El Ingenioso hidalgo don Quixote de la Mancha

Portada
Por Iuan de la Cuesta. Vendese en casa de Francisco de Robles, 1605 - 632 páginas

Dentro del libro

Otras ediciones - Ver todo

Términos y frases comunes

Pasajes populares

Página 168 - Aquel caballero que allí ves de las armas jaldes, que trae en el escudo un león coronado, rendido a los pies de una doncella, es el valeroso Laurcalco, señor de la Puente de Plata; el otro de las armas de las flores...
Página 78 - ... -¡Dichosa edad y siglos dichosos aquellos a quien los antiguos pusieron nombre de dorados; y no porque en ellos el oro, que en esta nuestra edad de hierro tanto se estima, se alcanzase en aquella venturosa sin fatiga alguna, sino porque entonces los que en ella vivían ignoraban estas dos palabras de tuyo y mío.
Página 70 - Y ansí, cuando yo le haga y te le dé, no tienes más que hacer sino que, cuando vieres que en alguna batalla me han partido por medio del cuerpo (como muchas veces suele acontecer), bonitamente la parte del cuerpo que hubiere caído en el suelo, y con mucha sotileza, antes que la sangre se yele, la pondrás sobre la otra mitad que quedare en la silla, advirtiendo de encajallo igualmente y al justo...
Página 89 - Grisóstomo, el difunto, fue grande hombre de componer coplas; tanto, que él hacía los villancicos para la noche del Nacimiento del Señor, y los autos para el día de Dios, que los representaban los mozos de nuestro pueblo, y todos decían que eran por el cabo.
Página 231 - ... me parece duro caso hacer esclavos a los que Dios y naturaleza hizo libres: cuanto más, señores guardas —añadió don Quijote—, que estos pobres no han cometido nada contra vosotros; allá se lo haya cada uno con su pecado; Dios hay en el cielo que no se descuida de castigar al malo, ni de premiar al bueno, y no es bien que los hombres honrados sean verdugos de los otros hombres, no yéndoles nada en ello.
Página 62 - ... que los leyese; y no fue muy dificultoso hallar intérprete semejante, pues, aunque le buscara de otra mejor y más antigua lengua, le hallara. En fin, la suerte me deparó uno. que. diciéndole mi deseo y poniéndole el libro en las manos, le abrió por medio y, leyendo un poco en él, se comenzó a reír.
Página 679 - Y si es que la imitación es lo principal que ha de tener la comedia, ¿cómo es posible que satisfaga...
Página 9 - Dios y en mi ánima que miente. —¿Miente, delante de mí, ruin villano? —dijo don Quijote—. Por el sol que nos alumbra que estoy por pasaros de parte a parte con esta lanza: pagadle luego sin más réplica; si no, por el Dios que nos rige, que os concluya y aniquile en este punto. Desatadlo luego.
Página 286 - Ya te tengo dicho antes de agora muchas veces. Sancho — dijo Don Quijote — , que eres muy grande hablador y que, aunque de ingenio boto, muchas veces despuntas de agudo...

Información bibliográfica