Imatges de pàgina
PDF
EPUB

ses) Vease el documento al !fin.

11 Despues de hecho Arzobispo D. Berenguer le escribió el Papa Urbano II. una Carta, la qual no tiene año, pero es posterior al de 1091. en que le dió el Palio, y antes del 99. en que por Julio acabó aquel Pontifice. En ella le hace cargo de lo que Berengario y los Proceres de la Provincia prometieron insistir en la restauracion de Tarragona, quando le dió el Papa el Palio y honor de aquella santa Iglesia: pero que era voz comun no se adelanta ba nada en aquella expedicion, y que habia cesado la restauracion de Tarragona: por lo que le amonestaba mucho en virtud de aquella Carta sobre la vigilancia y solicitud en la perfeccion de aquel negocio: Frequenti fama audivimus vestram illam industriam, vestrum studium jam cessare & Tarraconensem restitutionem jam pene deficere. Te igitur literis præsentibus admonemus, ut bujus boni operis perfectionis se dulus operator existas.

12

,

.

Esta Carta excitaria el empeño del nuevo Arzobispo para mover los animos

de los Poderosos sobre el restablecimiento de Tarragona: pero si hicieron algo, no sirvió, sabiendose que por el año de 1118. no se hallaba restablecida la Ciudad, ni algunos despues, como diremos. La frontera de los enemigos impedia los adelantamientos de los Condes: pues si hoy recobraban algo, mañana lo solian perder. Asi aconteció en el campo de Tarragona hasta Villafranca de Panadés, de que los Arabes se apoderaron con furor, matando, cautivando gente, y destruyendo las poblaciones y fortalezas en el año de 1108. en que Clario en su Chronicon de S. Pedro Vivo (impreso en el Spicilegio De Aqueri Tomo 2.) dice se adelantaron tanto los Amorreos transmarinos, que solo distaban dos ò tres jornadas de Barcelona: por lo que el Conde envió al Obispo à pedir auxilio al Rey Luis; (sexto de Francia) y el que escribe esto dice lo oyó de boca del mismo Obispo y de sus compañeros.

13 El documento 340. de la Marca Hispanica individualiza mas este suceso (bajo el año 1108. expresado en

el

el titulo, y defendido en Pagi, sobre el año siguiente) diciendo, que una gran multitud de Moabitas y Paganos entraron con horribles destrozos de Villas y Iglesias hasta el Castillo Gelida, tierra de Panadés (dicha alli Penitense) Qui invadentes plurimas terminationes, & destruentes Ecclesias, loca quoque sanita prophanantes, non minimas Christianorum strages ediderunt: incenderunt enim totam terram Penitensem usque ad Castellum Gelida: & multos ferro necando, ac millia millium hominum captivando, totam depopulati sunt provinciam.

14 El que llega hasta Villafranca de Panadés (caminando à Barcelona) deja atrás à Tarragona y su campo: por lo que debemos decir

que si el Arzobispo D. Berenguer habia adelantado algo en esta expedicion, quedó destruido en las hostilidades del año 1108.

15 Por esto se verifica el buen informe con que el Papa Pasqual segundo dijo en el año de 1108. que nadie se atrevia à vivir en Tarrago na por lo destruida que la tenian las hostilidades de los

Barbaros: Tarraconensis Metropolis... ita urgentibus bar baris detrita est, ut nullus eam incolere valeat. Esto lo dijo el Papa hablando de la Santa Iglesia de Burgos, sucesora de la de Oca, sufraganea antigua de Tarragona, à la qual Iglesia de Burgos recibió el Papa bajo su immediata sugecion, haciendola esenta de Metropolitano, por no perseverar el antiguo de la Sede Aucense. Siguióse un infortunio de otro: pues el estar destruida Tarragona, y no tener Arzobispo, cooperó à que perdiese la antigua sufraganea de Oca. De esto hablaremos sobre Burgos. Ahora se toca, por comprobar con la mencionada Bula la destruccion de Tarragona en el año de 1 108.

Excluyese lo escrito sobre la restauracion de Tarragona atribuida al Arzobispa de Toledo D.Bernardo.

[blocks in formation]

falsa esse convincuntur. No expresa lo que refieren: pero Beuter lib. 2. cap. 17. escribe , que el Papa Urbano II. mandó al Arzobispo de Toledo D. Bernardo, quando iba à la Cruzada , que se volviese à Toledo, y por los gastos que habia de hacer en el viage de la tierra Santa, edificase la Ciudad de Tarragona, y restituyese aquella Iglesia, à fin que su Santidad proveyese en ella Arzobispo como le solia tener. Esto (añade Beuter) se halla en el Registro del Papa Urbano II. y asi lo recita el Arzobispo de Toledo D. Rodrigo cap. 77. (que es hoy Cap. II. del lib. 4.)

17 Zurita en el lib. 1. de sus Anales cap. 28. refiere tambien que Urbano II. encomendó al Arzobispo D. Bernardo la restauracion de Tarragona, y añade que por su ministerio fueron en un mismo tiempo dedicadas las Iglesias de Tarragona y Toledo. Por esta causa (añade Zurita) aunque Tarragona estaba mas desierta; el mismo Urbano, dentro de breve tiempo la proveyó de Pastor, y fue creado Arzobispo Berenguer, que era Obispo Tom.XXV.

de Osona. Garivay en el Tomo IV. lib. 31. cap.34. escribe resolutoriamente que la Ciudad fue reedificada por el Arzobispo de Toledo D. Bernardo.

[ocr errors]

18 Esto no corresponde à los documentos alegados, en que no hay mencion de haber intervenido el Arzobispo de Toledo en restaurar à Tarragona ni que el Papa se lo mandase: pues la primera Carta del Pontifice en el año de 1089. fue à los Principes seculares y Eclesiasticos de Cataluña: la segunda al mismo nuevo Arzobispo de Tarragona D. Berenguer, dandole el Palio, y el derecho sobre la Ciudad, expresando que su empeño principalmente (no de D. Bernardo, ni de otro Prelado) movia esta restauracion: Tuo potissimum studio hæc est restitutio instituta, como dice la Bula del Apendice, bajo el año 1091. num.2. Despues culpó al mismo Arzobispo D. Berenguer, que no daba paso en la restauracion, como vimos en el num. 11. y esto no se compone con que el Toledano fuese el res taurador , y que dedicase esta Iglesia al mismo tiem

[blocks in formation]

po que la de Toledo, ni que. esto fuese antes de ser creado Arzobispo D. Berenguer: (como dice Zurita) porque aun despues de él sabemos que la Catedral de Tarragona no estaba dedicada, ni cubierta, sino llena de malezas, por los arboles que habian nacido alli desde lo antiguo, como vamos à proponer en el titulo immediato de S. Oldegario.

19 Beuter no entendió bien al Arzobispo D. Rodrigo, à quien alega: pues no dice que el Papa le mandase aplicar los gastos de la Cruzada à la restauracion de Tarragona sino que en el Registro de aquel Papa constaba estar destruida desde mucho antes de D. Bernardo : y luego añade de suyo D. Rodrigo que el Papa le animó por Carta à que restaurase la Iglesia de esta Ciudad. Esto es posible: pero no he visto tal Carta.

[ocr errors][merged small][merged small]

$. Oldegario, à D. Ramon, Obispo de Barcelona: Raimundus Tarrago, Barcinonensis Episcopus, dum contra perpetuos Christianæ persuasionis hostes viriliter pro suorum tutela pugnat, occiditur in prælio pridie Kal. Novembris anmo Domini MCXIV

21 El Sr. D. Antonio Agustin no hizo mencion de tal Prelado, pues no pertenece à Tarragona, por no haber tenido mas Titulo que el de Barcelona: y si por este ha de contarse en nuestra Iglesia; debieran añadirse todos los de aquella. Ya digimos en el cap. 3. num. 7. que el Obispo de Barcelona, como confinante, y como Iglesia la mas sobresaliente, cuidaba de la Christiandad del territorio Tarraconense en lo que los Fieles necesitaban pendiente del Obispo : pero no se intitulaban Tarraconenses: ni despues de D. Berenguer, que restableció aquel Titulo, corresponde introducir en los Fastos de Tarrago na al que no recibió tal Sede: pues si los antecesores à D. Berenguer no se colocan entre los Arzobispos de Tarragona, quando no estaba restablecido aquel Titulo; me

nos

nos se colocarán los posteriores, despues del restablecimiento, si no consta haber sido electos para Tarragona.

22 En esta conformidad, aunque S. Oldegario era Obispo de Barcelona; no se cuenta entre los Arzobispos de Tarragona hasta que recibió este Titulo en el año de 1116. segun diremos en el cap. si

guiente. No debe pues nonbrarse entre los presentes el Obispo de Barcelona D. Ramon: ni yo insistiera tanto en el Catalogo de aquellas Constituciones del Sr. Oria, sino fuera por las menciones y citas que hacen de él algunos Autores (como v.g.Pujades, y Domenec) y siendo libro muy raro, conviene vulgarizarle en esta parte.

CAPITULO

VI

S. OLDEGARIO, OBISPO DE BARCELONA, y Arzobispo de Tarragona, trabaja en restaurar

I

HAS

la Ciudad.

ASTA ahora no logró Tarragona mas ventaja, que empezar à restablecerse y sonar el titulo de Arzobispo Tarraconense. El primer paso fue trasladar su honor Metropolitico à Vique, uniendo el Papa Juan XIII. nuestra Iglesia à la Ausonense, y dando al Prelado de aquella Iglesia el Palio que correspondia al Obispo de Tarragona, no con este titulo, sino con el de Arzobispo Ausonense. Esto fue en el año de 971. presidiendo Atton en Vique, unico en el

titulo de Arzobispo Ausonense , porque ninguno de los sucesores le usó, por oposicion de los Arzobispos de Narbona, que estaban en posesion de unicos Metropolitanos en aquel territorio.

2 Mas de cien años despues volvió otro Obispo Ausonense al empeño de restablecer nuestra Metropoli, no con titulo de Ausonense, sino con el proprio de Tarragona, cuya dignidad le fue concedida, à fin que restaurase la Iglesia Capital; y este llamado Berenguer, se inP 2

ti

« AnteriorContinua »