de S. M. se envie luego dinero para yo ser despachado. Tambien certifico á V. S. I. que llevo muy poca gente con ochocientos hombres de mar y guerra que me dan y mil y dozientas toneladas en diez Navios, que son pequeños y las toneladas pocas; abia menester tomar dos Naos mas, que las ay prestes y á punto, de las tres que D. Luis tenia aparejadas para sí, que despues se las mandaron dexar, y mandarme tomar mas quatrocientos hombres, que por el vastimento no estaré detenido ninguna cosa, y si no hubiere para dos meses, abrá para mes y medio; y mandarme dar alguna artilleria mas, y por lo poco otros cinquenta quintales de polvora de arcabuz, porque en toda la que acá tengo no es mas de veynte y quatro quintales de polvora de cañon y seis quintales de arcabuz, y tan desapercivido como estoy de polvora no conviene entrar en la mar, para dar de mí mala quenta; que cuerpos de corazas, Arcabuzes, Vallestas y morriones, yo proveo á la gente á cuenta de su sueldo, y todos llevarán muy buenas armas; que si me dan los quatrocientos hombres mas, que son bien menester, yo los buscaré en tres ó quatro dias, y muy buena gente, que van conmigo de buena gana, saldré luego en busca de Pie de Palo y otros cosarios y los siguiré á donde quiera que estubieren, hasta los hallar; y espero en Dios, sy los hallo, de los desbaratar, aun que trayga doblada Armada y gente, porque la mas de la que traerán será canalla, é yo de los mil y dozientos hombres que llevaré, serán los ochocientos, pocos más ó menos, marineros, y los otros será buena gente; y siempre que llegue á parte que sepa donde anda este cosario, podré en la costa mas cercana de donde él anduviere tomar quatrocientos ó quinientos hombres pescadores y de los de la tierra, para hacer este cometimiento y para tener mas segura la vitoria; porque con estos vendavales él andará en esa costa de Asturias hasta que los tiempos vengan buenos, y como sepa que D. Luys es ydo, no ten

y

drá de que se recelar; porque aunque de mi tenga noticia que hago Armada, pensará que estos dos ó tres meses no podré aprestarme, y aunque me apreste, que me convendrá andar huyendo dél y no buscarlo; y esto me parece se deve proveer y remediar con toda brevedad desta manera, para dar mal fin deste cosario, que podrá dar desasosiegos à S. M. y á sus subditos. Que yo digo á V. I. S., si me proveen de dineros, que serán menester por lo poco otros seys mill ducados; yo estaré presto en fin deste con las dos mil toneladas y mill y dozientos hombres; que yo espero en Dios, aunque esta Armada trae poco costo, hará harto efeto, y'S. M. seré della muy servido. Y á los mercaderes de Sevilla, aunque la ayan de pagar de averías, no les parecerá muchas toneladas de Armada, porque la que truxe en Septiembre pasado quando vine de las Yndias, traia tres mil y tantas toneladas en los Navios de armada, y en la armada que agora trae D. Luys de Carvajal ay pasadas tres mil y quinientas, y la de D. Alvaro llega á tres mil. No digo esto porque la que me avian dado no era arto grande para el efeto de lo que me mandavan servir. Y pues se ofrece esta coyuntura, ay necesidad muy grande que se remedie; que mi celo y deseo de acertar, yo creo lo tendrá V. S. I. entendido, y deseo mucho sea S. M. de mí muy servido, y espero en Dios que lo ha de ser, y que tengo de tener todas vitorias contra sus enemigos. Si V." I.* S.^ acuerda que esto se provea, sea luego con toda brevedad, y sea yo avisado dello para que busque la gente que me falta y haga aderezar los Navios; porque no conviene en ninguna manera aver en esto dilacion, porque este cosario no haga daños en la costa y despues se vaya á parte donde no se le pueda hallar, y al presente andará muy

descuidado.

V. I. S. lo mande ver y proveer como le parece mas conviene al servicio de S. M.; y si fuere posible,

no me envien tan flaco de armada á buscar este cosario, y de qualquier manera, no conviene dexar de salirlo á buscar. A V. I. S. suplico se me haga en esto la mercez que hubiere lugar, pues es para en servicio de S. M. y defensa de su costa y subditos, que yo haré en todo lo que devo; y la gran confianza que V. I. S. de mi tiene, saldrá muy verdadera, porque yo soy y seré muy homhre de bien, y Dios Nuestro Señor hará á V. S.* I.a el galardon de todo el favor y merced que V." S." me hiziere.

Estando escreviendo esta carta, reciví la de Pero Ruyz de Villota, que va con esta, por la qual parece averme tomado D. Luis, de las quarenta y quatro piezas de artilleria que me libraron en Laredo, las treinta y dos; que no me da alli mas de doze piezas, que son seis medios cañones y seis medias culebrinas. Aquí estan en poder del licenciado Ercilla veinte piezas, que son onze falconetes que se me podrán dar, en lugar de doze que me libraron en Laredo, que no los ay, y quatro sacres, que serán por otros quatro que me avian de dar en Laredo; y ay mas cinco medias culebrinas, y tienen estas veynte piezas cada cien pelotas y todos sus aderezos, que no les falta sino ruedas de mar. Convendria escrevir al licenciado Ercilla me dé estas veinte piezas con todos sus aderezos y pelotas, porque las ruedas de mar están en Laredo, que las tiene Pero Ruyz de Villota, y abrá necesidad de mandar á Pero Ruyz me las dé, y las seis medias culebrinas y seis medios cañones, que temo quando vaya por ellos no me las dará; y escrivirle me dé las veynte piezas de campaña que su alteza en él me libró, porque tiene quantidad dellas, é izolo muy mal, porque aviendomelas ya entregado, las dió á D. Luys de Carvajal, podiéndole dar de otras. Tanbien tenia por alli hechos hasta cien hombres; como D. Luis me dió licencia que los pudiese buscar, porque él tenia los que avia menester, los hallé en dos dias; y esto no me da ninguna pena, ni será

causa que aya dilacion en mi partida, porque abré la gente que hubiere menester sin tocar atanvor. Y si V.* I.a S.a me manda tomar las dos Naos mas, estan calafetadas y ensevadas y tienen muy buena artilleria y municiones de hierro; que con darles algunas piezas de las de metal mayores, yrán como convienen, y pues son Naos que han de abordar, çufrirse ha, aunque vayan algo flacas de artilleria.

Yo me partiré víspera de Pascoa para Laredo, y yré por los puertos de Mar para prevenir los quatrocientos hombres, si me los mandan tomar, y artilleros, y en Laredo aguardaré la respuesta desta para rescivir en dos zabras que allí tengo la una y en Castro la otra, la artilleria que V. I. S. allí me mandare dar, y la trayré á buen recaudo aquí, para nó tener ninguna necesidad de entrar en Laredo con mi armada, sino que dende aquí vaya costeando la costa hasta el Cavo de Finis Terra; que yo me daré tal maña, que con la ayuda de Dios, pocos cosarios de los ventureros se me escaparán á remo ni á vela, estando de tierra ó en la mar veinte leguas; y ay nuevas que andan muchos y que hazen grandes crueldades.

V. I. S., por amor de Dios, me haga toda merced y favor para que se me envie luego recaudo, que dexando aparte la gran merced que yo resciviré, V.* S. I.a haze gran servicio à Dios y á S. M. Que yo espero en Nuestro Señor, si me se envia luego recaudo, que saldré á tiempo para los alcanzar y descalabrar; y pues V. S.a I.a lo tiene muy bien entendido, y mi celo, no tengo mas que dezir.

El Capitan Domingo de Ancheta, por quien informé á V.* I.* S.* lo mucho que ha servido y las calidades de su persona para poder ser Visitador de las Naos que navegan en la carrera de Indias, que fué conmigo el viaje pasado á las Indias, va conmigo por Capitan de una Nao, y queda en quanto yo voy à Laredo, haziendo haderezar la armada; y mi hermano tiene mucha parte de la gente

hecha y presta en Asturias, que será aquí con ella á veinte y ocho deste. Suplico á V. S. I. se acuerde de Domingo de Ancheta, para que si hubiere lugar se le haga la merced de Visitador, porque yo se lo he hablado y está en ello; y porque de presente es ido á Fuente Ravia no escrive; él escrivirá á V.aS.a I.a cuando venga; y cierto si se le da el cargo S. M., V. S. I." y los señores del Real Consejo de Indias serán dél muy bien servidos.

Guarde y prospere Nuestro Señor la Ilustrisima persona y estados de V. S.", con muchos dias de vida, como los servidores de V. S. I. deseamos. De San Sebastian 14 de Abril 1557 años. -Besa las manos de V. S. I.a su servidor, Pero Menendez. Al Ilmo. Sr. El Marques de Mondejar, Presidente del Real Consejo de Yndias, del Consejo de Guerra y Estado de S. M. Nuestro Señor.

(Archivo Real y General de Simancas.-Sala de Guerra: Inventario 1.0: Legajo núm. 65.-1.o de Octubre de 1805.-Juan Sans y de Barutell.-Cop. en el Dep. Hidrog.-C. de Sim., A. 4, n.o 234.)

IV

Carta que en 13 de Mayo de 1557 escribe desde San Sebastián Pero Menéndez á la Princesa de Portugal, manifes tándola tener desde el 10 la gente embarcada y pagada, y que dará à la vela á la primera bonanza; que por no tener el Licenciado Ercilla dinero, le habia buscado él, prometiendo no salir de Laredo hasta pagar los 3.000 ducados que le han prestado, y le pide que lo mande pro

veer, etc.

D

UY ALTA Y MUY PODEROSA SEÑORA.-Yo me he dado toda la prisa posible, como V. A. me lo envió á mandar; y aunque los tiempos nos fueron muy contrarios por