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te. De ahí proviene que las combinaciones en que no puede entrar el oxígeno, y las descomposiciones que no puede efectuar en estado de gas, se verifican con la mayor facilidad dentro de los poros de la platina donde se halla condensado. Por ejemplo, cuando se dirige un chorro de gas hidrógeno sobre platina esponjosa, el hidrógeno se combina con el oxígeno condensado en el interior de la masa; fórmase agua en el punto de contacto de ambos gases y la consecuencia inmediata es que el calórico se desarrolla, la platina se caldea y enrojece, y el gas se inflama. Si se interrumpe la corriente de gas los poros de la platina se vuelven instantáneamente á llenar de oxígeno y el mismo fenómeno se puede repetir no solo otra vez, sino interminablemente.

En la platina finamente pulverizada y aun en la platina esponjosa poseemos pues un perpetuum mobile: un mecanismo semejante á un reloj que se diera á sí propio cuerda cuando ésta se le concluyese: una fuerza que nunca desfallece capaz de producir efectos poderosísimos y que se renueva á sí propia indefinidamente.

Muchos fenómenos que hasta ahora no se habian comprendido, se esplican en la actualidad satisfactoriamente por medio de estas propiedades de los cuerpos porosos recientemente descubiertos. La metamórfosis del alcohol en ácido acético por la manipulacion conocida con el nombre de fabricacion de vinagre instantáneo, se funda en principios á cuyo conocimiento nos ha conducido el estudio de dichas propiedades.

HISTORIA

Geográfica, topográfica y estadística de la villa de Cienfuegos y su jurisdiccion.

ARTICULO SEGUNDO.

Partido de Yaguaramas.

Despues de haber hecho la descripcion general de la villa de Cienfuegos, hallamos entre los datos que se nos han suministrado algunas breves noticias referentes á cada uno de los partidos de Yaguaramas, Santa Isabel de las Lajas, San Fernando de Camarones y Cumanayagua, comprendidos en la jurisdiccion de aquella villa. De ellos vamos á tratar separadamente segun los pormenores que tenemos á la vista y con presencia de las luminosas notas que sobre cada uno de los particulares se han agregado á estos trabajos estadísticos.

El partido de San Luis de Yaguaramas está situado en el Departamento central de la Isla, segun la division militar del territorio; es de la jurisdiccion del Gobierno de Cienfuegos, capital de la colonia Fernandina de Jagua. Lo limitan al E. el rio Damují, el puerto y la boca de Jagua, y al S. la costa. Al y al N. O. el camino real del Centro y los rios de la Hanábana, Gonzalez, Hatibonico y Cañas de la Península de la Broa. Confina con el barrio de Arango y partido de Camarones al E. y con el de las Lajas al N., con el de la Hanábana al O. y con el mar al S.

N.

La mayor estension de su territorio es en la direccion de E. á O. desde la Punta de la Sabanilla occidental de la boca del puerto de Jagua hasta la Punta Gorda, estremo de la Península de la Broa; cuarenta leguas provinciales en línea recta. Su mayor anchura es de N. á S., midiendo diez leguas desde el paso del rio Hanábana en la hacienda Venero hasta la costa.

Todo el partido es llano, sin montaña alguna; y en la parte del N. existen grandes sabanas, así como en la Península de la Broa; el del S. es cenagoso desde la hacienda las Charcas hasta los Mañeaderes, términos de esta jurisdiccion por el O. Es

tas ciénagas en tiempo de las aguas las retienen considerablemente y hacen intransitables los caminos. Todos los rios y arroyos que surcan este partido llevan sus aguas á la Ciénaga, la rebosan, forman una especie de inundacion que borra hasta los cauces de sus tributarios.

Esta pintura que á primera vista ofrece graves inconve nientes, es á nuestro juicio el gérmen fecundo é inagotable de fertilidad en esos terrenos. Es verdad que la falta de desagues de aquellas ciénagas produce la estancacion de las aguas, á que no ha podido todavía dar curso la mano del hombre auxiliada del arte y de la industria: aun existen allí incultos montes en donde no ha penetrado todavía persona alguna; pero luego que desaparezcan estas poderosas causas, esos mismos terrenos que hoy se desdeñan serán el objeto de una produccion rica y abundante, cesarán las inundaciones, huirán los miasmas, y aparecerán campiñas de eterna duracion. Esta es tambien la causa principal de que en aquellos bosques existan todavía abundantes maderas preciosas y de construccion.

Los caminos en general son buenos, atribuyéndose esta circunstancia á la calidad arenosa de la capa superior de los terrenos. Los que se dirigen á la costa por Charcas y Juragua tienen un piso alto y seco, practicable en todas estaciones, principalmente el que se abrió en 2844 para facilitar la comunicacion desde Yaguaramas hasta el castillo de Jagua. El camino que conduce de Cienfuegos á este partido continúa insertándo se con otros hasta la Habana, y su direccion es de E. á O. En el arroyo titulado Ortiz se construyó un puente de catorce varas de largo y seis de ancho; y aunque su construccion es de madera se han empleado las mas sólidas y descansa sobre horcones de jiquí. Este puente fué costeado por el Sr. D. José Isi+ doro de Armenteros.

Se desconoce en este partido el trabajo de calzadas, pues no se ve alguna. No está mas favorecido por la construccion de puentes. En el rio de la Hanábana ó del Caimito, término de esta jurisdiccion, hay establecida una canoa que nos recuerda los tiempos primitivos de la conquista. Este es el único medio, que no carece ciertamente de peligros, para cruzar este rio en sus grandes avenidas, que á veces sale de madre hasta llegar al caserío del Caimito, parte del curato de la Hanábana, aunque de la jurisdiccion civil de la Habana, segun la actual division del territorio.

En toda esta jurisdiccion no hay una montaña que pueda formar punto de vista en razon de su altura, pues las porciones montuosas todas están en terrenos llanos con una inclinacion sumamente insensible hacia el S. hasta la Ciénaga ó ensenada de Cochinos.

En casi todas las localidades de la Isla existen cavernas

de mayor estension y profundidad, de las que muy pocas han sido detenidamente descritas, contentándose con una sucinta relacion. Así ha sucedido con dos que vemos anotadas en las apuntaciones que nos sirven de datos. Dicese en éstas que en el Realengo de San Segundo de los Abreus se encuentra una especie de bóveda que dá fácil entrada à un espacioso salon como de seis varas de ancho, sostenida por una cantera de piedra viva; y en el término de este realengo en la Cieneguita hay otra cueva mas estrecha en su entrada, á la que sigue un salon de las mismas dimensiones poco mas ó ménos que el anterior. No tienen nombre propio y se distinguen con los de Cueva-grande y Cueva-chica.

En todas las haciendas de este partido hay sabanas de mayor ó menor estension, distinguiéndose por la feracidad de sus pastos, la del Alcalde Mayor que tiene grande estension. la de Sabana-La Mar, Galindo, Huésped, Diego, ambos Rincones, Yaguaramas, Ceiba, Aguada de Pasageros &c.

No hay acaso un territorio mas abundante en rios caudalosos que el que corresponde la jurisdiccion de Cienfuegos en general. El partido de Yaguaramas no es el ménos favorecido de esta ventaja, de este gérmen de fertilidad y vida.

El rio Damují, nombre que toma en el paso del Lechuzo, donde se dividen las jurisdicciones de los partidos Santa Isabel de las Lajas, San Fernando de Camarones y el de Yaguaramas. Hasta este punto en que se halla un paso peligroso á causa de las piedras y hoyos, tiene una agua potable; pero acre'ciendo rápidamente y ensanchando su cauce, sigue con magestad imponente por espacio de siete leguas hasta que prodiga sus aguas y las mezcla con las de la gran bahía de Jagua. Las márgenes de este hermosísimo y caudaloso rio ofrecen el aspecto mas variado. Dos fajas de mangleros y Júcaros hácia uno y otro lado en la parte inmediata al puerto de Cienfuegos, diversos muelles que sirven de embarcaderos á numerosas fincas, los pequeños buques de cabotage que cruzan aquellas aguas, los cuantiosos animales de los potreros, los inmensos plantíos de caña, aquel aspecto imponente y magestuoso de nuestra naturaleza en todo el esplendor de la fecundidad de nuestro clima: todo allí es grande y sublime y anuncia á la vez los beneficios que la Providencia ha derramado en nuestro suelo, el poder y la obra de la industria y del trabajo. El Damují es un rey entre los rios, es un Señor que impone el feudo á los demas y los obliga á tributarle sus aguas oponiéndose á su paso y los empobrece cuando mas necesidad tendrian de sus caudales. En efecto los arroyos Guavina, Ortiz y la Cieneguita son los principales tributarios. En el espacio de doce leguas provinciales que dista de este el rio de la Hanábana ó el Caimito, solo mantiene sus aguas el de el Alcalde Mayor; los

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demas que se forman en las sabanas y cejas de monte desaparecen en la estacion de la seca.

Existen tambien numerosas lagunas en este partido. Las del Venero al N., las del Jibaro y Cocodrilo al O., las de Cayamas y de San Nicolas al S.; y al S. O. las grandes y profundas lagunas de las Charcas; estremo oriental de la Ciénaga-Larga, formada por los derrames de los arroyos de las sabanas. En la península de la Broa, que es el gran espacio comprendido entre la ensenada de este nombre, la ciénaga de Zapata, la costa del S. y la ensenada de Cochinos, hay tambien grandes lagunas y casimbas fértiles y algunas salinas naturales.

Son tambien abundantes los manantiales. En el realengo de los Abreus se halla un manantial potable que los naturales conocen con el nombre de la Magüira, ofreiéndolos tambien casi todas las haciendas, ya en lagunas, ya en ojos de agua que conservan el nombre de los puntos en que están situados.

El puerto de Jagua ó Cienfuegos por las infinitas ventajas que reune es sin duda el mejor del globo. La ensenada de Cochinos que es una inmensa bahía, internándose tres leguas hácia el N, en el partido, lo divide casi enteramente en dos partes. Al E. desde el paso del Lechuzo hasta la punta de Jagua es todo abordable, midiendo como doce leguas, siete de rio y cinco de bahia, con mas ó ménos fondo; y solo en la boca del rio Damují se nota el bajo fondo de cuatro y medio pies, pudiendo navegar en lo restante buques del mayor calado.

En la misma bahía en las costas de la hacienda Juragua al Este de la Caimanera está la ensenada de Calixto con nueve pies de agua en fondo de arena y fango: dista una legua de la citada hacienda y tiene un estero muy abrigado. En la misma costa á una legua de distancia y en la propia bahía se halla la ensenada nombrada Jucaral con doce pies de agua y en fondo fangoso. En este se forma un estero de un manantial de la supradicha hacienda. De este á la punta la Sabanilla tiene inmensa profundidad, principiando en la embocadura del cañon de Jagua el golfo del S. que se dilata. Desde la punta de la Sabanilla á sotavento en la entrada del puerto de Jagua, toda la costa es acantilada y el mar sin sonda la hace inabordable á los buques mayores; y solo las embarcaciones de pescadores pueden acercarse á ella en tiempo de bonanza, y entrar en algunas pequeñas caletas que se encuentran en los seborucos. No tienen ciénagas pantanosas y solo se ven algunos manglares altos en la punta de este nombre.

Las ensenadas de Cochinos, de Calzones, de Matahambre y la de la Broa se hallan en aquel litoral; y en el interior del puerto de Jagua, el caleton de D. Bruno en el cañon de entrada del puerto con un fondo considerable, la del Jucaral y de Calixto ya mencionadas, y la de la Guavina.

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