Que preso de muerte en un ataud Yago en Toledo á mi pesar quedo.
A todos escribo la mi grand querella Dolor é quebranto é mi descompuesto. El reluciente lanzó la centella
De su grand altura poniendo requesto. Assí que del todo me veo dispuesto (1) De honras, poderes, é bienes, tesoros, Christianos, judíos, paganos, é moros; Ved si podedes vengar mi denuesto.
De mi señorío, que es ya pasado, Segund todos vistes, vos maravillad, Que fué tan temido, servido, é famado, E que logar ovo tambien lo pensad. Agora en la fiesta de la Navidad De todo perdido posiéronme á robo. Quien fueron é quales sabed, que los trobo. Es cosa terrible; mas vos escuchad.
Mi fijo Don Juan, que es de mis lomos, Alzóseme luego é puso pendon.
Ved que mundo malo; catad lo que somos ! Cercóme el Infante con grand turbacion. Los Condes é Grandes de un corazon Con toda Toledo fecieron un lecho, Despues un arcaz angosto é estrecho, Á dó me encerraron de fuerte presion.
(1) Lée depuesto.-F.
TOMO XX.
Los mis Privados é mis Consejeros Dejáronme solo, é vánse uno á uno: Los mis Secretarios, é mis Camareros De mí no han cura tambien de consuno; Los nobles Donceles non cura ninguno De me visitar de pan nin de vino; Mas róbanme todos é van su camino É finco yo solo, é del todo ayuno.
El mi grand tesoro ya non aprovecha Que ove abarrido por toda España (1): Antes por cierto el Drago, que asecha La plata é el oro, muy mucho me daña: ya non me valen las artes é maña,
Nin fuerza de armas, valientes,
Nin ricos, nin sabios, nin propios parientes, Falagos, nin ruegos, mansedat nin saña.
Es mi querella que vos me valades En tantos peligros é desaguisados, Segund que por otros vos bien trabajades, Faced ora tanto por mí ayuntados:
Que yo salir pueda d'entre finados, É tornat me vivo asi á desora
É nunca mas muera despues nin agora; Mas ser ya non puede por vuestros pecados.
Por ende, Señores, vos ya non podedes
(1) A vista de esto y de otras reflexiones con razon se puede tener por fábula lo que se cuenta de que en Búrgos no tuvo para cenar. Véase Berganza, tom. 2, pág. 219.-F.
Doler de mi muerte, pues otros morieron Mas grandes, mas altos, segund oiredes; Mas ricos, mas fuertes sobre cuantos fueron Probados en armas, que siempre vencieron; É otros mui sabios Poetas, Maestros, Filósofos grandes, sotiles, mui prestos, Que todos á mi muerte forzada vinieron.
Aquel noble César de mui grand imperio, É César Augusto, el fuerte Trajano, Pompeo, é Claudio, Julio, é Tiberio, El buen Costantino, é Ottaviano, Tito el noble é Vaspasiano,
É otros mui altos potentes é ricos, Decid si murieron mas grandes, mas chicos Sus padres, sus fijos tambien Adriano.
El grand Alexandre que puso conquista
Por todo el mundo é toda nascion, Troylo é Darío, el grand agonista, Menelao, Priamo é Agamenon ; Tyndaro é Pyrro, Saul, Salomon,
De todos aquestos, decidme, qué es dellos? Si viven ó mueren por mí ó por ellos, De aquesta pregunta vos fago mencion.
Aquel grand Ercoles famado guerrero Ulixes, Achiles, é Diomedes, Don Etor, é Páris el buen caballero, Oreste, Dardán, é Palamedes, Eneas, Apolo, Amadis, aprés
Tristan é Galaz, Lanzarote el Lago, É otros mas destos, decidme ¿cuál Drago Tragó todos estos, ó de ellos qué es?
El buen Aristóteles el grand natural, Pitagoras, Ervis, Rasis, é Platon, Omero é Senéca, é mas Juvenal, Boecio, Lucano, Oracio, Nason,
Tulio, Vegecio, Virgilio, Caton, Poetas perfectos, grandes astrólogos;
É mas otros muchos que non estan en prólogos; Pues todos aquestos decidme ¿dó son?
É de sus imperios, riquezas, poderes, Reinados, conquistas, é caballerías, Sus vicios, é honras, é otros plazeres, Sus fechos, fazañas, é sus osadías; Á dó los saberes é sus maestrías? Á dó sus palacios, á dó su cimiento? Cerrado el ojo, paréceme viento: Agora lo creo sin muchas porfías.
Conviene pues mucho regir vuestras vias É cesár el planto de mi movimiento; Ca vos eso mesmo faréis mudamiento: Velat á la muerte que vánse los dias.
ESTE DECIR FUÉ FECHO AL FINAMIENTO DEL DICHO SEÑOR REY DON ENRIQUE EN TOLEDO, EL
QUAL FIZO ALFONSO ALVAREZ.
En otra parte añade: De Villasandino, mui sabio é discreto varon, é muy singular componedor en esta muy graciosa Arte de la Poesia é Gaya Sciencia, el cual por gracia infusa que Dios en él puso, fué esmalte, é luz, é espejo, corona é monarca de todos los poetas é trovadores, que fasta el su tiempo fueron en toda España (*).
Muy poca fianza é menos firmeza Veo en el mundo que es de presente: El sabio, esforzado, tambien el valiente Non vive sin cuita por mucha riqueza. É veo á las veces sobir en alteza El pobre mesquino de sotil estado, É al rico en un punto ser derrivado, É vive lazrado con mucha pobreza.
(*) Fué sin duda Alonso Alvarez el mayor ingenio de aquella edad. El marqués de Santillana dice en su carta ya citada: Desde el tiempo del Rey D. Enrique (III) de gloriosa memoria, padre del Rey nuestro Señor, fasta estos nuestros tiempos, se encomenzó á elevar mas esta sciencia con mayor elegancia. Principalmente Alonso Alvarez de Illescas gran decidor, del qual se podria decir aquello que en loor de Ovidio un grande estoriador escribe: que todos los motes é palabras eran metro. Añade, que escribió muchísimo y que andaban sus coplas en manos de todos. Sarmiento, Poes. esp. pág. 156, núm. 374. Este autor advierte en otra parte (pág. 362, núm. 800), no se halla con mas noticias de Alonso Alvarez que estas que aquí ha puesto del Marqués. Pero el mismo confiesa haber visto la Nobleza de Andalucia de D. Gonzalo Argote de Molina, que en el Iudice prévio de autores de que se valió para ella, pone el Cancionero de Alonso Alvarez de Villasandino, que en aquel
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