enemigos, son la blanda y suave brisa que impulsa á vuestra nave á playas amigas ó á las costas de la amada Patria donde os aguardan los pedazos del corazón en forma de madres, hijas y esposas...... Y amáis al mar: como nos amáis á nosotros; como nosotros os amamos después de la contienda fugaz y transitoria; con la continuidad del cariño que crean los vínculos de la sangre y del parentesco; perdurables y santos, más fuertes que las pasiones enconadas; vivos á través de todas las vicisitudes, como vive el alma á través de los dolores de la vida y del abandono de la muerte...... Al llegar á este momento, perdonadme que hablando en nombre de la colectividad de mis compañeros de armas, me deje arrebatar por mis personales y propios sentimientos y me complazca especialmente en que esa bandera roja y gualda, que con tanto placer vemos todos llegar á Cuba en amiga nave y decorar este salón, seáis vosotros, señores Guardias Marinas, los que la traigáis; porque esos cordones de oro y esos uniformes azules fueron llevados por Real Gracia por mi padre en sus juveniles años; esas anclas de vuestros botones, esas coronas que timbran vuestros uniformes, señores oficiales, fueron regados por la sangre de mis abuelos defendiendo el mismo pabellón ilustrado en tantas batallas y cubierto de tan inmarcesible gloria...... Recordemos nuestras glorias; recordémoslas con nostálgico orgullo; que españoles y cubanos, como hijos de la misme estirpe, al recordar nuestros días grandes en la Historia, no herimos los sentimientos de ningún pueblo, pues acaso por percepción artística especial, propia de la raza fuerte que de España se derramó próbida y fecunda por la joven América, recordamos con más orgullo los días de sangre en que el dolor vistió de luto nuestros pabellones, que aquellos en que la tornadiza diosa de la victoria ncs sonrió coronando de éxito nuestros varoniles, esfuerzos y tenemos razón, y hacemos bien al proceder así. Más sublime, más reful Grupo de marineros en un departamento de "La Benéfica." Familias en los jardines de la Quinta "La Benéfica" del "Centro Gallego" gente que don Juan de Austria en Lepanto dispersando y aniquilando la sarracena grey, aparece Cervera en Santiago, estóico y sereno al arrostrar la muerte, seguido de aquella corte de héroes, para mantener la honia de la Patria, morir por la bandera y conservar incólume el prestigio de un uniforme jamás manchado por la traición y la cobardía, haciendo frente á la formidable escuadra, la más potente que verán estos inares. Y nosotros, los hijos de la joven Cuba no festejamos ostentosos ningún día de feliz batalla; nuestro Calendario oficial sólo consagra el 19 de Mayo, en que en hora trágica cayó para no levantarse más el Apòstol de nuestra redención, JoséMartí, dando con su sangre á la tierra de sus amores. ejemplo á los que por la Patria luchaban; y el 7 de Diciembre en que unidos en Punta Brava entraron en la gloria inmortal por las puertas de la muerte, Antonio. Maceo y su Ayudante Panchito Gómez, sellando la solidaridad cubana con la unión de las razas. La victoria es el accidente del combate; la decide el azar; todos en ellas aparecen grandes y esforzados. La grandeza en la. derrota, el estoicismo para recibir la mnerte, el no cejar ante el último y fatal deber. es lo que caracteriza á las almas grandes y á los pueblos dignos de vivir en la Historia. Ya Cuba ha roto sus antiguos vínculos de vasallaje con la nación descubridora; el viejo tronco á que tantas y tan grandes naciones deben la vida, ha quedado, por la segadora mano de la Historia, desprovisto del último de sus verdes y floridos renuevos; pero cual añosa vid, á quien la mano al parecer cruel del podador arranca sus lujuriantes ramas, lo que pudiera creerse muerta cepa, pecio de los siglos, brota y reverdece á impulsos del alma siempre fuerte y siempre joven del pueblo español, y el mundo contempla asombrado como en bendita y no esperada primavera, España, la madre España. al aliento inspirado de un Monarca lleno de vida reverdece y restaura su Hacienda, y sus industrias adquieren nuevo vuelo y sus literatos y sus sabios dan patentes pruebas de su ciencia y crece el poder,, y de nuevo la añosa vid dará òpimos frutos y rodeada de los que fueron parte de su ser y en colectividad de naciones cubrirá el campo y llenará la Historia, y acaso en no lejano porvenir presentará la primera confederación de grandes naciones en que se agrupen los hombres de la misma religión, de la isma lengua, de las mismas tradiciones, de la misma alma, cuando acudan al gran concierto de la Paz porque suspira el hombre insigne que en breve término dejará por voluntad propia de regir los destinos del pneblo americano, y que por rara coincidencia é inescrutable voluntad del destino, si fué el que hizo cesar la desolación y la guerra en esta hermosa Antilla, preside esta noche y contempla por los ojos benevolos de su representante, el primer abrazo conque los guerreros del pasado, los que combatimos por España y por Cuba, nos saludamos después de nuestras pasajeras y olvidadas discordias. Que vientos bonancibles lleven vuestra nave á nuestra madre común; que en ella vayan nuestros votos de paz y de felicidad, y que seáis testigos ante España entera de que aquí en Cuba, en la más joven de sus hijas, solo existe un pueblo unido para aclamarla con respeto y amor como á la madre creadora de tantos poderes de tantas fuerzas y de tantas jóvenes naciones." Grupo de marineros de la "Nautilus", reunidos en el patio del hotel "Sevilla", en donde fueron obsequiados con un banquete por el Comité de Dependientes del Comercio. Atronadores aplausos acojieron la oración del dignísimo general Hernández. Hubo momentos de verdadero delirio, especialmente al abrazar el comandante de la Nautilus al veterano marqués que presidía, á esa legendaria figura que durante medio siglo conspiró en la paz y luchó en la guerra por la independencia de Cuba, que aun perdiendo una colosal fortuna en su empeño, una vez logrado, á nada aspiró; modelo de desinterés, patricio insigne, alrededor del qué, historia viviente de un pueblo, se agrupan todos, honrándolo y honrándose al reconocerlo como lazo de unión, centro de que irradia la templanza que amortigua las cxaltaciones de las pasiones políticas, y es garantía de que éstas no han de traspasar los límites de la sensatez y cordura, para bien y prosperidad de la joven nación. Los señores ministro de España y Moreno Eliza, dieron las más sentidas gracias á los Veteranos, y concluído el acto, Balcón de la casa de los Sres. Pumariega, Pérez y Ca, de la calle Muralla, decorado con una figura alegórica de la República de Cuba. se dirigieron unos y otros, juntos todos, con el venerable marqués á la cabeza, al Centro Asturiano, donde naturalmente fueron recibidos y festejados, como saben hacerlo las potentes Sociedades Regionales, y como correspondía á la calidad de los visitantes. DIA 30 Después de las visitas cuotidianas recibidas abordo, por la noche á las 9 concurrieron los marinos al banquete ofrecido por la Legación Americana, donde se congregaron altas personalidades de la Diplomacia, cuerpo consular, distingidos políticos, bizarros oficiales del Ejército cubano, opulentos banqueros y comerciantes, hermosas señoras y señoritas resultando el acto brillantísimo. Es de justicia extricta reconocer, que las autoridades y funcionarios norte-americanos, han procedido en todos sus actos desde la llegada aquí de la Nautilus, con la más exqui sita corrección, sin demostrar la menor preocupación, por el lenguaje agresivo é injurioso para Cuba y España, del periódico el Sun, órgano rabioso de los imperialistas del Norte, Balcón de la casa de los Sres. Prieto, González y Ca, de la calle que quieren á todo trance envolver á su país en problemas internacionales, no siempre de fácil solución, con olvido de la historia de grandezas de esa República, cuando se ocupaba solamente de fomentar su riqueza interior, sin despertar odios ni envidias, siendo más bien objeto de admiración universal por su sabia administración y gobierno durante larguísimo período, desde Washington á Cleveland. De todas suertes, si el voto de los imperialistas vuelve á imponerse al buen sentido, por lo que á Cuba se refiere, |