de Viseo, que se dará à su tiempo y creciendo la fama y pujanza de Viriato con tantas Victorias y destrozo de Pretores, fue preciso que Roma (casi exausta de gente) continuase la guerra con Eger. citos Consulares, compuestos de Varones escogidos, y de reclutas proprias, y de aliados. En fin empezó Viriato à ser vencido algunas veces, aunque no sin venganza: y no queriendo abusar con insolencia de su fortuna, la hizo servir à unos tratados de paz muy honorificos que siendo luego quebrantados por los Romanos, le costó la vida la renovacion, no por ser vencido de los enemigos, sino asesinado vilmente de sus amigos, que le degollaron hallandole durmiendo, por ha, por haverlos inducido con dones y promesas el Pretor Cepion à tal maldad, cerca del año 612. de la fundacion de Roma, 142. antes de Christo. 165 En el año 617. de Roma triumphó en Roma Decio Junio Bruto, con titulo de Lusitaneis & Callaiceis, y despues leemos otros con el mismo triumpho de Lusitaneis, por lo mucho que dieron (1) Pag. 366. 6. y pag. 368. 5. Tom. XIII. que hacer à los Romanos en diversas ocasiones, ya por sí, ya unidos con otros, como sucedió en la guerra de Sertorio, y en las de Julio Cesar con los Pompeyanos. Finalmentè pacificado el Orbe en el Imperio de Augusto, y hecha la Lusitania Provincia diversa de la Betica y Galicia, se fueron reduciendo todos à policía, haciendose Romanos en trage, lengua y propension, y valiendose de ellos los Romanos para militar en sus Legiones, en cuya conformidad se hallan varias Cohortes de Lusitanos mencionadas en Inscripciones, como se verá en una puesta arriba, al hablar de los Vettones, y en otras de Grutero (1) (donde se habla de uno que fue PRAEFecto COHortis I. HISPANORVM. ET. COHortis 1. MONTANORVM. ET. COHortis I. LVSITANORum Tribuno de la LEGion I. ADIVTRICIS) y en la pag. 382. 6. en que se lee la COH. VII. LVSITAN. en un Tribuno de la Legion XXI. RAPACis. 166 Desde Augusto quedó ennoblecida la Lusitania con la Colonia Romana Augusta Emerita, que se hizo L Ca Capital, y residencia de los Legados y Pretores, haviendo sido el primer Legado de Augusto, Publio Carisio, como testifican las Monedas, Othon (que despues fue Emperador) gobernó por diez años esta Provincia en tiempo de Nerón, portandose en su Legacía con gran moderacion. Asi fue prosiguiendo Lusitania en poder del Imperio hasta el Siglo quinto en que dominado todo nuestra Continente por los Barbaros, cayó en suerte la Lusitania à los Alanos en el año de 411. pero los duró muy poco: pues à los ocho años los destruyó el Rey Godo Walia, acabando con el nombre de Reyno de los Alanos: pues los pocos que se libraron, tuvieron que someterse al Rey Vandalo Gunderico, que mandaba en Galicia, como expresa en su Chronicon Idacio sobre el año de 419. 167 Pasandose los Vandalos de Galicia à la Betica, se bajaron los Suevos de los montes Nervasios (donde los tenian sitiados los Vandalos) à talar la Lusitania, llegando con sus hostilidades hasta Mérida: pero Gaiserico Rey de los Vandalos, aunque estaba disponiendo el irse à Africa, volvió contra el Rey Suevo Hermigario, à quien alcanzó cerca de Mérida, y matandole muchos, murió el Rey Suevo al huir, castigando Dios sus desacatos cometidos en Mérida contra la Virgen y Martyr Santa Eulalia, por medio de precipitarle en el rio Ana, como afirma Idacio sobre el año 429, 168 Al Rey Hermigario sucedió el Suevo Hermerico, que hallandose muy enfermo substituyó à su hijo Rechila: y éste prosiguiendo en las hostilidades, se apoderó de Mérida en el año de 439. donde murió Gentil en el 448. por Agosto. Por su muerte empezó à reynar el hijo Rechiario, que era Catholico, y no solo mantuvo lo que fue del Padre en Lusitania, sino que invadió las Provincias Carthaginense y de Tarragona, hasta que en el año 456. fue vencido por el Rey Godo Theudorico en la tierra de Astorga, cautivandole luego, y quitandole la vida, con lo que sin estorbo pasá estorbo pasó Theudorico à Lusitania y queriendo saquear à Mérida, le aterró con prodigios Santa Eulalia. Volvióse à las Galias y con su ausencia, pasó de Galicia à Lusitania el Partido de Sue vos, que seguia al Rey Maldra, y se apoderaron de Lis boa, haciendo muchos daños por la Provincia. seyendo todo lo que antiguamente fue Region legitima de Lusitania, esto es, quanto hay desde el Duero al Tajo, à excepcion del Obispado de Lisboa, alargado el dominio de los Reyes de Galicia à las jurisdicciones de Lamego, Viseo, Coimbra, y Egitania. 169 Entre estas turbaciones se vió hecha la Lusitania Theatro de hostilidad por todas partes: pues el Conde Sunierico puso cerco à Escala bis, y la tomó los Suevos entraron en Coimbra con especie de paz, y asolaron los campos y la Ciudad en el año de 468. Al año siguiente llegaron hasta Lisboa, tomandola por traicion y entonces entraron tambien los Godos, ocupando y destrozando cada uno quanto pudo de suerte que con estas competencias de Reyes, con tantas hostilidades, se turbaron los límites antiguos de Lusitania en lo civil y eclesiastico: pues los Suevos que tenian en Galicia la Corte (como su primera habitacion desde la suerte con que repartieron los Barbaros entre sí las Provincias) se hallan en el Siglo sexto po 170 Duró asi hasta el Rey Godo Leovigildo, que se apoderó del Reyno de los Suevos en el año de 585. y como desde entonces volvieron à quedar las Provincias segun estaban imperando los Romanos, sin division de Principes, sino reconociendo à un mismo Soberano; huvo motivo para que se redugesen à los límites antiguos, esto es, que la Galicia no bajase del rio Duero, y llegase hasta él la Lusitania, como se explicará en lo siguiente; pues aqui se menciona por titulo de sucesos de la Lusitania en comun, reservando las individualidades para los sitios donde pertenecen. CAPITULO VI. DE LA METROPOLI DE LUSITANIA despues que se hizo Provincia. I A Ntes que la España Ulterior estuviese dividida en las dos Provincias de Betica, y Lusitania, no consta que huviese Metropoli fija y determinada en todo el territorio que se aplicó à esta Provincia despues de separada, ni parece que era necesaria: porque en vista de ser toda la Ulterior una Provincia, no correspondia tener muchas Metropolis, sino que suprimiendo el nombre de Provincia, pongamos en su lugar el de Region, y se establezca una Capital en cada territorio de las Gentes antiguas: v. g. una en los Celticos, otra en los Vettones, y otra en los Lusitanos. Pero aun en este sentido faltan documentos para resolver por una determinada: y es creible que no huviese ninguna, por quanto en lo antiguo eran muy independientes unos Pueblos de otros, sin subordinacion, sin union, sin cabeza: lo que (como mencionamos arriba (1) Pag. 167. num. 151.) en lugar de asegurar la libertad ( à lo que parece aludía la independencia ) fue causa de introducir la sugecion, por no haver en tanta desunion fuerzas para resistir al Extraño. Solo pues desde que vemos Pretores de Romanos en España se puede rastrear algo: pero estos no bastan para investigar la Capital de las Regiones (por no haver uno para cada una) sino, à lo mas, de la Provincia: aunque tampoco de un modo convincente: porque es muy regular que pasasen los inviernos en la Ciudad mas oportuna para la guerra movida: la qual si andaba por Galicia (como en tiempo de Decio Bruto el Galaico) no pedia residencia del Pretor en la Betica, por la suma distancia. Asi vemos en Estrabon (1) que el Pretor de la Citerior solia tener los inviernos, ya en Tarragona, ya en Carthagena, segun lo pidiesen las nor despues de la asolacion. 4 Pero mas notable es la asignacion de la Metropoli aun al tiempo de empezar à ser Provincia la Lusitania: porque aunque lo comun de todos es recurrir à Mérida; no sirve esta respuesta para el que pregunte, qual fue la Capital de Lusitania en el año primero en que Augusto la segregó de la Betica: porque entonces no existia Mérida, y consiguientemente no podia ser ni Cabeza, ni miembro. Consta lo uno y lo otro por la Chronología: pues la division de las Provincias se hizo en el Consulado septimo de Augusto, [ año 27. antes de Christo ] como reconocen los Autores con Dion Casio, y con Casiodoro en su Chronicon: la fundacion de Mérida no empezó hasta dos años despues en el Consulado nono del mismo Augusto, acabada ya la guerra de los Cantabros y Asturianos como consta por el mismo Dion, so las circunstancias. Siendo tambien muy ampla la Ulterior, podia escoger la residencia, acomodandose à la oportunidad: en cuya conformidad refiere Apiano, que los dos Escipiones invernaron uno en Osuna, otro en Castulo (1) que Galba, sucesor de Atilio, invernó en los Cuneos (2), y que Fabio Maximo Emiliano pasó el invierno en Cordoba, (como tambien Quincio) (3) y en Polybio vemos (4) que M. Claudio hizo lo mismo. Con que por el preciso titulo de los sitios en que los Pretores invernaban, no puede convencerse la Capital de los Lusitanos, quando eran precisamente Region: porque ni havia Pretor para una sola Gente, ni entonces formaban sus Ciudades cuerpo à modo de Reyno. 3 En lo antiquisimo fue la mayor de Lusitania, una que Apiano (5) llama Oxthrace: pero esta fue arruinada por M. Atilio, ni parece que se restauró (a lo menos con aquel nombre aquel Consulado (7). De lo bre) pues no vuelve à sonar en adelante (6): y si por ser la mayor, servia como de Capital, pasaria à otra aquel ho que se convence, que Mérida nó fue Capital de la Lusitania, al tiempo de introducir Augusto esta Provincia: porque enton ces (1) Pag. 263. (1) Pag. 287. (3) Pag. 292. (4) Pag. 969. Pag. 287. (6) Excisaque Lusitanorum maxima urbe, cui nomen Osthra¬ c. (7) Pag. 313.y sig. |