el armada para seguir su camino la vuelta del cabo de Otranto, y las noticias que tenia de la direccion de la escuadra enemiga.

Muy Ilustre señor-Con la ocasion de una estafeta que despacho á Nápoles, me ha parescido avisar á Vm. que estos señores venecianos á la fin se han acabado de resolver en tomar en sus galeras cuatro mil infantes de los de S. M., es á saber, mil y quinientos españoles, y dos mil y quinientos italianos, y así se les quedan consignando á estas horas.

Por lo que toca á las galeras de S. M. podríamos partir cuando nos pareciese si hiciese tiempo para ello, que al presente es contrario; porque alguna poca victualla que no han podido tomar las galeras que han despalmado, se va recibiendo. Las de venecianos se van tambien despachando y aguardan la gente que les ha de venir de Calabria. Si el tiempo no me lo estorba pienso salirme esta tarde ó á la mañana á la Fosa de San Juan para seguir mi camino la vuelta del cabo de Otranto.

Del Comendador Gil de Andrada he tenido la carta cuyo traslado va con esta, conforme con otro aviso que ha venido por via de Venecia en que escrben que la armada del Turco era salida del golfo de Cataro é iba la vuelta de la Velona. De lo que mas se fuere entendiendo será Vm. avisado, cuya muy ilustre persona nuestro Señor guarde como desea. De Galera en Mesina á 9 de setiembre de 1571-A servicio de Vm.-Don Juan.

Carta de D. García de Toledo á D. Juan de Austria.

Poyo (Poggio) 13 de setiembre de 1571.

Parecer que envió D. García de Toledo á D. Juan de Austria sobre si era mas conveniente que fuese S. A. con el armada á Taranto ó á Brindez, y tambien si era mas útil que se adelantase á disparar el primero su artillería ó aguardar que el enemigo lo hiciese, con la ruta que debia llevar si pasaba al puerto de Brindez.

Serenísimo Señor-Tres dias ha que por via de Roma recibí juntas dos cartas de V. A. de 25 y 30 del pasado, y ayer la de 31 del mismo: beso á V. A. muchas veces las manos por la merced y favor que en todas ellas se me hace, y por el particular aviso que se me ha mandado dar del viaje de V. A. y lo demas, que en todo la he

rescibido tan grande como lo es la voluntad que yo tengo de servir á V. A., certificándole que en cuanto yo fuere bueno y supiere, no me podré cansar jamas en hacer este oficio; antes me dará mucho descanso estando tan obligado á ello por cualquier respecto y particularmente por corresponder en esto en parte á las mercedes que V. A. me ha hecho y hace cada dia: certificando ansí mismo á V. A. que otros podrán quizá hacerme ventaja en las obras, pero no en la voluntad, y ansí con ella diré ahora lo que se me ofrece en respuesta de lo que V. A. me manda, y es que á mi parecer V. A. ha de hacer por su voluntad al principio lo que seria forzado hacer despues á lo último, ques no dársele nada de que hablen y digan las gentes lo que se les antojare por ques costumbre muy vieja del mundo hablar todos lo que no entienden ni saben, como si estuviesen al cabo dello; y si compareciesen Neptuno y Marte, á cada uno en su oficio querrian dar leyes de la manera que se habrian de gobernar; y los que mas largo suelen hablar en esto son los que jamas vieron agua salada ni la piensan ver: esto digo por lo que V. A. dice que le quieren contar su armada por el número de las galeras y no por la calidad de ellas, pues está claro que sin gente que combata el mucho número hace росо al caso, y es tanto como no tener nada. Haga V. A. el corazon ancho á sufrir lo que las gentes han de decir, porque llegará á término que cuando hubiese tomado la mitad de la armada á los enemigos, gritarian que por qué no la tomó toda, y si esto se hiciese se quejarán que por qué no tomó á Constantinopla. Gobiérnese V. A. con la prudencia que debe como yo creo que hará segun puedo juzgar de los principios que lleva, y déjese de todo lo demas que puedan decir, porque mas vale

que con razon le alaben los sabios, que sin ella los ignorantes. Diceme V. A. en su última carta que pensaba irse á Taranto con el armada, y aunque las causas que mueven á V. A. deben ser bastantes, remitiéndome yo á los que estan presentes como lo hago, todavía diré en esto lo que me ocurre con protestacion que valga por no dicho, pues sabe mas el que está presente durmiendo que el ausente velando; y ansí digo que Taranto no mẹ paresce lugar tan conveniente como Brindez para ir allí la armada por ques fuera de camino, y el ir allí parece ques mas para defensa que para ofensa.

Allende desto no sé yo si agora pueden entrar las galeras en el mar Picholo que es el puerto seguro; que fuera dél es una muy ruin estancia para tanta armada, mayormente que andar haciendo agujeros para meterla, en estos principios no sé si paresceria bien; y si los enemigos fuesen mas poderosos y viniesen á la isla, tendrian ellos la mejor estancia para el mal tiempo, y no convendria demas de otros inconvenientes para la reputacion y estado de las cosas, tener encerrado á V. A. en tal lugar, ó forzalle á venir á otros mayores. Brindez tendria yo por buena y muy segura estancia por quel puerto es muy capaz para toda la armada, y es llegarse al enemigo y en el camino derecho para mostrar que se busca en parte donde se da mucha calor á las cosas de Cataro y á toda la Esclavonia, lugar seguro para un mal tiempo y peligrosísimo para cualquier armada que viniese á buscar la que allí estuviese: que ya es razon comenzar á tener cuenta con los tiempos, trayendo tan gran armada, y siendo estas marinas de que se trata peligrosísimas de navegar como entre un poco el tiempo. Dirán algunos quel puerto de Brindez siendo la armada del enemigo mas po

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