D. García fué vencido y á Luna preso lleuado; quel que no sabe vencer es caso muy ordinario dexar la fama y la vida en manos de su contrario. ROMANCE NONO. Сомо no ay cosa criada que harte vna gran cudicia, y el desseo con el bien va creciendo cada dia, pudo con el Rey D. Sancho Y el Rey, quando aquello via, el qual, boluiendo á Leon con más gente de Galizia que tuuo la vez primera, tentar de nuevo queria si ventura á tantas vezes se le mostraria enemiga; y en la ribera de vn rio que Carrion se apellida, muy cerca de Gulpellera, que era vna pequeña villa, se dieron otra batalla sangrienta, braua y reñida, do mostraron los gallegos de suerte su valentía, que las gentes de D. Sancho se pusieron en huyda; y el noble Rey D. Alonso, mirando los que morian, á sus caualleros manda que más ninguno los siga, lastimado del gran daño que hazer en ellos via; y con esto, de seguir el alcance, se retira: mas el valeroso Cid, viendo que no los seguian, al vencido Rey D. Sancho, assí consuela y anima: Mandad recoger, Señor, toda esa gente vencida, y quando el alua mañana nos muestre que biene el dia, demos sobre los gallegos que agora no nos temian, y en sus posadas seguros, con gran fiesta y alegría, se deuen destar loando de su mucha valentía, y mofando de nosotros con grandes burlas y risa; porque en sus buenos succesos de ordinario lo hazian; podrá ser que les hagamos la burla que no ymaginan; y assí, poniendo en effecto lo quel Cid al Rey pedia, dieron sobre los gallegos al punto que amanecia, y ántes que se apercibiesen muchos matan y cautiuan, y al Rey D. Alonso prenden dentro de Sancta María, que de Carrion llamauan; y los suyos que esto vian con furor nueuo rebueluen y al Rey D. Sancho prendian, y á catorze caualleros quen su guarda le tenian; llegando el Cid castellano estas palabras dezia: Dadme á mi Rey, caualleros, y el vuestro os entregaría. A lo qual le respondieron con mucha descortesía, que le lleuaran con él si otra vez se lo pedia; y desto el Cid offendido, á los catorze replica, no suelen dar caualleros respuestas descomedidas, y si vna lança tuuiera, aunque estoy sin compañía, quitara á todos vosotros el prisionero y la vida. Ellos, teniéndole en poco, le dieron lo que pedia, y comiença su batalla; y en poco tiempo traya sus contrarios de manera que deffensa no tenian; y auiendo muerto los treze el otro puso en huyda; y libertando á su Rey para Búrgos se boluian, á D. Alonso lleuando preso como le tenian. |