El Folk-lore andaluz

Portada
 

Páginas seleccionadas

Términos y frases comunes

Pasajes populares

Página 195 - Dos y dos son cuatro cuatro y dos son seis, seis y dos son ocho, y ocho dieciséis, y ocho, veinticuatro, y ocho, treinta y dos, ánimas benditas, me arrodillo yo.
Página 162 - El trabajador de la ciudad, lo mismo el albafiil que el herrero ó el carpintero, tiene un vestido para el trabajo y otro para la calle; y lleva, cuando sale del corral, en una mano el almuerzo, y en la otra, liados en un pañuelo, los calzoncillos y la blusilla de que se sirve para aquél. El almuerzo del trabajador de la ciudad — y á, estos trabajadores por milagro se les llama obreros — consiste en uno ó dos bollos de pan (cunáis, albarditas, bobas; que estos nombres tienen...
Página 367 - ... y recitando monólogos inofensivos; y aunque del corral á la taberna no hay más de un paso, esto se entiende al ir, y nunca al volver; porque el camino de la vuelta es cuesta arriba para el borracho. Este, si ha logrado salvarse de dar con sus huesos en la casilla, lleva el escándalo al corral; empezando por mortificar á la casera, siguiendo por despertar de su sueño á los vecinos pacíficos, y acabando por maltratar de obras y de palabras Á, la pobre de su mujer, la cual exclama, si tiene...
Página 128 - ... en la cual casucha, que no tendrá, en la parte que de habitacion sirve, más de cuatro varas en cuadro, y he echado por lo largo, el corral representa el primer papel. Fuera de estos barrios, el corral no se encuentra ni por un ojo de la cara; y es, que el pobre no puede habitar por sí solo una casa dentro de lo que vulgarmente llamamos el casco de la ciudad, y el corral es el desahogo del pobre, como el jardin lo es del rico. Pero si en las ciudades de Andalucía van desapareciendo los corrales...
Página 43 - ... y no faltó poeta que se los diese; que también hay poetas que se acomodan con gitanos, y les venden sus obras, como los hay para ciegos, que les fingen milagros y van a la parte de la ganancia. De todo hay en el mundo, y esto de la hambre tal vez hace arrojar los ingenios a cosas que no están en el mapa.
Página 471 - Iglesia ha bendecido, sino porque los pobres se cargan de lujos; y como las necesidades son muchas y los medios para satisfacerlas escasos, las ansias y las fatigas crecen á medida que las fuerzas menguan, y todos son apuros. Pero la novia no escarmienta en cabeza...
Página 417 - ... puestas de acuerdo las vecinas más serviciales sobre cuál ha de ser la que llevará en brazos al niño, la comitiva sale de la sala y se encamina á la iglesia. Van en ella, á más de los padrinos y algunos parientes, cuantos vecinos quieren presenciar la ceremonia. Las mujeres lucen...
Página 468 - ... en que los novios se han tomado los dichos. De cien mujeres del pueblo, en Andalucía se casan ochenta de diez y ocho á los veinticinco -años; quince antes de los diez y ocho, y las cinco restantes cumplidos los veinticinco. Al casamiento precede el noviazgo, que suele durar años y años, siglos para los amantes; y al íioviazgo, la declaracion. Declararse un hombre á una mujer vale tanto como manifestar el hombre á la mujer á quienquiere, sus sentimientos. «Fulano se ma ha declarado,»...
Página 471 - Dios en que liarán otro tanto que su amiga; si bien creen que de una boda salen otras bodas, y tienen la esperanza de que sus novios se contagiarán con el ejemplo; porque es una verdad, que no...
Página 184 - Con el gentío del pueblo Que les iba acompañando. Por la calle adonde van A costa del Rey gastaron En un arco muy polido Mas de treinta y cuatro cuartos.

Información bibliográfica