Imágenes de página
PDF
ePub

XVI

Sevilla 18 de Mayo de 1565.-Pero Menéndez avisa á S. M. que para partir à la Florida á echar los luteranos que estaban apoderados de ella, como se lo tenia ordenado, se sirviese mandar á los Oficiales de la Contratación le pagasen los 15.000 ducados que le habia hecho merced, y otra cantidad que le tenían embargada desde que le prendieron; pues esto era lo que mas le urgia para pagar bastimentos y otras cosas que tenia tomados; y que proveyéndole de otras cosas que le pide, se haría á la vela al instante. Y le da noticia como sabia que 5 navios de franceses iban cargados de mujeres á poblar la Florida. ά

[ocr errors]

ATHOLICA REAL MAGESTAD.-Yo llegué à esta Ciudad á los doze deste, y se me dió luego un despacho de V. M., de siete, en que me manda haga alzar con deligencia docientos infantes para la jornada de la Florida, por que con estos y con los que yo llevo, y los que V. M. manda se me den en las Indias, y con los de las Naos Capitana y Almiranta, de Pedro de las Roelas, podré con mas facilidad echar los Luteranos de la Florida; y ansi, luego el mesmo dia despaché Capitanes para alzar los doscientos soldados, y me parti á Cadiz á dar orden en el despacho del Galeon San Pelayo, que tengo de llebar esta jornada hasta la Dominica, el qual hallé muy bien aderezado, y que tenian fletadas quatrocientas toneladas de ropa para llevar en él á Tierra Firme, conforme à la licencia dada por V. M.; y destas, las cien toneladas que se fletaron con vecinos de Cadiz, están cargadas dende primero deste, y las

trescientas toneladas fletadas con vecinos desta ciudad, con condicion que á los veinte deste habian de estar abordo, y no lo estando pagarian el flete de vacio. Con estar fletadas dende veinte de Abril hasta hoy, no se han llevado por haberlo impedido los Jueces de la Contratacion, con no haber querido dar licencia para cargar y llevar dichas mercadurias á instancia del Prior y Consules, diciendo serles notable daño el que este Galeon causaria con su ida al Nombre de Dios.

Y visto esto, me volví luego á esta Ciudad, donde los dichos Jueces, y Prior, y Consules, me han importunado haya por bien quel dicho Galeon no haga el viaje de Nombre de Dios, ni acabe de recivir las dichas quatrocientas toneladas de mercaderias que están fletadas y obligados á dar abordo á veinte deste, y que en lugar de dichas quatrocientas toneladas de mercaderias reciva en él los doscientos soldados que V. M. manda se me den, con los bastimentos y municiones que para ellos son menester, que ocuparán las dichas quatrocientas toneladas. E yo, visto su deseo y lo que dicen importarles, y que con dificultad se hallará Nao suficiente y aparejada para que luego pueda recivir los doscientos soldados con la brevedad que conviene, y que lo que se me pide es servicio de V. M., y con mayor brevedad en mi despacho, no obstante que me va à decir de daño mas de ocho mil ducados en que el Galeon dexe de ir al Nombre de Dios, y que es mayor el riesgo que terná llevandolo conmigo, he dicho haré lo que me piden, pagando lo que se habria de pagar à qualquier otra Nao que se hobiese de tomar para llevar los dichos doscientos soldados y bastimentos y municiones para ellos, y con que la Universidad me dé en recompensa de los gastos grandes que se han hecho en el Galeon para efecto de ir al Nombre de Dios, que no se hicieran, dos mil ducados, que me cuesta á mí mas de quatro mil.

Yo tengo hecha toda la gente que estoy obligado conforme al asiento que V. M. mandó tomar conmigo, y todos los bastimentos y municiones están comprados, y no me falta ninguna cosa, con lo que dexé en Vizcaya y con lo que aquí tengo, y podria salir á fin de Mayo dándome los Jueces y Oficiales de V. M. recaudo de bastimentos, y lo demás que es necesario para los doscientos soldados que es á su cargo pagar y bastecer, y dar Navio, por que hoy son venidos los Capitanes que los dexan hechos, y estarán todos en Cadiz, con el cumplimiento de los que yo soy obligado en fin de este mes, para hacer muestra y alarde, y que se les haga paga.

Convendrá que V. M. mande que con toda diligencia envien á Cadiz el bastimento, artilleria y municiones necesarios, y á hacer la dicha paga de gente y Navios, por que esto se podrá hacer con facilidad; y hecho, yo me podré partir sin perder tiempo la vuelta de las Islas de Canaria, á juntarme con los Navios que dexé en Vizcaya á cargo del Capitan Estevan de las Alas, que tengo por cierto saldrán en fin de este mes, y recojido que los haya, seguiré mi viaje con la buena ventura, y en todo procuraré el mas servicio de V. M.

V. M. me hizo merced de quince mil ducados en el asiento que conmigo mandó tomar, y mandó que para dárseme, diese fianzas de que estaria presto en todo este mes de Mayo, para partirme en seguimiento de mi viaje, así de Cadiz como de Vizcaya; y como los que habian de ser mis fiadores vieron que los Jueces impedian el llevar las mercaderias à Cadiz para el Galeon San Pelayo, no se atrevieron á hacerlas, y así hasta agora no se me han dado, y todos los bastimentos se me han comprado á rédito, y han costado mas. Por esta razon, suplico á V. M. sea servido hacerme merced que pues yo he cumplido con todo lo que se me ha mandado, y estoy presto, que V. M. mande se me den los dichos quince mil ducados

libremente sin dar fianzas, para que con ellos pueda

pagar.

Asimismo se me deven en esta Casa de la Contratacion pasados de veinte mil ducados á mí y á mi hermano, que nos tienen embargados dende nuestras prisiones, y del sueldo de mis Galeones y Patache, de que he traido executoria de V. M. y carta en que se les manda á los Oficiales que con toda brevedad sea pagado, y hasta hoy no lo han hecho; y aunque les he rogado é importunado cada dia me manden pagar, no lo hacen, difiriéndolo con decir que el Factor Francisco Duarte está en San Lucar entendiendo en el despacho de la Flota de Pedro de las Roelas, y que tiene consigo á Carrillo, Escribano de la Casa, y que sin el dicho Carrillo no se puede entender en el negocio; y que lo han enviado á llamar, y que venido me despacharán. Y de no se me haber pagado lo que se me deve me es notable daño, por que tengo puesto en necesidad á todos mis amigos, y compro todas las cosas que he menester á mayores precios que las compraria con los dineros, y detiénenme mucha parte de los bastimentos y municiones que tengo comprado hasta que les pague; y sin ser yo pagado de lo que se me deve, y dárseme los quinze mil ducados que V. M. me hizo merced, para con lo uno y lo otro pagar lo que devo, y recoger lo que tengo comprado, que se recojerá y cargará en dos dias, no será posible poder yo partir: suplico á V. M. sea servido mandar á los dichos Oficiales que dentro de quatro dias fenescan mis cuentas, y me hagan pagar lo que se me deve, sin dar lugar á largas ni dilaciones.

Demas de cumplir con lo que conforme al asiento estoy obligado á llevar, entendiendo lo mucho que importa al servicio de V. M. en falta de las Galeras y Galeotas que pedí, he procurado comprar una muy buena Galeota de diez y ocho bancos, y un Bergantin grande.

de doze bancos, para que con estos dos, y otros dos Bergantines que van de Vizcaya, pueda hacer algunos buenos efectos para con los cosarios que estuvieren en los Puertos de la Florida, aunque me hará gran falta no tener chusma para ellos: procuraré todo lo posible atripularlos con Marineros de buena boya, y para esto será menester que pueda llevar los extrangeros que me parezca ser necesarios, pues no es inconveniente que vayan de presente la jornada, y por la falta grande que hay de naturales, que no se pueden haber, ni quieren hacer la jornada; y algunos que llevo es pagándoles muy crecidos sueldos, por que es grande la dicha falta que hay de Marineros, así por no ser llegadas las Flotas que se aguardan de las Indias, como por las dos Flotas que van, y haber las Galeras recojido muchos, y háceseles de mal yr á la Florida viendo que ya voy tarde y sobre tiempo de huracanes. Y V. M. puede estar cierto que hago y haré de mi parte las diligencias que humanamente se puedan hacer para que V. M. sea bien servido, y que en esta jornada he puesto y porné toda la hacienda que tengo yo, y mis deudos, y mis amigos, y confio en Nuestro Señor que en todo será Su Divina Magestad servido, y me dará buen suceso para con que V. M. lo sea; y así, suplicó á V. M. mande haber por bien la dispensacion que pido de llevar extrangeros, pues son forzosos y necesarios para esta jornada.

V. M. mande que los Oficiales me den cien quintales de polvora de cañon para batir la fuerza ó fuerzas que hoviere en la Florida, por que esto es lo mas necesario para con las piezas de artilleria que V. M. me manda dar. Gente de guerra llevo muy buena, porque me siguen muchos Capitanes y soldados viejos de los que en mi compañia han servido á V. M. Tengo falta de un buen Ingeniero, y de una persona que entienda bien el artilleria; y aunque en Málaga y Gibraltar, y por esta cos

« AnteriorContinuar »