mendador de los Santos, persona de grandes prendas y autoridad, como lo mostró siendo Embajador dos veces en Francia, cerca del Rey Cristianísimo, y por los Católicos Reyes D. Felipe II y III, y de su Consejo de Estado en Flandes, y de Guerra en Madrid, el cual casó con Madama Elena de la Espinea, de la cual no tuvo hijos y murió en la villa de Madrid; quinto, Leonardo de Tasis, que despues de la muerte de Francisco de Tasis, su hermano mayor, sucedió en el cargo de Correo mayor en los Estados de Flandes, fué Gentil hombre de la Cámara del Emperador, y el primer Baron y absoluto del gobierno de su casa, de quien se hacia mucha estimacion en todos los Estados de Flandes, donde casó dos veces; la primera, con una dama de la casa de Doman, del Condado de Borgoña, de la cual no tuvo hijos; la segunda con Madama Ludovica de Boisot, con la cual vivió mucho tiempo: fué persona de muchas letras y deseosa de gloria; por lo cual fabricó en la Iglesia de Sablon en Bruselas una grandiosa capilla adornada de finos mármoles, con sus armas, y las de aquellos que emparentaron con su casa donde fué sepultado, y se lee el epitafio que traducido al castellano, dice así:

EPITAFIO.

El origen, gloria y valor de los Tasis, ilustres y antiguos, cuyo valor no quedándose escondido en una sola ciudad su gloria, resplandece en toda Europa, doscientos años empleado en oficio de Correos mayores del Imperio, sirvieron en Austria á los Césares con gran fidelidad, el cual oficio que en pretension tomaron en servirle, nunca le han desmerecido con otras honras y cargos, así de gobierno como de guerra, Embajadores, Consejeros, Gobernadores, Condes, Barones del Imperio. Que con este valor, gloria y origen mueran los hombres, este sepulcro lo enseña etc.

TOMO V.

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Tuvo Leonardo de Tasis de su mujer segunda Madama de Boisot, dos hijos, que el mayor se llamó Lamural de Tasis, y la otra doña Valeria de Tasis, viuda de Agustin de Herrera, Castellano de Gante, en Flandes. Lamural sucedió á su padre en el cargo de Correo mayor de los Estados de Flandes, y en la baronía absoluta del Imperio, y casó con doña Ginebra de Tasis, en la que tuvo á Leonardo de Tasis, que sucedió á su padre en baronía absoluta del Imperio, y casó con la hija del Conde Huvarras, una de las nobles familias del Condado de Borgoña, el cual, rigiendo un ejército y combatiendo valerosamente contra los herejes, murió con la espada en la mano; sesto, doña Margarita de Tasis, hija sesta de Juan Bautista y de Cristina Braquendon su mujer; casó con D. Carlos Boisot, del Consejo de Estado deS. M. en Flandes; séptimo, doña María de Tasis, que casó con Daniel de Baldemberg, Consejero de la Córte en Flandes; octavo, doña Rosina de Tasis, que casó con D. Cristóbal de Tasis, Correo mayor de Augusta; noveno, Ursola de Tasis, monja en Flandes; décimo, doña Alcaide de Tasis, que casó con Jacobo Massio, patricio de la ciudad de Amberes y Consejero del Supremo de Brabancia, y undécimo, doña Alegre de Tasis, que casó con Juan Bautista Zapata, Correo mayor del reino de Nápoles, de quien tuvo á don Francisco, que murió en Sicilia, sin hijos, y á D. Juan Bautista, que casó con Catalina Branza, en la cual tuvo dos hijas, que la una murió doncella, y la otra despues de la muerte del padre, á la cual le tocó la herencia de aquel, que ascendia á 350,000 ducados, y casó con Jacobo Boncompaño, hijo del Duque de Sora, en quien acabamos de escribir los once hijos legííimos de Juan Bautista de Tasis y de Cristina Braquendon su mujer.

Los dos hijos naturales se llamaron Juan Antonio de

Tasis, que hizo el oficio de Correo mayor en Roma, con mucha opinion y limpieza, y no con menor peligro de su vida, por intereses propios del Rey; fué de los Ministros del Papa Paulo IV, puesto en prision en el castillo de Santangel, donde sufrió grandes tormentos; y el otro hijo natural se llamó Antonio de Tasis, Correo mayor de Amberes, el cual casó en Flandes con una dama de la casa de Wese Capela, de la cual tuvo muchos hijos.

El Raimundo de Tasis, hijo primogénito de Juan Bautista de Tassi, y de Cristina Braquendon su mujer, fué Caballero de la órden de Santiago, y Comendador en ella, y tuvo entrada de Gentil-hombre de la Cámara. Pasó á España despues de la muerte de Mafeo de Tasis, su tio, hermano de su padre, que habia hecho el oficio. de Correo mayor por ausencia suya, en el cual sirvió al Católico Rey D. Felipe II, con mucha prudencia en todos los negocios que se ofrecieron en su tiempo, en que mostró el valor de su persona, y la clara sangre de sus mayores; fué casado con doña Catalina de Acuña, hija de D. Pedro de Acuña, y de doña Leonor de Zúñiga y Castilla su mujer, nieta de D. Pedro de Acuña, y de doña Teresa Sarmiento su mujer, de cuyo matrimonio fueron hijos: primero, D. Juan de Tasis, que sucedió en la casa; segundo, D. Felipe de Tasis, caballero de mucho valor, como lo mostró en todas las ocasiones que se ofrecieron del servicio de S. M., siendo Comisario general de la Santa Cruzada, y del Consejo general de la Santa Inquisicion, de donde fue proveido á Obispo de Palencia, y de alli trasladado al Arzobispado de la Santa Iglesia de Granada, plaza que por su mérito ocupaba el año 1619; tercero, D. Pedro de Tasis, caballero de, la órden de Santiago, y Comendador en ella, que sirvió en los Estados de Flandes, con una compañía de caballos, electo Veedor

general de la armada, que fué á las Terceras que se habian rebelado á la Corona de España, para recuperacion de las cuales fué despachado el valeroso Marqués de Santa Cruz, el año 1582, que con feliz suceso fué vencedor de una de las mas señaladas victorias de mar y tierra que se conoció, á donde mostró bien el valor de su persona, saltando en tierra el Maese de Campo Bobadilla y D. Pedro de Tasis, con cuatro compañias. Fué despues el sobredicho D. Pedro de Tasis, electo Maestre de Campo de un tercio de españoles, y en este cargo murió, reconociendo la batería debajo de Torremonda, dejando por su hijo natural á D. Felipe de Tasis, Caballero de la órden de Santiago, que murió en el socorro de la Inclusa; cuarto, doña Mariana de Tasis, hija de Raimundo de Tasis y de doña Catalina de Acuña su mujer, que casó con D. Pedro Velez de Guevara, señor de Salinillas, Alcaide de Estella, de quien tuvo por su hijo á D. Iñigo Velez de Guevara, señor de Salinillas, Conde de Oñate por casamiento con la Condesa de Oñate doña Catalina de Guevara, cabeza de esta nobilisima y antigua familia; quinto, doña Angela de Tasis, que casó con D. Luis de Guzman, Gentil-hombre de boca del Católico Rey don Felipe III, primer Caballerizo de la Reina y Capitan de hombres de armas de Castilla, de cuyo matrimonio fueron hijos D. Luis de Guzman, Gentil-hombre de boca de S. M. y su Capitan de hombres de armas, Corregidor de la ciudad de Granada, y doña Catalina de Acuña, Dama de la Reina doña Margarita, que casó con D. Arias Gonzalo Dávila, Conde de Puñonrostro.

El primogénito, D. Juan de Tasis, Caballero de la órden de Santiago, nació en Valladolid y pasó sus primeros años en la villa de Dueñas con doña Catalina de Acuña, su madre, en la casa de sus abuelos los Condes

de Buendía, y de allí volvió luego à Palacio à servir al Príncipe D. Carlos con grande satisfaccion, hasta que le apartó de su lado la edad y las ocasiones, hallándose luego en la guerra de Granada, donde en la primera ocasion le mataron los moros el caballo que el Serenisimo Sr. D. Juan de Austria le habia dado por no haber llegado los suyos. Peleó valerosamente en el asalto de Galera; hallóse en la jornada del Peñon y socorro de Orán; sirvió á la Majestad del Católico Rey D. Felipe II en todas las ocasiones y jornadas de paz que hizo hasta su muerte, y cuando casó á la Serma. Infanta doña Catalina le envió para que viniese con el Duque de Saboya, y así en el viaje como en las demas cosas le advirtiese y encaminase: comision que ejecutó con estraordinario acrecentamiento y esplendor, como en todo lo demas que se hizo, y asimismo la segunda vez que el Duque de Saboya vino á España, fué hasta Barcelona para venir con él, quedando S. M. ambas veces muy servido y aquel Príncipe tan obligado, que mantuvo siempre hasta que murió familiar correspondencia con él. Fué tambien con la Majestad del Católico Rey D. Felipe II á la jornada de Portugal; despues à la última de Tarazona. Fué caballero de gran reputacion militar: recibió muchas heridas en el rostro en dos desafíos, los mas célebres y bien combatidos que hubo en su tiempo, y de cinco veces que estuvo en duelo, salió siempre gloriosamente. Dióle el Católico Rey D. Felipe III la llave de su cámara, honrándole ademas con el titulo benemérito de Conde de Villamediana cuando fué Embajador estraordinario á Jacobo, Rey de Inglaterra, y habiendo asistido en aquella córte casi dos años, favoreciendo los católicos de todo aquel reino y sacando muchos Sacerdotes de prision de muchos años, concluyó aquellas paces á sa