PRÓLOGO. ESTA tragedia, escrita en el año de 1769, y corregida en los de 1771 y 72, sale ahora á ver la luz pública. Algunas personas acostumbradas á mirar con indulgencia mis trabajos, la creyeron digna de tan buena suerte; yo no sé lo que piense de su mérito: mi juicio se arreglará al del público, que es las mas veces juez imparcial de estas materias. En medio de una multitud de ocupaciones, á que me tienen siempre sujeto el capricho y la necesidad, concebí el designio de escribir esta tragedia. Al punto puse en ejecucion esta idea; pero sobre un plan incorrecto y poco examinado. La escribí por intervalos en aquellos ratos que se llaman perdidos, porque no se consagran al desempeño de las principales obligaciones; pero que no merecen este nombre, cuando satisfechas aquellas llenan los hombres de letras sus ócios con tareas mas dulces, ó emplean en ellas los momentos que hurtaron al sueño y al reposo. Con esto digo que la escribí atropelladamente, y era forzoso que |