ba. Y finalmente se hallò en la memorable batalla de Simancas, donde quedaron muertos ochenta mil Mahometanos, escapando mal herido Abderramen III. Rey de Cordoba. En el año de 941. confirmò como Rico-hombre la donacion, que sus Padres hicieron al Monasterio de Celanova. En el de 950. confirmò entre los Ricos-hombres, y Prelados, la donacion del Rey D. Ramiro II. al Monasterio de Sahagun, uniendole el de San Lorenzo de Saldaña. Dieronle los Reyes el titulo de Conde en Villanueva de Mondoñedo, donde tenian los Ossorios la mayor parte de su hacienda. Y haviendo muerto su padre, y D. Ordoño su hermano, sin succesion sin succesion permanente Doña Urraca su hermana, le escribiò à tierra de Campos donde resi→ dia, para que viniese à Galicia, para tomar la posesion de su grande herencia.

Vino el Conde à Villanueva [ dice la citada Cronica] con muy gran nobleza de Cavalleros, è otras muchas gentes de à pie, y con grandes tesoros, que traia de las entradas, que él fizo en tierra de Moros, , que continamente estaba allà, por el servicio de Dios, y de los Reyes. E asi como el era de noble linage, è de generacion, era letrado, è asi muy devoto de las cosas de Dios, é asi le alumbrò Dios, que havia de facer un Monasterio de la Orden de San Benito. Viviendo pues Santo Conde en Galicia con tan opulentos estados, y rico pa trimonio, siguiendo el exemplo de su hermana Doña Urraca, y de su Santo primo San Rudesindo, determinò fundar un Monasterio, dotandole de sus proprios bienes, en el qual se consagrase perfectamente à Dios en holocausto, como lo havia executado su tercero abuelo en el Monasterio de San Pedro, y San Pablo de Aguilar.

Comunicò este pensamiento con Theodomiro, Obispo de Mondoñedo, en cuya Diocesis se havia de fundar el Monasterio. Para una obra de tanta importancia no quiso el Obispo gobernarse por sì solo. Y, asi con consulta de Hermigildo, Arzobispo de Braga, de San Rudesindo, primo de nuestro Conde, Obispo de Dumio, de D. Gonzalo, Obispo de Leon, Sisenando, Obispo de Iria, Villulfo, y Rodrigo, cu◄ yos Obispados se ignoran, se determinò, y aprobò por todos la resolu cion del Conde. Este para mayor firmeza en 17. de Junio de 969. segun el testimonio copiado por el Maestro Yepes, otorgò la escriptura de fundacion, en la qual se desposeyò de muchos Monasterios de los quales era patrono, uniendolos al principal de Lorenzana, à quien concediò mil vasallos, amplisimas posesiones, Villas, Lugares, Iglesias, Monasterios, rentas, y grandisima copia de heredamientos. En esta es criptura dice el Conde asi. To Ossorio Gutierrez, confesor de Dios,

aun

aunque indigno, y de todas maneras hombre mundano, siempre desee, que en cada Lugar, donde poseyese algo, fuese heredero participante Dios, Criador de los Cielos, y de la Tierra, y dando èl su favor, fuese siempre servido, y adorado. Y asi ayudandome, y favoreciendome el Señor, que dixo: vuestro es el comenzar, y mio el dar fin perfecto à la obra; fue comun parecer mio, y de otros Catolicos, juntamente con D. Theodomiro, Obispo de Mondoñedo, hacer heredero à Dios, fundando un Monasterio de Monges en el dicho Lugar de Villanueva, que poco ha berede, &c.

Prosigue despues declarando, como havia venido al Concilio de los Obispos, para que le concediesen licencia para edificar el Monasterio. Por parecer [ dice] del dicho Obispo vine hoy aqui à Naviego, y asi con corazon humilde, obediente à Dios por su divino, y caritativo amor, suplico, y pido à todos los Obispos de esta congregacion, se me de, y conceda la Regla de San Benito , y mandeis , que el Lugar de Villanueva se dedique, y consagre al estado de la Santa Religion, y lo confirmeis, para que este Monasterio, que de nuevo se edifica en la Provincia de Lorenzana, permanezca firme, y establemente, como lo son aquellos, que de tiempos antiguos son fundados, y que Dios, y despues de el, los Monges, que aqui habitaren, posean perpetuamente este sobredicho Lugar. T comunicando esto entresi todos los Obispos, que en el dicho Concilio se hallaron, cuyos nombres son estos el sobredicho Obispo Theodomiro de Mondoñedo, Hermigildo, Obispo de Braga, Rudesindo, Obispo Dumiense, Gonzalo, Obispo de Leon, Sisenando, Obispo de Iria, Villulfo, Obispo, Rodrigo, Obispo, con otros muchos Santos Varones, todos ellos dixeron de esta manera: Leamos, y aprobemos lo que pide, y queremos que sea el Monasterio en Villanueva, para Dios, y para los Monges, que lo profesan por todos los siglos de los siglos. Amen.

Con tanta solemnidad fundò el Venerable Conde D. Ossorio à este Insigne Monasterio. Concediole el Coto, y Jurisdiccion de todo el Lugar de Villanueva con todos sus terminos, la Iglesia de San Jorge en Lorenzana, Villafeliz, Santo Tomàs, San Adriano, la Hermita de San Salvador, el Monasterio de Santa Maria la Mayor, la Villa de Paradas en Rio Torto, la Iglesia de San Pedro, la Iglesia de San Salvador en Pastorico, la Iglesia de San Mamete con la Villa de Goymundo, la Iglesia de Santa Maria de Rostregos, la Villa Edrosa en Azumara, y en Zarceta Froylana, las Encartaciones de Trasarico, los Heredamientos, y la Iglesia de Santa Maria en los Tres Vados, los de Guada, los de Onegildo, los de Balunga, los de Gundesindo, los de

Tc

Telorio, Villa-Rubia de Bubales, la Hermita de San Cosme con sus Montes, y Casales, la Iglesia de Santa Eulalia de Ambrosa, la Iglesia de San Juan de Villa Laurencio, los Vasallos, y Casales de Villa Mayor, Villa Toymir, Villa Vera, y Villandi, los Heredamientos de Mirome, y sus Collazos, la Iglesia de San Justo en Cabarcos, la Iglesia de Santa Cristina en Villa Cileyro, con sus Vasallos, y Heredades, la Iglesia de San Esteban en Aurias, el Monasterio de Veremundo en Vivar, la Vega de Ferrol, Villa Villa, Villa Marzan, la Iglesia de Santiago, la Iglesia de San Vicente en Ribadeo, con todas sus Tierras, Vasallos, Criados, Servidores, Esclavos, Pertenencias, Montes, Aguas, &c. Asi las doy, [ concluye ] y ofrezco, como las tuvieron mis padres D. Gutierre, y Doña Aldonza, y despues de ellos mis sobrinos los bijos de Ordoño, y Hermesenda, y yo despues de ellos.

Concedioles tambien todos los Ornamentos para la Iglesia, quatro Campanas mayores, y quatro menores, tres Cruces de plata, quatro Calices con sus Patenas, tres Coronas, tres Incensarios de plata, tres de bronce, Ornamentos de los Altares, ocho Frontales, vestiduras para veinte y cinco Sacerdotes, ocho vestiduras para los Acolitos, otros diez Ornamentos, Libros, Psalterios, Manuales, Sermones, Sabanas labradas, escaños de tapices, veinte y seis camas con almohadas para los Monges, doce camas para los pobres, con todos sus aparatos, vasos de plata, platos de lo mismo, copas doradas, cucharas, candeleros, diez bestias de carga entre machos, y caballos, para el servicio del Monas→ terio, ochenta yeguas con dos caballos, ciento y cinquenta bacas con tres toros, ciento y cinquenta yuntas de bueyes con sus majadas, mil ovejas en tres revaños, quinientos puercos, y trescientos ansares, encargandoles mucho, que socorriesen à los Peregrinos, Sacerdotes, Confesores, y huespedes pobres.

De esta magnifica fundacion se conocen evidentemente no solo los grandiosos estados, que poseyò esta Real Familia, sino tambien las heroycas virtudes de generosidad, magnificencia, piedad, caridad, y religion, para con Dios, que florecieron en el S. Conde D. Ossorio, el qual concluye la escriptura por estas palabras: Para que en esta obra (poniendo en ella todas mis fuerzas ) tenga perfecto fin, hago las donaciones al dicho Monasterio de Villanueva, y ultimamente me ofrezco d mi mismo para Monge, para servir à Dios en él.

Tardò en concluirse la obra ocho años, en cuyo espacio se empleaba el Venerable Conde en exercicios santos de virtudes. Quando llegò el tiempo de retirarse al Monasterio, mandò llamar à todos sus criados, y vasallos, y ajustadas quentas con ellos, les pagò quanto les de

bia, premiando à muchos por sus antiguos servicios. Luego despidiendose tiernamente de todos, les hablò en esta forma, que refiere la hist toria antigua de Lorenzana. Amigos, y muy leales Vasallos, ya sabedes, y haveis visto, quanto tiempo hemos andado en una compañia, y agora sabedes, como yo he fundado esta Casa del Orden de San Benito, à servicio de Dios, de Santa Maria, de San Pedro, y San Pablo, y de Santa Catalina, e de todos los Santos, e como es mi intencion de dexar el oficio de Cavalleria Seglar, que he tenido hasta aqui, e tomar las armas espirituales, que son de la Orden. Dixo, y pidiendoles perdon de sus faltas, desnudandose el vestido Militar, recibiò el Avito del Glorioso Patriarca San Benito en el año de 977. Con esta ocasion cum' pliò como Principe con todos sus criados, y vasallos: porque no queri endo dexar desamparados à los que le havian acompañado en las guer ras, escribió varias cartas al Rey, representandole los merecimientos de cada uno, para que los favoreciese.

En el Monasterio resplandeciò por muchos años en las virtudes religiosas de profundisima humildad, abstinencia, mortificacion, ayunos, penitencias, devocion, y ferventisima caridad para con Dios, asistiendo frequentisimo en todos los ministerios mas humildes, en los Divinos Ofi eios de la Iglesia, y Coro, en Vigilias por toda la noche, en contem→ placion, y otros trabajos corporales, con los quales estaban todos no solo edificados, sino tambien admirados. Asi prosiguiò hasta que con li eencia de su Abad pasò à visitar los Lugares Santos de Jerusalèn, como lo tenia prometido. Y haviendo despues vuelto al Monasterio con grande consuelo de su anima, prosiguiò en el mismo exercicio de virrudes en la vida contemplativa, y activa, hasta que lleno de años, virtudes, y merecimientos, descansò en el Señor en el dia 31. de Agosto, cuyo año no señala su historia. Su muerte fue tal [ dice el Maestro Fr. Antonio de Yepes y quedò tanta fama de sus insignes virtudes, que en todo el Valle de Lorenzana, y en toda aquella comarca es tenido en summa veneracion, y en el Convento, y en toda la tierra le respe tan como à SANTO, y celebran su fiesta. Ha hecho nuestro Señor por el muy gran numero de milagros, Vi la memoria de ellos, y si la bu→ viera de poner aqui toda fuera hacerla historia muy prolixa. Hasta aqui el Maestro Yepes, de cuyo testimonio consta, que el S. Conde D. Ossorio ha tenido en Galicia el culto immemorial de SANTO, con celebracion de fiesta. Asi habla en substancia del S. Conde, cuyo breve resumen hemos recopilado, sin que por esto sea nuestra intencion contra→ venir à los Decretos de la Santa Sede Apostolica. Sin embargo no dexamos de extrañar, que teniendo este Principe por descendientes suyos

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mayores Monarcas de la Europa, con toda la Grandeza de España, no hayan estos solicitado en tantos siglos la declaracion canonica de sus virtudes, y la de su culto en toda España.

Fuè sepultado su Venerable Cadaver en el Monasterio de Lorenzana en un magestuoso Sepulcro, formado de marmol exquisito de co lor entre blanco, y cardeno, con veras azules, y verdes muy relucientes. Tiene de relieve ciertas ondas, que rodean el Sepulcro, y à la cabecera, y pies, gravada la señal, que los Catolicos acostumbraban poner en sus sepulturas, para diferenciarse de los Hereges Arrianos. La Capilla donde està el Santo Cuerpo tiene de largo quarenta pies, y veinte y tres de ancho. Està fundada entre la Iglesia del Monasterio, y la Patriarcal de Santa Maria. Por la cabecera tiene una cueva, à donde se baxa por tres gradas. Despues se entra por un arco de hermosa canteria, donde està el Sepulcro levantado sobre dos columnas. A cada lado tiene una Urna, de las quales en una se juzga estar las cenizas de los hijos, y nietos del Conde, y en la otra està depositado el cadaver de su hermana Doña Urraca, fundadora de la Catedral de Mondoñedo. Cierrase el Sepulcro con una fuerte rexa de hierro muy bien labrada con los Escudos de los Ossorios, que por ser Lobos orlados con aspas de oro en campo de sangre, persuaden, que se pusieron alli despues de haver succedido este Linage en el Señorio de Villalobos, y despues de la conquista de Baeza. Sobre la cueva se muestra un corredor con un Altar sobrepuesto, donde se dicen las Misas, que piden los Peregrinos: porque vienen muchos à pedir al Santo favor en sus trabajos, concurriendo con milagros la poderosa mano de Dios

Estubo casado con Doña Urraca Nuñez Ossorio, su prima herma na, hija del Rico-hombre D. Nuño Ossorez, hermano de su padre, de cuya union fueron hijos

6. El Duque D. Gutierre, que continua la Casa mayor.

6. El Conde D. Vela Gutierrez Ossorio, que casando con Doña Maria, tubo por hijos de esta union 1. el Conde D. Rodrigo Velaz Ossorio, el qual restituyò al Monasterio de Lorenzana todos los bienes, que le havia usurpado el Obispo de Mondoñedo, dandole en compen sacion el valor de otros tantos bienes, que completaban la mitad de la fundacion. En la escriptura dice: Deo auxiliante Comes Rudericus Velaz videns hereditatem suam, & parentum suorum sub regali jure possitam, cui conveniens non erat, condoluit Monachis, ibi Deo servientibus, reminiscens corpora parentum suorum, ibi quiescentium, & diem mortis suæ. Consta de este instrumento, que yacen sepultados en el Monasterio de