llamaron estrecho de Barrow, habiendo pasado el primer dia los límites del viage anterior, continuando hasta la longitud 890 18' Londres, donde descubrieron una isla por la proa, desde la cual corria una completa barrera de nieve hasta la tierra del Norte, no pudiendo por consiguiente avanzar por el Oeste. Habia sin embargo un brazo de mar abierto todavia á la parte del Sur, al que llamaron, Abra del Príncipe Regente, y entrando por este canal, se observó que la aguja de marear perdió su virtud directiva, quedando inútil para la navegacion, guiando entonces el rumbo por las observaciones del azimut del Sol y el tiempo aparente. Despues de proceder por el Abra del Regente como 120 millas, se hallaron enteramente detenidos por el hielo, y volviendo al estrecho de Barrow, vieron con sorpresa, que la barrera de nieve que les habia impedido avanzar por el Norte de la isla, habia desaparecido, y navegando por alli descubrieron un canal que llamaron Wellington, en el que no veian ni tierra ni hielo. La apariencia del pasage deseado parecia ahora muy favorab'e, y navegando con mucha dificultad á causa de las nieblas, despues de pasar varias islas llegaron á una que llamaron Melville; y el dia cuatro de setiembre cruzaron el meridiano 1100 longitud Oeste de Londres, ganando el premio de 25000 pesos, uno de los ofrecidos por el Parlamento, y haciendo mas esfuerzos llegaron hasta la longitud 1120 51' cuando los obstáculos vinieron á ser tan insuperables que fué preciso volver atrás para tomar el puerto que habian escogido y pasar el invierno que se iba aproximando; y ciertamente que no volvieron temprano, porque el hielo en la bahia, llamada de Hecla y Griper, ya tenia siete pulgadas de grueso, siendo necesario abrir un canal con las sierras por tres cuartos de legua para que entraran los barcos al lugar en que debian quedarse. Establecidos ahora en los cuarteles de invierno donde habian de continuar por ocho ó nueve meses, en tres de los cuales no verian la cara del Sol, fué necesario tomar todas las precuaciones necesarias para la seguridad de los barcos y conservacion de los víveres. Estos fueron desarbolados, y sobre la cubierta de cada uno de ellos se formó un techo de tablones, forrándole con paño muy grueso; y para mantener el calor y libertarse de la humedad se dispusieron las estufas en los lugares mas convenientes. La distribucion de las provisiones fué arreglada con economía y con respecto á la salud. La limpieza personal era examinada cada dia; y adoptados los medios para descubrir y remediar la mas leve apariencia de escorbuto. Ejercicio diario en tierra, y si el tiempo estaba muy inclemente saltos y danzas en la cubierta. Las partidas de caza eran tambien frecuentes. Para evitar la tristeza se representaban comedias y farsas, y cada semana se imprimia á bordo una gaceta titulada. Las crónicas de un invierno." Por este y otros medios, procuraron aquellos intrépidos ma. rinos vencer, en algun modo, el tedioso estado y la desagradable monotonia de su triste existencia. La escena, á la verdad, era melancólica en estremo; y segun las palabras del capitan Parry, ,,una muerte lenta, la mas terrible desolacion, una privacion total de existencia animada." El año nuevo principió con tiempo suave, y la Aurora boreal hizo entonces su apariencia, particularmente el 15 de enero, cuando fueron gratificados con la vista mas brillante y variada de este fenómeno entre todas las que se observaron durante aquel año. El dia tres de febrero se descubrió por primera vez, desde la cofa del palo mayor del Hecla, el limbo superior del sol, que habia estado bajo el horizonte desde el once de noviembre, un período de 84 dias. Este fué el mes mas frio de todo el invierno. El 30 de abril subió el termómetro al punto de comenzar el deshielo, pero hasta el primero de agosto no pudieron salir los barcos del puerto. Se tomó entonces el rumbo hacia el Oeste, pero el estado del hielo, era tal que detenia la navegacion á cada milla, de modo que costó 16 dias de contínuos esfuerzos para llegar á la ĺongitud de 113° 47' en latitud 740 28', cuando se vió ser impracticable el continuar la espedicion, y consiguientemente se resolvió volver atras, à la primera oportunidad, asegurando los barcos por algunos dias. En estas circunstancias descubrieron una manada de ganado, y se mandó una partida en caza de ellos, logrando matar dos toros, uno de los cuales dió 352 libras de carne, la que sin embargo del olor fuerte á almizcle fué un regalo para la tripulacion. El 26 de agosto se hicieron los barcos á la vela por el E. y en el 31 se hallaron fuera de la sonda de Lancaster, é inmediatamente se comenzó el reconocimiento de la costa occidental de la bahia de Baffin, continuando hasta la latitud 680, cuando hallándose imposible el acercarse á tierra, ni seguir el reconocimiento, se tomó el rumbo para Inglaterra, arribando á principios de noviembre con la satisfaccion del tribunal del Almirantazgo, y alegria del público ingles. OBSERVACIONES Sobre la Balanza mercantil de la Habana RELATIVA AL AÑO DE 1839. El movimiento mercantil del año próximo pasado va á ocuparnos á semejanza de los años anteriores, inquiriendo no solo nuestra riqueza comercial y las rentas que proporciona al Estado tan activo y continuado tráfico, sino tambien la abundancia de nuestro consumo y las producciones de nuestro territorio. De manera que puede decirse que de estos trabajos continuados sin alteracion por una série de años, resultará positivamente el mas verídico libro de nuestros sucesivos progresos en todos los ramos de prosperidad pùblica, con hechos incontestables y con los datos mas positivos que pueden ministrar los guarismos en su brillante y sencilla claridad; pues aun cuando haya motivos para creer que no siempre es el resultado de lo que se importa y esporta en un pais, el cuadro legal que ofrecen los encargados de la administracion pública, mucho mas si por libertarse del pago de derechos acaso se ejerce el contrabando, cualquiera que sea la vigilancia de mil argos, cualesquiera que sean las disposiciones dictadas para comprimirlo y destruirlo; aun cuando se justiprecien los renglones de un modo que nunca representan su valor real y positivo; subsistiendo siempre estos mismos inconvenientes, esta misma aproximacion al objeto, en vez de llegar á él y tocarlo materialmente, la paridad es exacta tomando un año y otro comparativamente, y de este cómputo puede partirse con seguridad en la investigación de los hechos referentes al movimiento mercantil, que para los estados es lo que el movimiento del corazon, lo que la circulacion de la sangre en el ser viviente. Partiendo pues de estas consideraciones vamos á emprender esta tarea ausiliados con los datos que nos suministra la Balanza mercantil publicada por la Administracion general de Rentas de órden del Esemo. Sr. Superintendente general de Real Hacienda, haciendo las oportunas comparaciones con el año anterior. Importacion. Importacion de algunos renglones de necesidad. Velas de Velas de Arroz. Harina. Tasajo. Bacalao. sebo. esperma. Arrobas. Barriles. Arrobas. Arrobas. Arrobas. Libras. El cuadro anterior demuestra evidentemente que se há aumentado la importacion de los renglones comprendidos en él, si esceptuamos las velas, así de sebo como de esperma, cuyo consumo và decreciendo hace tres ó cuatro años, segun hemos vá observado; y creemos que esto tenga su fundamento principal en la moda, que ha disminuido la iluminacion con las velas á causa de los quinqués alimentados con la grasa fina ó buen aceite, y de la economia de las lámparas. Bien que por lo que respecta á las velas de sebo puede haber influido algun tanto en la baja del guarismo de la importacion las nuevas fábricas del pais. La grasa que hoy ha sustituido en gran parte á las velas de esperma, se ha importado en cantidad de 1.035,300 libras en el año que nos ocupa. El esceso de 16.224 barriles de harina que aparece á favor del año de 1839 casi todo se debe al comercio nacional. Lo cual confirma la observacion que sobre esto hicimos en el año próximo pasado, á saber: que mientras subsistan pagando el derecho con que hoy están recargadas las harinas estrangeras, cualesquier a que sean las medidas de nuestro celoso resguardo de Rentas, no podrá evitarse el contrabando; y por consiguiente, la importacion legal casi siempre ofrecerá un mismo guarismo, cuando no vaya en dis minucion. Asi sucederá necesariamente mientras un barril de harina al rodar por la plancha de nuestro muelle, tenga de costo al Norte-americano 16 pesos ántes de ofrecerlo al mercado. A pesar de los perjuicios que pueden sufrir los consumidores; esto favorece al comercio nacional, pues parece demostrado hasta la evidencia que este recargo, ó mejor dicho el arreglo de los derechos en esta parte, ha sido suficiente para aumentar la importacion de harinas españolas en 12.143 barriles en el año de 1839, pues en el de 1838 se importaron 55.875 barriles y 68.018 en el de 1839. Nos aventuramos á pronosticar que si cesan enteramente las vicisitudes políticas que por tantos años han agitado á la Península, y continuan rehaciéndose las fábricas y engrandeciéndose los plantios, multiplicándose por consiguiente la marina mercante, el sistema actual es suficiente, sino á producir la prohibicion de harinas estrangeras, á lo ménos á reducir la importacion en Cuba á un guarismo infinitamente menor que el que hoy figura en la balanza. Con todo mientras se verifica este estado que no pasa de una fundada conjetura, han de trascurrir algunos años, en los que se necesita la mayor cordura para no asestar mortales golpes contra el Erario y sobre todo contra la masa enorme de consumidores de un renglon de primera necesidad. El siguiente cuadro demuestra la importacion de otros artículos. Carne Carne de de Manteca Queso. Tocino. Jamon. puerco. baca. Barriles. Barriles. Arrobas. Arrobas. Arrobas. Arrobas. |