Carta del cabildo de la santa iglesia de Valencia á Felipe II siendo Gobernador del reino en ausencia de su padre Cárlos V. "Al muy alto Serenísimo Señor el Príncipe nuestro Señor. Serenísimo Príncipe-Sabiendo la eleccion y determinacion de la Cesárea y Real Majestad del Emperador y Rey nuestro Señor, de darnos en arzobispo desta santa iglesia á fray Tomás de Villanueva, y que en ello nos ha hecho mucha merced por habernos dado perlado tal cual conviene á la necesidad de este arzobispado, senialadamente á lo que al presente ocurre para la instrucion de los nuevamente bautizados y convertidos á nuestra sancta fe católica, allende de la obligacion que nos queda de muy mas afectadamente por tan buena y santa obra rogar á Dios por la vida y imperial estado de S. M. y de V. A., acordamos enviar á D. Miguel Vich y Gaspar Pellicer nuestros concanónigos, á besar las manos de V. A. por tan señalada merced que de dicha eleccion habemos recibido. Humilmente le suplicamos les mande dar entera fe é creencia en todo lo que de nuestra parte le suplicaren. Guarde y prospere felicísimamente nuestro Señor Dios la vida y estado de vuestra Alteza como todos sus súbditos y vasallos deseamos y habemos menester. En Valencia á 28 de agosto 1544-De vuestra Alteza humildes y devotos servidores y vasallos los canónigos y cabildo de la iglesia de Valencia-De provisione canonicorum et capituli dictae Sedis Valentia-Balthasar Benedictus Abella notarius et dicti capituli scriba.” (Archivo de Simancas--Estado núm. 293.) Carta de Santo Tomás de Villanueva á D. Francisco de los Cobos. "Al muy Ilustre Señor el Señor Comendador mayor de Leon etc.-Muy Ilustre Señor-Muy gran favor y merced me hace V. S. en me avisar de lo que me cumple, y siempre que V. S. lo hiciere será para mí muy gran merced. Yo, Señor, siempre estuve mal con estos insultos que se hacen con favor de la corona (1), y he deseado que en esto se pusiese algun remedio porque Dios y la justicia desto se ofende y el pueblo recibe gran detrimento, y en esto yo seré en ayudar al Señor Duque (2) para que los malos sean castigados, y en suplicar á Su Excelencia que así lo haga, porque poco aprovecha. ria la doctrina si no se ejecutase la justicia. Y así en esto como en todo lo demas que cumpliere al servicio de Dios y de S. M. y buena gobernacion de aquel reino, sin que S. A. me lo mande, estaré yo muy obediente y conforme á lo que Su Excelencia ordenare y mandare. Y conociendo que los oficiales que allá hay, no son á este propósito, he procurado y procuro de buscar un provisor muy calificado en vida y ciencia y esperiencia, y he suplicado al Reverendísimo Señor Cardenal de Toledo que tiene mucha noticia destos canonistas, me favo. rezca en que se busque una persona cual convenga, y no se halla persona desocupada cual deseo; mas de los que se pudieren haber se escogerá el mas hábil y suficiente, que esto cumple mucho á mi conciencia y descanso. (1) Alude el Santo al clero del reino de Valencia de quien se decia que amparaba á personas que no lo merecian á causa de sus delitos. (2) Don Fernando de Aragon Duque de Calabria, Virey de Valencia. He mucho holgado de ver las escrituras que V. S. me dió, y estó muy bien con la provision que S. M. hizo del Sr. obispo de Segovia (1), y cierto era menester proveer de una persona tal como es el Sr. obispo y que tanta inteligencia toviese de aquellos nuevos cristianos para su remedio y para su doctrina y para la nueva institucion de aquellas retorías, y persona que no entendiese en otra cosa y para mí es muy grande alivio y descanso. estar así proveido porque me quita de mucho cuidado y trabajo, y deja libertad para la doctrina y gobernacion espiritual de los otros cristianos. Y el Sr. obispo es muy antiguo señor y amigo mio, y conoscémonos mucho, porque antes que yo fuese fraile, ambos fuimos colegiales y letores en el colegio de Alcalá, y en todo lo que su Señoría ordenare estarémos muy conformes. En lo de las armas (2) veo que todos los paresceres estan conformes en que se quiten, aunque el modo es dificultoso y peligroso: entretanto que esto no se hiciere pienso que aquel reino no estará seguro. Nuestro Señor en todo encamine á vuestra muy ilustre Señoría, y su vida guarde y conserve para que en esto y en todo lo demas provea lo que cumple á su servicio y bien destos reinos. Las escrituras dará este men. sajero á V. S. Deste monasterio de Nuestra Señora del Pino á 8 de setiembre 1544-De vuestra muy ilustre Señoría muy cierto capellan-Fray Tomás de Villanueva (*)." (Archivo de Simancas--Estado núm. 293.) (1) D. Antonio Ramirez nombrado obispo de Segovia en 1513, y muerto en 1549. Sobre quitar las armas á los moriscos. El Duque de Calabria D. Fernando de Aragon, Virey de Valencia, dice desde esta ciudad á D. Francisco de los Cobos á 21 de agosto de dicho año 1544, entre otras cosas, lo siguiente. "Ya Vm. sabe los continuos trabajos que aquí nos da la inmunidad eclesiástica, y con cuanta dificultad y á fuerza de brazos se hace justicia por querer favorecer la iglesia á tuerto y á derecho los coronados, y la principal causa de todo ello ha sido haber residido por los arzobispos pasados en esta iglesia despues que yo tengo este cargo, gente perdida, idiota y de poca conciencia, con quien ningun medio bueno se ha podido jamás tomar porque todo su fin ha sido amparar y favorecer malhechores salvando y librando aquellos de mis manos. Y pues agora Dios Ꭹ S. M. han sido servidos de proveernos arzobispo de tan buena vida y ejemplo como todos dicen, y está en esa corte, importa mucho que Vm. le haga hablar para que traiga de allá un provisor castellano, hombre de letras y buena conciencia, que le sirva de oficial y vicario general, porque siendo tal le descansará mucho y asentará esto como conviene al servicio de Dios y de S. M., sin dar lugar á las bellaquerías que en esta iglesia se han consentido y consienten con las parcialidades y amistades que los dichos oficiales han tenido, lo que no podrá escusarse siempre que se tome para el regimiento de dicha iglesia hombre de por acá. Y juntamente con traer provisor de allá que sea tal, será bien que S. A. mande al dicho arzobispo que tenga conmigo toda buena inteligencia sobre todo lo que se ofrecerá del servicio de S. M. y de S. A., porque desta manera botarán todos los bellacos y malhechores, y la tierra quedará llana como la palma, sin que los dichos tengan aquel refu gio tan cierto y seguro como agora le tienen en tan gran desacato de S. M. y de sus ministros; y otramente si se ponen hombres naturales de aquí y pláticos en disimular y favorecer semejantes bellaquerías, Vm. crea que es topor demas, aunque el prelado sea un santo." do (Archivo de Simancas--Estado núm. 293.) En carta del Comendador mayor Francisco de los Cobos al Emperador, su fecha en Valladolid á 17 de setiembre de 1544, se dice entre otros particulares lo siguiente. "Sacra Cesárea Católica Majestad-La carta de V. M. de 6 de julio recibí con el memorial que me mandó enviar de las provisiones de lo de la iglesia, las cuales mostré luego al Príncipe. Han parescido muy bien, señaladamente la del arzobispado de Valencia en persona de Fray Tomás. S. A. le envió á llamar y le dijo la merced que V. M. le hacia con las palabras que parescieron convenir al propósito. El respondió con mucho agradescimiento y pidió tiempo para resolverse en si lo aceptaria, y que si su Provincial no se lo mandaba él no lo podia aceptar. Pensó en ello y vino el mandamiento de su superior, y así aceptó. Plegue á Dios que la provision salga tal en los efectos como la ha juzgado el vulgo; que yo temo que para en aquel reino y gente de la cualidad que V. M. sabe, era menester persona de esperiencia de gobernacion; mas él es tan bueno que espero que suplirá á todo. Antes que vaya, irá bien informado de todo lo que parescerá que convenga." (Archivo de Simancas--Estado núm. 64.) |