Disquisiciones nauticas, Volumen 2Aribau y c.a (sucesores de Rivadeneyra, 1877 |
Dentro del libro
Resultados 1-5 de 56
Página 88
... viaje , que no de- jará de pagar la deferencia publicando más tarde que co- men mal y con manteles ordinarios y sucios . No se con- formará con las horas reglamentarias , que sólo rezan con los mareantes ; juzgará muy natural disponer á ...
... viaje , que no de- jará de pagar la deferencia publicando más tarde que co- men mal y con manteles ordinarios y sucios . No se con- formará con las horas reglamentarias , que sólo rezan con los mareantes ; juzgará muy natural disponer á ...
Página 96
... viaje la primera cosa en que trabajé , que como era tan privado del cómitre , no me obligaba á más de lo que yo queria , y como aquesta faena no fuese á mi parecer tra- bajosa por no ir en alcance ó de huida donde importan el trabajo y ...
... viaje la primera cosa en que trabajé , que como era tan privado del cómitre , no me obligaba á más de lo que yo queria , y como aquesta faena no fuese á mi parecer tra- bajosa por no ir en alcance ó de huida donde importan el trabajo y ...
Página 122
... viaje á Orán , adonde allegó con salvamento , habien- do perdido en la dicha refriega ocho hombres . Halláron- se orillas del mar cincuenta y tres cuerpos muertos , que en el traje parecian franceses , como lo eran . Volvióse á poner en ...
... viaje á Orán , adonde allegó con salvamento , habien- do perdido en la dicha refriega ocho hombres . Halláron- se orillas del mar cincuenta y tres cuerpos muertos , que en el traje parecian franceses , como lo eran . Volvióse á poner en ...
Página 142
... viaje de Colon , dice el cronista Herrera ( 39 ) : « Pudrióseles tambien el bizcocho y hinchóse de gusa- nos de tal manera que habia personas que no querian comer la mazamorra que del bizcocho y agua hacian puesta en el fuego , sino de ...
... viaje de Colon , dice el cronista Herrera ( 39 ) : « Pudrióseles tambien el bizcocho y hinchóse de gusa- nos de tal manera que habia personas que no querian comer la mazamorra que del bizcocho y agua hacian puesta en el fuego , sino de ...
Página 143
... viaje del Adelantado D. Alvaro de Mendaña , se dice : « La racion que se daba era media libra de harina , de que sin cernir se hacian unas torti- llas amasadas con agua salada y asadas en las brasas ; medio cuartillo de agua lleno de ...
... viaje del Adelantado D. Alvaro de Mendaña , se dice : « La racion que se daba era media libra de harina , de que sin cernir se hacian unas torti- llas amasadas con agua salada y asadas en las brasas ; medio cuartillo de agua lleno de ...
Otras ediciones - Ver todo
Términos y frases comunes
agua Almiranta armadas y flotas artillería artilleros asentistas áun aviso bajeles banco bizcocho buen buques cama capitan Capitana y Almiranta cargo cédula chinches chusma cion Cleonidas Colecc cómitre Contratacion cosario costa cuatro cucaracha decúmana dellas demas despacho despues dias dice dijo ello embarcaciones enemigo escuadra españoles Eugenio de Salazar falta flota de Nueva flotas de Indias forzados galeones gente de mar guarda Habana habia haga hallar hicieron hizo holandeses hormigas hubiere hubo Indias insectos llaman llegó llevar luego mando mar y guerra marina marineros mosquito mundo naos navegacion navegar navíos noche Nueva España oficiales órden ordinario pagar palo pasajero pasar patache Pedro de Ursúa peligro pena personas pieza piloto piojos plata poco popa privilegio de galera puerto pulgas racion ratas ratones Real reinos remeros remos ropa salir saludable consejo Santa servido Sevilla soldados sueldo tambien tenian tierra veces velas Veracruz viaje viento vino visto
Pasajes populares
Página 179 - ... entrar el enemigo. Hay en este pueblo un barberi-médico para raer los testuces de los marineros y sacarles la sangre, si menester fuere. Y en fin los vecinos de esta ciudad no tienen más amistad, fe, ni caridad que los bijagos, cuando se encuentran en la mar. Miré al piloto, teniente del viento, y vile con grande autoridad sentado en su tribunal é cadira de palo...
Página 103 - Fue un terrible tormento, donde creí espirar. Porque se me afligió el corazón de manera, que apenas lo sentía en el cuerpo y me faltaba el aliento. Bajáronme de allí, no para que descansase, sino para volverme a crujía.
Página 184 - ... los masteles, buenos aposentos y palacios frescos para resistirle; buena aloja y obleas para refrescarse. Pues si os toma una calma en medio del mar, cuando el matalotaje se os acaba, cuando no hay agua que beber, aquí es el consuelo...
Página 182 - Los viernes y vigilias comen sus habas guisadas con agua y sal. Las fiestas recias comen su abadejo. Anda un paje con la galleta del brebaje en la mano, y con su taza dándoles de beber, harto menos y peor vino, y más baptizado que ellos querrían. Y así comiendo el ante por pos, y el pos por ante, y el medio por todos, concluyen su comida sin quedar conclusa su hambre.
Página 194 - ... cierto fue la más larga y trabajosa noche del viaje todo. Porque el navio estuvo siempre arfando, y nuestros estómagos como el primer día que nos embarcamos. Y acerca de los trabajos y peligros del mar no tengo más que decir, sino que todo lo dicho pasa cuando se lleva viento en popa y mar bonanza; considere vuestra merced qué será cuando hay borrascas de mar o corsarios, y más si vienen fortunas o tormentas.
Página 99 - Tanta fue mi buena diligencia, tan agradable mi trato, que dejaba mi amo de conversar con sus criados y muy de su espacio parlaba conmigo cosas graves de importancia. Pero hacía en esto lo que los destiladores : alambicábame, y cuando había sacado la sustancia que deseaba, retirábase o por mejor decir, se recelaba de mí, que no las tenía todas cabales, por la mala voz con que Soto me publicaba por malo. Empero con...
Página 94 - Mas engañéme, porque, como naturalmente son ásperos y se buscan tales para tal oficio, nunca ponen los ojos para considerar ni agradecer lo bueno; sino para castigar lo malo. No son personas, que agradecen, porque todo se les debe.
Página 100 - El capitán y mi amo creyeron a los principios la verdad; mas, como era testimonio levantado por mi enemigo Soto, luego pasó la palabra, que le oyeron decir que yo con la privanza lo habría hurtado y quería dar a los otros la culpa por quedarme con él.
Página 174 - Hallándome sin provision en la isla de Tenerife, traté de fletar navio para esta Isla Española', y fleté no por poco dinero uno llamado Nuestra Señora de los Remedios, de harto mejor nombre que obras; cuyo maestre me afirmó ser el navio capaz, velero y marinero, estanco de quilla y costado, bien enjarciado y marinado. Y llegado el día que nos hubimos de hacer...
Página 106 - Sabía toda la tierra, como quien había paseádola muchas veces. Viendo que las galeras navegaban por el mar Mediterráneo y se encostaban otras veces a la costa de Berbería buscando presas, imaginó de tratar con algunos moros y forzados de su bando, de alzarse con la galera. Para lo cual ya estaban prevenidos de algunas armas él y ellos.