Imatges de pàgina
PDF
EPUB

y la dignidad Episcopal Emeritense persevera en el Concilio de Eliberi: entre cuyos Prelados hallamos à Liberio con titulo de Obispo de esta Iglesia. El orden con que se nombra, es el decimo en nuestros' Codices Mss. ò el decimo quinto en las ediciones antiguas, que antepusimos al hablar de Osio en el Tomo X. y por tanto es preciso decir, que haviendose celebra do aquel Concilio en la entra da del Siglo quarto (como se expuso sobre la Iglesia de Eli. beri en el Tomo precedente) incidió la consagracion de Liberio al fin del Siglo tercero, pues era de los menos antiguos entre diez y nueve que asistieron.

Acerca de sus acciones la primera es esta de haver concurrido personalmente à Eliberi, y haver decretado con los demas Prelados de aquel Synodo los Canones de observancia y disciplina tan recomendable como alli se como alli se propuso, proprios del espiritu fervoroso de los primeros Padres.

23 Poco despues de aquel Concilio 'empezó la persecueion general de Diocleciano, en que Mérida tuvo la gloria de algunas Coronas de Mar

tyrio, especialmente de su ilustre Ciudadana la Inclyta Santa Eulalia, que triumphó gloriosamente de la supersticion en el año de 304. segun referirémos en su lugar. Este tiempo incidió en el Pontificado de Liberio, que perseveró en la Sede en los años siguientes; y por tanto tuvo el gozo de ver en sus dias un triumpho tan heroyco en una delicadisima doncella. Cooperaria à sepultar y honrar aquel sacratisimo cadaver con el jubilo de Padre en las ce; lestiales nupcias de la hija: Padre digo, por oficio, como Pastor que era de los Fieles de todo aquel rebaño; no por naturaleza (como algunos quieren) porque el llamarse Liberio el Padre de la Santa, y ver alli al mismo tiempo un Obispo de aquel nombre, es muy flaca congetura para identificar las personas: y por la circunstancia del Sacerdocio pedia testimonio muy abonado: ni se hace creible, que los documentos antiguos huviesen omitido una cosa tan notable, si el Padre de la Santa se hallase à la sazon Obispo de la misma Ciudad.

24 Otra acción notable del Prelado Liberio es, que à los diez años despues del

Mar

se

verle menos antiguo que Osio en el Concilio de Eliberi (con tres Obispos entre los dos) y mas antiguo que quatro en el mismo Concilio. Pero las firmas se pusieron distribuidas por Provincias.

25 Su Pontificado fue mezclado de pesares y gozos, se gun prueban los dos tiempos tan contrarios, como el de la persecucion de Diocleciano, y el de la paz general de Constantino. Sobrevivió algunos años despues del Concilio Arelatense, como promete el Pontificado del sucesor, si este fue el mismo Diacono Florencio que concurrió con él al citado Concilio (segun parece probable) porque hallando à éste pre.sidiendo en Mérida en el año

Martyrio de la Santa, salió de España para las Galias al Concilio, que de orden del Emperador Constantino congregó en el año de 314. en la Ciudad de Arles, y fue el Arelatense I. Entre los muchos Obispos, que formaron el Synodo, se halló nuestro Liberio, acompañado de un Diacono, llamado Florencio, con el qual subscribió, expresando la Iglesia, y la Nacion Liberius Liberius Episcopus, Episcopus, Florentius Diaconus, de Civitate Emerita, Provincia Hispania. Este fue el unico Obispo de España, que se lee entre los nombres de los que concurrieron al Concilio, segun hoy le tenemos: pues aunque suenan mas Ciudades, no estuvieron representadas sus Iglesias por Obispos, sino por Cle-de. 347. pide el juicio prúrigos, dirigidos en nombre de dencial de lo regular, señalas Comunidades que pudie- lar el fin de uno y principio ron y quisieron enviar Minis- del otro cerca del 321. con tros que representasen sus Se- poca diferencia, como se dides. Por tanto Liberio, como rá. cn Obispo, precede à todos los demas Españoles que alli se expresan y tambien podia preceder à otros, aunque fuesen Obispos, por la antigue- y': dad, que era ya de unos diez y siete años de consagracion, tomandola desde cerca del 297. cuya epoca resulta de

4

[ocr errors]
[ocr errors]

FLORENCIO.

Desde cerca del 321. hasta £ cerca del 357.

[ocr errors]

26 Despues de Liberio hallamos en la Sede de Mérida un Prelado que se llamó Flo

теп

[ocr errors]

rencio, cuyo nombre, y dignidad consta por las subscripciones del Concilio Sardicense en las novisimas ediciones (pues las antiguas le nombran Fiorentino) y juntamen te se autoriza el nombre de Florencio por el Libelo de los el Libelo de los Presbyteros Marcelino y Faus tino à los Emperadores Valentiniano y Theodosio.

27 Este mismo nombre de Florencio hallamos en la Iglesia de Mérida en uno de sus Clerigos, esto es, en el Diacono que asistió con su Obispo Liberio al Concilio Arelatense: y no tenemos dificul- tad en admitir, que aquel Dia -cono Florencio fue el que su cedió à Liberio en la Sede, pues à esto conspiran las circunstancias, conviene à saber, la identidad de la Iglesia, la del nombre, y la del tiempo: pues eligiendose entonces los Prelados del gremio de los -Clerigos que servian à la misma Iglesia, y hallando entre los de Mérida uno del mismo nombre que el electo; no tenemos fundamento para negar que el consagrado Obispo fue el que antes servia alli como Diacono; antes bien le tenemos para decir, que este fue el sucesor de Liberio: pues sobre ser una misma la Igle.

sia, y uno mismo el nombre, hay la circunstancia de hallar aquel Diacono condecorado con la eleccion de su Prelado, para concurrir al Concilio general Arelatense, en que efectivamente se halló: y por tan. to, despues de muerto Liberio, no havia en su Iglesia Clerigo mas sobresaliente que el Arcediano Florencio, por lo que todos pondrian en él los ojos para entronizarle en la Sede.

28 Favorece tambien el tiempo: pues el que viviendo Liberio se hallaba condecorado con el primer empleo de Diacono, y con el honor de haver asistido à un Synodo general, ticne proporcion para ser reconocido sucesor immediato de Liberio: especialmente si éste vivió algunos años despues del Concilio Arelatense, como pudo segun orden regular, y en vista de que por aquel tiempo escogian para la Prelacía à sugetos no muy ancianos, à fin de que la robustez de la edad les facilitase las operaciones del zelo, y de su cargo. Pudo pues Liberio presidir en su Iglesia 24. años poco mas o menos (esto es, siete, ù ocho mas de los que tenia en el año de 314.) pues à vista de lo pro

lon

longados que eran los Pontificados de otros Obispos de aquel tiempo, es este espacio de los mas cortos y en tal suposicion entra bien la Chronologia de Florencio, como sucesor immediato de Liberio: pues señalando su consagracion cerca del 321, con poca diferencia; se salva lo que en éste nos consta acerca de la Chronologia, que es la luz para los sucesos pues solo en virtud de esto dirémos, que Florencio se crió en la Iglesia de Mérida: que llegó à ser su Arcediano: que le escogió Liberio entre todos sus Clerigos para llevarle al Concilio Arelatense que estuvo en aquel Synodo y que faltan do el Prelado, fue electo en su lugar.

29 Las acciones de Florencio en su Pontificado no han llegado à la noticia de la posteridad. Solo sabemos con certeza, que fue uno de los Obispos Españoles, que con currieron al Concilio General Sardicense, presidido por el Grande Osio.de Cordoba, en el año de 347. entre cuyas subscripciones vemos en ter cer lugar la de nuestro Prela do: Florentius ab Spaniis de Emerita. Fue precedido de Osio, y de Aniano, Obispo Tom. XIII.

Castulonense , mas antiguo : pero precedió Florencio à les demas Españoles, que asistieron, el de Astorga, el de Zaragoza, y el de Barcelona: porque entonces tenia ya bastante antiguedad, segun prueba lo expuesto; pues si empezó cerca del 321. contaba entonces cerca de 26. años de Prelacía.

30 Sobrevivió diez años, si es verdad lo que acerca de su muerte escribieron Marce→ lino y Faustino en el Libelo presentado al Emperador Theodosio: pues alli dicen, que murió de resulta del Concilia Sirmiense, con muerte repentina, en pena de haver comunicado con Osio y Potamio, sabiendo que havian prevaricado, El modo con que tiraron à proteger aquellos Presbyteros su cisma, fue diciendo, que Florencio despues de tratar con los prevaricadores Osio, y Potamio, cayó de repente, de su asiento en un concurso público de su Iglesia, de que le sacaron palpitando. Volvió ya mejorado à ocupar la Sede, y volvióle à suceder lo mismo. Quiso tercera vez subir al throno: y finalmente fue repelido como indigno, cayendo no desmayado como antes, sino muer

[blocks in formation]

to. Asi los mencionados Presbyteros en el fragmento propuesto en el Tomo X. (1)

31 La insinuada prevaricacion de Osio fue en Sirmio en el año de 357. y si Florencio comunicó entonces con Osio, es prueba de que sobrevivió hasta el citado año: en que de vuelta à España (si fue à Sirmio) es creíble falleciese, por tener ya mas de treinta años de Prelacía, si es verdad lo que arriba se dijo. Tambien puede admitirse, que Marcelino y Faustino supiesen la muerte de Florencio por aquel tiempo, y la tomasen por medio para el fin de su idéa, que era espantar al mundo con castigos de los que huviesen tratado con los caídos, para autorizar de aquel modo su secta Luciferiana, que no admitia comer cio con los que huviesen flaqueado.

32 Pero acerca de si fue verdad la muerte de Floren cio eu la conformidad que alli se expone, cayendo tercera vez de su throno, se necesitaba testimonio mas autorizado que el de quellos Presbyteros porque estos en lugar de conciliar credito, hacen

(1) Pag. 483. num. 5.

sospechar, que no huvo tal cosa, y que Florencio fue uno de los buenos Prelados, que no siguieron el partido de los Luciferianos: pues contra estos se armaron los Cismaticos mencionados, publicando castigos espantosos, para aterrar al Orbe, y traherle à su secta. Pero como esta no podia autorizarse por milagros verdaderos, tomaron ellos à su cuenta el fingirlos, como se vió en las demas calumnias, especialmente en la de Osio, en que se deja ya descubierta su maldad.

33 Si se mira individualmente la materia segun sus circunstancias, poca reflexion se necesita para conocer que no merece credito aquella relacion. Los que hablan son Cismaticos, opuestos, y declarados enemigos de todos los que no son de su secta. Son tambien falsarios, como se probó en la causa de Osio. Hablan privadamente en un Memorial dirigido à buscar proteccion de su mala conducta. El fin se conoce no ser bueno , pues quién extrañará que usen de malos medios? El instrumento, donde se conserva la especie, es

un

« AnteriorContinua »