Nosotros prescindiremos de si es ó no ventajoso este nuevo ramo de industria agrícola en un pais que posee otros de grandes productos y utilidad. Pero decididos en favor de toda empresa que pueda ser desempeñada por hombres blancos para robustecer nuestra poblacion, desearíamos que tuviese un resultado favorable la aclimatacion de la cochinilla. La Sociedad patriótica se ha ostentado tambien animada del mismo espíritu. Pero considerando lo delicado y efimero de estos pequeños insectos, y que solo pueden sostenerse y procrear sobre un plantío de nopales, plantas que crecen con tanta lentitud, tememos que si no se sostienen los esfuerzos del introductor, ó perecerá la cria ó progresará con suma mezquindad. Hace:nos esta indicacion porque nos parece que aun cuando la Sociedad haya hecho demasiado con asignar aquella suma por término de cuatro meses, este término nos parece corto, como lo consideró la Junta, y esperamos como ella que la de Fomento complete lo que falta para el logro de tan importante fin. 11 ,,En esta sesion dió cuenta el amigo D. Joaquin José García de haber recibido de los Estados-Unidos la semilla del maiz perfeccionado de Mr. Baden, y repartidola entre 136 agricultores del pais. La Junta acordó que se le diesen las debidas gracias por su celo y por la generosidad con que habia sufragado de su peculio los costos de trasporte." A pesar de lo que hemos publicado sobre este maiz en nuestro número 18 (pág. 461 del tómo 3o), debemos hacer algunas observaciones ya que van á ponerse á prueba las ventajas con que viene anunciada esta especie de granos, que constituye uno de los principales recursos de subsistencia en nuestras fincas y el mas poderoso alimento de nuestros animales. Aunque hemos examinado por nosotros mismos los tallos de este maiz ya secos y conteniendo cinco, seis y siete mazorcas cada uno del tamaño de las mayores que cosecha esta Isla en terrenos nuevos, no es una especie distinta del maiz comun de los Estados-Unidos, y las mejoras con que aparece provienen de haberse perfeccionado el cultivo con la mayor asiduidad y constancia por espacio de muchos años. Comenzó Mr. Baden sus trabajos escogiendo la semilla de aquellos tallos que habian producido dos mazorcas buenas, y de estas, solo tomaba los granos del centro como mejor desarrollados y perfectos. Continuó asi por algunos años hasta que ha logrado el mejoramiento completo. Hacemos esta esplicacion porque creemos que no hay un motivo para no conseguir iguales resultados con el maiz cubano, si este realmente tiene algunas ventajas demostradas y que le hagan preferir al de los Estados-Unidos modificado en este clima. Deben pues hacer comparaciones exactas los agricultores que han logrado esta semilla y calcular si realmente hay un aumento en la produccion, siguiendo el método que indica Mr. Baden. Es te previene que se haga la siembra en Mayo; que solo se pongan dos granos en cada hoyo, y que se observe la distancia de 5 pies en todos sentidos. Es preciso por consiguiente elegir dos porcio nes iguales de terrenos de una misma calidad y sujetos estrictamente á unas mismas circunstancias, para establecer en uno el método ordinario que se observa en nuestra siembra de maiz y con nuestra semilla, y en el otro sembrar el maiz de Baden con la distancia señalada. Entonces se resolverá la cuestion de si un terreno dado produce mas fruto y mas perfecta por el nuevo método. Porque, ¿qué haríamos con cultivar 1000 tallos en un terreno dado, y que estos nos produgesen 6 mazorcas cada uno, y por consiguiente 6 fanegas de maiz limpio, si en el mismo terreno pueden cultivarse 4000 tallos produciendo cada uno dos mazorcas y en total 8 fanegas de buen maiz sin contar con el de ínfima clase que siempre se aprovecha en las fincas? Estamos muy lejos de dar el carácter de exactitud á esta observacion; la indicamos para demostrar la necesidad de someter á la esperiencia juiciosa el nuevo método. Anunciamos desde ahora ventajas en favor de este, y entre otras son: 10 que el maiz es mas sano, mayores las mazorcas y mas iguales: 20 que el terreno se desvirtúa ménos por la separacion con que se verifica la siembra, ¿y quién sabe si seria provechoso el terreno intermedio de tallo á tallo dedicándolo á la siembra de otras plantas útiles? y 30 que creciendo estraordinariamente estos talles, abundarán los despojos despues de la cosecha, cuya utilidad para emplearlos en abono no tiene duda alguna. Aseguramos sin temor de equivocarnos que la Sociedad patriótica recibirá como un servicio de suma importancia todas las observaciones que la práctica de los hacendados que han llevado semillas de este maiz, presente á su consideracion. Las prevensiones siempre son perjudiciales al progreso de la industria; y aunque cueste trabajo separarse de la rutina, es preciso olvidarla si se quiere hacer algo de provecho. Agregamos estas cortas líneas á este asunto de la Sociedad, porque deseamos que se completen sus miras y sus esfuerzos. A informe de la seccion de educacion se mandó pasar el tratado de dibujo de la figura, cuya traduccion del frances dedica á la Sociedad D. Pedro José Morillas su individuo de mérito. El secretario de la misma Seccion propuso á la Junta que se recordase al gobierno con recomendacion el despacho de las planillas que por su órden y conducto se remitieron al interior con objeto de adquirir datos para la estadística en el ramo de instruccion relativo á las cárceles. ¡Lástima es que estén en suspenso estos trabajos, que sugirió á la clase el deseo de investigar en lo posible la relacion del crímen en nuestro pais con el grado de instruccion! A indicacion de la secretaría de la seccion de Industria, se acordó elevar al gobierno el último acuerdo celebrado sobre apren⭑ dizage de artes y oficios acompañándose la minuta de escritura.' -Esta ligera reseña de una sesion del cuerpo patriótico, anuncia de un modo evidente sus esfuerzos por el bien del pais y la importancia de tan útil instituto. DISCURSO SOBRE LA UTILIDAD DE LA CIENCIA FISICO-MATEMATICAS PRONUNCIADO EN EL ATENEO POR F Bou Manuel López Santaella. El Atenéo que á pesar de las vicisitudes de que se ha resentido desde su institucion en esta época, ha procurado difundir las luces en nuestra patria, creia no haber llenado tan laudable objeto sino á medias, no habiendo consagrado enseñanzas para las ciencias fisico-matemáticas. El principal motivo de esta (permítaseme llamarle) reticencia, consistia en la delicadeza de los objetos que abrazan, y en la escasez de personas que tuviesen la valentía de presentarse como profesores de unas ciencias, que no versan ya sobre objetos abstractos, sino sobre el modo de satisfacer con ventaja las necesidades mas perentorias de la vida. Con esta dificultad luchaba el Ateneo, cuando el celo del digno presidente de la seccion de estas ciencias D. José Mariano Vallejo, le hizo entrever un rayo de luz, y la orilla de la esperanza. Animados por su persuacion vários de los individuos que componen la seccion tercera, hicieron algunas esplicaciones públicas sobre vários objetos que al cabo de repetidos esfuerzos pudieron regularizarse y continuar en período determinado. Aprovechando el Ateneo esta institucion, la llamó á sí para darle su sancion y hacerla continuar como una metódica enseñanza: con este carácter se presenta hoy al público, despues de la corta interrupcion que ha sufrido. Esto, señores, que parecerá á muchos una cosa insignificante, no lo es para los que conocen la importancia política de las ciencias que abrigan en su seno, todo el porvenir de las sociedades. El Ateneo, pues, que debe considerarse como el templo donde vienen á unirse á la voz de la razon los hombres de buena fé de todas las opiniones, ofrece con estas enseñanzas una garantía del interes que se toma en la prosperidad de la patria. Garantía que no es vana á la vista de los hombres pensadores que forman el orgullo y la esperanza de nuestro siglo. Porque à la verdad, creéis señores, que esa lucha de opiniones políticas, esa arena donde se debaten los partidos ha de durar siempre? No; esas agitaciones se calmarán, los partidos se darán la mano ante el altar de la libertad y el órden, la sociedad volverá á la union y la armonía, los hombres á unirse por amor, y las ciencias que hoy agitan los pechos y forman el gérmen de las pasiones desaparecerán, y desaparecerán para siempre, porque no son sino adorno de circunstancias. Solo aquellas que proporcionan al hombre medios para esplotar el globo unido á sus semejantes, vivirán, y vivirán eternamente, porque la constitucion del porvenir tendrá por base el desarrollo de la industria en las sociedades. Hemos llegado al punto de vista mas luminoso para las ciencias que forman nuestro objeto, porque desde él podemos examinar la razon de la poca importancia que tuvieron en lo pasado, y el motivo de la que comienzan á tener en nuestros dias, y tendrán en lo futuro. Las ciencias fisico-matemáticas, señores, son las que con.. tribuyen al desarrollo industrial de los pueblos, sus progresos están unidos con los de la industria, y esta es la causa porque su decadencia en lo pasado, nos hace conocer el poco valor de aquella. En efecto, en unas sociedades cuya base política é industrial eran la esclavitud y la guerra, y que para remediar sus necesidades se lanzaban á desvastar las mas fértiles provincias que se ofrecian á su vista, ¿podrían desarrollarse unas ciencias pacíficas por escelencia? No es estraño asi que estuviesen olvidadas, siendo la conquista y la devastacion el principal recurso de estas naciones. Sin embargo, aquellos ramos que tenian una relacion mas íntima con los instrumentos que empleaban en el trabajo que satisfacia sus necesidades, no dejaron de cultivarse, pero la série de esperiencias mas ó ménos exactas que forman la de sus conocimientos, no puede llamarse ciencia, porque estaba reducida á rutinas inciertas, y á la destreza que por la práctica adquiria el obrero. Esto es tan. cierto, cuanto que á pesar del grande uso que hizo la antigüedad de los metales, nada adelantó científicamente sobre metalúrgica, y aun en el uso de las armas que le era tan necesario tenian tan poco tino, que se veian obligados á recurrir al auxilio de la Divinidad cuando algun escudo ó espada, salia fuerte y bien templado: lo mismo sucedia con los instrumentos de agricultura, que ademas de su imperfeccion, adolecian de la poca consistencia de los metales. Las máquinas mas usuales para satisfacer en nuestros tiempos las necesidades de la vida, eran en aquellos desconocidas; la prueba es, que la Odisea nos habla de veinte esclavos diariamente ocupados en moler el trigo, que consumia la corta familia de Ulises. La sencillez de los trages, la de los tegidos y telas manifiestan esto mismo que viene á comprobarse por la rusticidad de las costumbres, y cuan limitados eran aun los goces en nuestros dias mas sencillos y generales. No se crea por esto que queremos rebajar la importancia de los conocimientos industriales de los antiguos, ni que intentamos menguarlos, insistimos solo en esto para manifestar, que su práctica no era resultado de un método científico; sino de unas esperiencias sin ilacion, y de unos hechos científicamente inconexos. No desconocemos señores, que se nos recordaron para desvirtuar lo espuesto, los maravillosos monumentos que pasadas naciones nos han trasmitido; y la sencillez elegante, que aun hoy admiramos, de los muebles que destinaban para sus placeres y uso. Nada de esto nos es desconocido, y á nuestro entender prueba el punto hasta donde el hombre es capaz de elevarse cuando se dedica á un objeto con constancia y trabajo; pero de ninguna manera que fuesen el resultado de un sistema científico, sino el fruto de largas prácticas y esperiencias que llegaron á aquel término, quedando despues estacionarias. Es necesario tener presente que los objetos que nosotros en la antigüedad admiramos como muy desarrollados, son aquellos que estaban en contacto con la constitucion política y religiosa de aquellos tiempos, y estos dos poderosos agentes fueron los que contribuyeron al desenvolvimiento que admiramos, no debiendo sernos estraño considerados de este modo, porque esta sociedad llenó así el objeto que se habia propuesto. Una causa, señores, habia en estos pueblos de la antigüedad, que les impedia formar una série científica de las ciencias fisicomatemáticas; y hacer aplicaciones de sus resultados á la produccion material; en toda la estension que necesitaban. Esta era la creencia religiosa de aquellas naciones. En efecto, el poleteismo que presentaba la naturaleza entera, sometida á la voluntad de tantos dioses, cuantos inspiraba su creencia, no podia producir á sus cultivadores la idea de una sucesion de leyes, sometidas á una causa que presidiera el órden de los fenómenos, alma verdadera de estas ciencias. Esta consideracion es tan importante, como que en nuestros días mismos que han querido violentar estas ciencias para probar el materialismo, no han podido separarse de la unidad de accion de la cooperacion á un fin y de la unidad de causa; es decir, señores, que no han podido separarse de Dios por mas que lo hayan imaginado. Sí, pues, sus progresos nacen de este principio, es claro que no podian hacerlos cuando la sociedad entera no estaba sometida á cultivarlo, no daba fé á su creencia; por esto vemos las matemá |