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feriores, y vàn à juntarfe en medio haciendo la mifma Cap. VIII. configuracion del Vientre, à quien ciñen; en fu media¬ nìa tiene una abertura, que coge como los dos tercios de fu largo, la qual cierra, y abre arbitrariamente por medio delos Mufculos propios, que tienen para ello. Defpues que páre los hijos, los recoge en aquel feno, y cierra, de modo que los mantiene allì femejando una fegunda preñèz, hafta que llegando à fer grandes, quando los quiere deftetar, afloxa los Musculos, y los echa fuera, como fi los volviera à parir. Mr. de Jufieu,y Mr. Seniergues hicieron una experiencia,eftando en Quito ; à la qual afsiftimos Don Forge Juan, y yo. Tres dias fe havian passado, defpues que la Madre estaba muerta, y tan corrompida que infestaba con fu mal olor; y no obftante fe mantenia cerrado con baftante fuerza el orificio de aquel feno, y los hijuelos, que tenia en èl, todos vivos; afido cada uno de fu pezon, de el qual fe exprimieron al tiempo de defafirlos algunas pequeñas gotas de Leche. El Macho (que no vì nunca) oì decir en el País, fer del mifmo grandor, y figura, que la Hembra, excepto no tener aquella bolfa; y fer fus Tefti◄ culos mayores que huevos de Gallina; cofa disforme à proporcion de todo el Animal. Tiene la propiedad, de perseguir toda fuerte de Aves domefticas; y afsi como las hay, en las Cafas fe encuentran tambien en las Sementeras,donde destruyen el Mayz. Los Indios comen su carne, fiempre que pueden coger alguno, y dicen que no es mala al gufel fentir de efta Gente en femejante affunto no es de alguna confideracion.

to, pero

Cap. IX.

CAPITULO IX.

Phenomenos especiales en los Páramos, y en lo reftante de aquella
Provincia, con noticia de las Corridas de Venados
treza de los Cavallos en aquel Pais.

ΙΟΙΙ

S

, def

las particularidades referidas, que fe notan en los Páramos, fon dignas de la mayor atencion, no lo fon menos los Phenomenos de la Naturaleza, que fe obfervan en ellos. Para nofotros fueron de grande admiracion dos, que en los principios no dexaron de forprendernos con fu novedad; pero la continuacion de verlos varias veces repetidos, nos los hizo familiares. El primero fue obfervado en Pambamarca la primera vez, que fubimos à aquel Páramo; y consistia en un Arco Iris entero, y triple formado en esta manera.

1012 Al tiempo de amanecer fe hallaba todo aquel Cerro envuelto en Nubes, muy densas, las que con la falida del Sol fe fueron difsipando, y quedaron folamente unos vapores tan tenues, que no los distinguia la vista: al lado opuesto por donde el Sol falìa en la misma Montaña, à cofa de diez Tueffas diftante, de donde estabamos, fe vela como en un Efpejo reprefentada la imagen de cada uno de nofotros, y haciendo centro en fu Cabeza tres Iris concentricos; cuyos ultimos colores, ò los mas exteriores del uno tocaban à los primeros del figuiente; y exterior à todos algo diftante de ellos fe veia un quarto Arco formado de un folo color blanco: todos ellos eftaban perpendiculares al Horizonte; y afsi como el Sugeto se movia de un lado para otro, el Phenomeno le acompañaba enteramente en la mifma difpoficion, y orden.pero lo mas reparable era,

que

que hallandonos alli quasi juntos seis, ò fiete perfonas, ca-
da uno veìa el Phenomeno en sì, y no lo percibia en los
otros la magnitud del diametro de eftos Arcos variaba
fuccefsivamente à proporcion que el Sol fe elevaba fobre
el Horizonte; al mismo tiempo fe defvanecian todos los
colores, y haciendofe imperceptible la imagen del cuerpo,
al cabo de buen rato defaparecia el Phenomeno totalmen
te: en los principios era el diametro del Iris interior toma-
do en el ultimo color, que le correfpondia, de 5. Grados
à corta diferencia ; y
; y el del blanco exterior, y apartado de
todos 67. Grados: quando empezaba el Phenomeno, pa-
recian los Arcos en figura oval, ò eliptica correfpondi-
ente al difco del Sol, y defpues fe perfeccionaba, hafta
quedar perfectamente circulares: cada uno de los peque-
ños conftaba de encarnado,ò rojo: efte fe defvanecia, y
formaba el naranjado; à quien seguia el amarillo, y def-
vanecido fe convertia defpues en pagizo ; y à fu continua-
cion estaba el color verde, fiendo en todos ellos el exte
rior el rojo. En la demonftracion de la Estampa, que fi-
gue, fe podrà vèr con toda individualidad.

1013 En varias ocafiones fe notaron en aquellos Pá
ramos los Arcos, que formaba la luz de la Luna. Uno de
eftos bien particular fe me ofreciò à la vista el dia 4. de
Abril del año de 1738. en el Llano de Turubamba como à
las 8. de la Noche; pero el mas raro fue obfervado
Don Jorge Juan en el Cerro de Quinoa-loma el dia 22. de
Mayo de
1739. à las 8. de la Noche. Eftos Arcos no conf

por

tan de otro color que el blanco ; y Le forman proyectandose en la Caìda,ò Falda de algun Cerro:componiase el obfervado de tres Arcos tangentes en un mismo punto; el diametro del interior era de 60.Grados;y el grueffo,ò extenfion

Cap. IX.

Cap. IX.

en lo ancho del color blanco ocupaba un efpacio de 5.Grados à el qual eran iguales el de los otros dos. Todo ello fe vè demostrado en la Figura fegunda de la misma Lamina, que figue.

1014 El Ayre de la Athmofphera, y los hálitos exhalados de aquel Territorio parece fon mas propios, que el de otros, para encender los vapores, que fe levantan de ella, y assi se suele esto vèr con alguna mas frequencia; y en ocafiones muy grandes ; de mayor duracion; y no tan elevados, como los que fe obfervan en otras partes. Uno de eftos Fuegos particular por fu grandor apareciò en Quito en una Noche, interin que nos hallabamos en aquella Ciudad, cuya data no me es facil afsignar, porque los Papeles, que la contenian, quedaron perdidos, quando fuy aprifionado; pero sì podrè fu idèa, por por la que que conferva

la Memoria.

1015 Serian como las 9. de la Noche, quando de las Faldas de Pichincha fe levantò (al parecer) encendido un globo de Fuego de tanta magnitud, que diò claridad à la parte de la Ciudad, correfpondiente à aquel lado: la Cafa, que yo habitaba, tenia fus Ventanas ácia el mifmo Cerro; y aunque estaban cerradas, fue bastante la luz, que fe introduxo por fus refquicios, para que yo advirtiesfe una claridad eftraña : esta, y el ruido de la Gente, que se hallaba en la Calle, me hizo abrir con prontitud llegando à tiempo, que lo pude percebir en la medianìa de fu Carrera ; la qual fue entre el Occidente, y Sur, hafta que fe perdiò, ocultandofe con el Cerro del Panecillo, que eftà por aquella mifma parte. Su figura era circular, y à mi vifta tendria de diametro como un pie con corta diferencia. Digo, que al parecer fe levantaba de las Faldas de Pichin

cha,

cha; porque al defcubrirse, fegun el curfo, que llevaba, Cap. IX. indicaba haver fido detras de èl donde fe havia formado, y tomado luz : defpues que huvo caminado la mitad de la carrera vifible, empezò à amortiguar fu refplandor de tal modo, que ya al fin era muy tenue el que defpedia.

1016 Para concluir efte Capitulo folo falta dàr noticia del methodo, con que en aquel Pais hacen la Corrida de Venados, unica diverfion de Campaña, y exercicio, à que fon muy inclinados: bien particular por el arrojo, y determinacion, con que lo practican; y que con jufto motivo pudiera adquirirles el titulo de temerarios, fi el incurrir en ello defpues de haverlo una vez experimentado los Hombres mas cuerdos, fiados en la feguridad de aquellos Brutos, no la calificára de deftreza, y regular entreteni miento: fiendo prueba del exceffo, que en esta parte hacen aquellos Ginetes, y Cavallos à los mas celebrados de Europa, y de que la ligereza mas ponderada de eftos es lentitud à vista de la velocidad, con que aquellos corren los Defpeñaderos, y Montañas.

1017 Difponese la Corrida entre mucha Gente, y fe divide efta en dos clafes: una de cavalleria, y otra de à pie : los primeros fon los que han de correr; y los fegundos Indios para levantar la Caza. Todos vàn à amanecer al fitio determinado, que por lo regular es en lo alto de los Páramos. Cada uno lleva fu Galgo, y fe apoftan los de à cavallo en los Penachos mas elevados: los de à pie vàn por las profundidades de las Quebradas, espantando la Caza para levantar los Venados: de efte modo fuelen eftenderse las Paradas cerca de tres, ò quatro leguas, ò mucho mas, fi la Gente es fuficiente para ello: luego que falta el Venado, el Cavallo mas inmediato, lo fiente, empieza

que

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