Lam XC11-2 del tomo 50

1950. Ybartola. 1951. Acelain. 1952 Barreneche a 1953. Loidi. 1954 Alzolaras.

Cromo lit Heraldica.

LAMINA XQII,

(2. DE ESTE TOMO.)

1930. Monroy. Entre los calificados y antiguos linages de Estremadura se cuenta el de Monroy, bien conocido por su mucha nobleza, por los distinguidos caballeros que ha producido y por haber sido fuente y orígen de la casa de los condes de Deleitosa y de otros muchos títulos.

Hernan Rodriguez de Monroy, señor de Monroy, Almaraz, Deleitosa, Puñoenrostro y de otros lugares, fué caballero generoso y de gran valor en la disciplina militar, señalándose principalmente en las guerras de la ciudad de Antequera, cuando la ganó el infante Don Fernando.

Rodrigo de Monroy fué caballero de muy levantados pensamientos y de gran valor en los acaecimientos y trances de guerra.

Don Sancho de Monroy y Zúñiga, veedor general de las galeras de España, dió principio á sus servicios en la jornada de Irlanda, cuando se perdió en Corcubion el adelantado de Castilla. Pasó á los estados de Flandes el año de 1597, con la gente que llevaba á su cargo Don Sancho de Leiva: sirvió en campaña todo el tiempo que duró la guerra en aquellos paises, señalándose en muchos sitios y combates. Fué capitan de infantería, con la cual se halló en el sitio de Ostende pelcando mañana y tarde valerosamente con el enemigo, y en las Dunas de Neoporte, desde donde hechas las paces con las Islas, pasó á servir á Milan, y despues á Flandes, donde fué del consejo de Guerra. Vino á España en el año de 1614, y se halló en la accion de la Mamora; fué veedor general de la gente de guerra del reino de Portugal y caballero del hábito de Santiago.

Don Francisco de Monroy, primer conde de Deleitosa, señor de las villas de Velbis y Almaraz, sirvió al rey Don Felipe I y al emperador Carlos su hijo, rey de las Españas, en todas las ocasiones de paz y guerra, por cuyos servicios y los de sus mayores, le honró el César con el título de conde de su villa de Deleitosa.

Las armas de esta ilustre casa son: Escudo cuartelado; el 1.o y el 4.o de gules y castillo de oro; el 2.° y el 3.o verados de plata y azur; sobre el todo

:

escuson de oro y los palos ó barras de Aragon; bordura de este, en azur ocho crucecitas de plata 1.

1951. Tasis. Reconocen los genealogistas por tronco y principal ascendiente de la casa de Tasis á Martino de la Torre, poderoso y esforzado caballero, oriundo de una familia emparentada con la real de Francia, la cual desde muy remotos tiempos poseyó el condado y señorío de Balsasina, en Lombardia. Fué Martino de los guerreros que mas relevantes pruebas de valor dieron en las Cruzadas, señalándose principalmente en el combate de Damasco, donde al ver el grave peligro en que estaban los cristianos, arrastrado de su bravura é intrepidez, sc arrojó en medio de los enemigos, causándoles grandes destrozos; hasta que agotadas sus fuerzas, fué hecho prisionero y martirizado por los infieles 2.

Ha sido esta casa muy fecunda en insignes varones, y durante muchos años estuvo como vinculado en ella el gobierno de muchos pueblos y villas, particularmente el gobierno y señorío de la ciudad de Milan, capital de la Lombardia.

Hácia fines del siglo XIII, por los motivos espresados en los apuntes abajo puestos, núm. VIII, empezaron los hijos de este esclarecido linage á ser designados ya con su antiguo nombre de La Torre, ya con el de Taso ó Tasis. Con este nombre fueron conocidos en la corte de Austria, en la cual hicieron brillante papel en tiempo del emperador Maximiliano, á quien sirvieron con acrisolada lealtad, prestándole señalados servicios. Y cuando aquel imperio pasó á manos del invicto emperador Carlos V de Alemania, I de España; Juan

Lopez de Haro, Nobiliario Genealógico, tom. 2, lib. 8, cap. 11, pág. 194.

⚫ Algunos apuntes genealógicos:

I. Martino de la Torre fué padre de

II. Jacobo de la Torre tuvo por hijo primogénito á

III. Pagano de la Torre tuvo entre otros hijos á Francisco de la Torre, en quien sigue esta sucesion, y Napo de la Torre, llamado por otro nombre Napoleon, que fué señor y gobernador de la ciudad de Milan, y casó con hija del conde Othon.

IV. Francisco de la Torre, hijo tercero de Pagano, sucedió á su hermano Napoleon en el señorío y gobierno de la ciudad de Milan. Tuvo por hijo primogénito á

V. Guidon de la Torre, señor y gobernador de Milan, tuvo entre otros hijos á

VI. Francisco de la Torre, segundo del nombre, que sucedió en los estados de esta casa. Parece que tuvo por hijo á

VII. Francisco de la Torre, tercero del nombre, padre de

VIII. Lamural de la Torre, el primero que se llamó de Taso ó Tasis por haber establecido su casa en una montaña así llamada, por estar llena en aquellos tiempos de una especie de animales llamados taso. Hay sin embargo autores que si bien están conforme sobre la causa ú origen del apellido Tasis, pretenden que el primero que llevó este nombre fué Jacobo de la Torre, hijo de Jacobo, espresado en el núm. II. Ello es que desde fines del siglo XIII, estaban

Bautista de Tasis, que habia sido camarero mayor de Maximiliano, continuó en la corte mereciendo el mayor aprecio y estimacion de nuestro Carlos V.

Su hijo Raimundo de Tasis, núm. XIV, se estableció en España, donde prestó importantes servicios al rey Don Felipe II, quien le colmó de mercedes. Y el rey Don Felipe III, en atencion á los grandes merecimientos de la casa de Tasis, agració con el título de conde de Villamediana á Don Juan de Tasis, de quien hace particular elogio Lopez de Haro, como se vé en el siguiente pasage.

"Don Juan de Tasis, caballero de la órden de Santiago, hijo primogénito de Raimundo de Tasis y de Doña Catalina de Acuña, su muger, como se ha visto en esta genealogía, nació en Valladolid, y pasó sus primeros años y tierna edad en la villa de Dueñas con Doña Catalina de Acuña, su madre, en la casa de sus abuelos los condes de Buendia, y de allí volvió luego ȧ palacio á servir al príncipe Don Carlos con grande satisfaccion por concurrir en él las partes de valor y agilidad que favoreció tanto este serenísimo príncipe, á quien asistió hasta que le apartó la edad y las ocasiones, hallándose en la guerra de Granada, donde en la primera ocasion le mataron los moros el caballo que el serenísimo señor Don Juan de Austria le habia dado. Peleó señaladamente en el asalto de Galera: hallóse en la jornada del Peñon y socorro de Orán.....

>>Fué tambien con la magestad del católico rey Don Felipe II á la jornada de Portugal, con gran lustre, particularmente de caballos, que sino en número en calidad escedia á los del mismo rey; fué despues á la última jornada de Tarazona con S. M., donde le asistió en toda ella. Fué caballero de grande

ya muy estendidos en toda la Lombardía los hijos de esta poderosa casa, conocidos unos con el nombre de la Torre, otros con el de Tasis: de estos fué

IX. Rugero de Tasis, sobrino de Francisco de la Torre, núm. VII, tuvo por hijos á Francisco de Tasis, que murió sin hijos, y Simon de Tasis, en quien se continúa esta sucesion.

X. Simon de Tasis tuvo dos hijos, que fueron Francisco de Tasis, que murió sin hijos, y Rugero, que sucedió á su hermano.

XI. Rugero de Tasis, segundo del nombre, tuvo entre otros hijos á

XII. Juan Bautista de Tasis casó en Flandes con Cristina de Braquendon, de antigua y calificada estirpe; y tuvieron once hijos, siendo el primogénito

XIII. Raimundo de Tasis casó en España con Doña Catalina de Acuña, y tuvieron por hijo primogénito y sucesor á

XIV. Don Juan de Tasis, 1.er conde de Villamediana, casó con Doña María de Peralta; y tuvieron por hijo y sucesor á

XV. Don Juan de Tasis, 2.o conde de Villamediana, que floreció en la primera mitad del siglo XVII: casó con Doña Ana de Mendoza y de la Cerda, hija de Don Enrique de Mendoza y Aragon, hermano del 5.o duque del Infantado, y de Doña Ana de la Cerda, hija de Don Fernando de la Cerda, hermano del duque de Medinaceli.

opinion por su espada, y así tenia grandes heridas en el rostro, sacadas en dos desafios, los mas señalados y bien combatidos que hubo en su tiempo; y en fin, de cinco veces que estuvo en duelo, salió siempre gloriosamente, y en otras muchas ocasiones mostró ventajosísimamente el valor de su persona. Fué muy señalado en los ejercicios de caballero, y manejó las armas de manera que fué opinion asentada en estos reinos, que por ventajoso le fué prǝhibido por ley el ejercicio de ellas, y si bien esto no fué verdad, que él me lo dijo á boca, pudo tanto la opinion, que fué esta comun en España.

»Dióle el católico rey Don Felipe III la llave de su cámara, y le honró con el título benemérito de conde de Villamediana, cuando fué embajador éstraordinario á Jacobo, rey de Inglaterra, y habiendo asistido en aquella corte casi dos años favoreciendo á los católicos de todo aquel reino, y sacando á muchos sacerdotes de prision de muchos años, concluyó aquellas paces á satisfaccion de ambas coronas, recibiendo de los reyes de Inglaterra grandes honras y favores estraordinarios 1.»

Actualmente parece estar estinguida en España esta casa; pero casi todas las de nuestra primera grandeza cuentan entre sus ilustres ascendientes algun hijo ó deudo de la de Tasis.

Sus armas son: Escudo de oro y una águila imperial coronada; cortado de azur y el animal llamado taso, en italiano, pasante sobre terraza en el centro, y una peña naciente de la punta 2.

1932. Zárate. El linage de Zárate se considera como originario de la region cantábrica, principalmente del señorío de Vizcaya, donde radican los mas antiguos solares de este nombre, y ha producido muchos varones eminentes en las armas y en las letras, entre los cuales descuella Don Diego de Zárate, á quien el emperador Carlos V dió inequívocas pruebas de aprecio y estimacion, concediéndole las armas que en este número están pintadas, como consta por un real privilegio, del cual estractamos el siguiente pasage:

«Carlos V, augusto por la Divina clemencia, emperador de romanos, rey de Alemania, de las Españas, de las Dos Sicilias, de Jerusalen, de las Islas de Mallorca y Canarias y del Nuevo Orbe de las Indias, etc.; archiduque de Austria, duque de Borgoña, señor de Flandes, etc. A nuestro fiel y querido criado Diego de Zárate, nuestro soldado ó caballero dorado, nuestra gracia cesárea y todo bien: aunque es bien claro que la virtud siempre se contentó consigo misma, á la cual como ciertos premios sigue la honra, grandeza y gloria; pero con todo eso, cuando es aprobada con el testimonio de grandes

1

Lopez de Haro, Nobiliario Genealógico, tom. 2, lib. 6, pág. 28.)

› Lopez de Haro, lugar citado en la nota anterior.