recibido de S. M. muchas y buenas obras y mercedes: dijo que confiesa que S. M. ha hecho siempre á este confesante muchas mercedes y honras. Preguntado si de algunos años á esta parte y especialmente despues de la vuelta de su hermano el Conde de Hornes de los reinos de España se ha hallado en diversas asembleas (1), juntas y comunicaciones con los Príncipe de Orange, Condes Degmont (2) y de Hornes, de Ostraten, Marqués de Bergas y otros principales señores de los Paises Bajos: dijo que confiesa de algunos años á esta parte antes quel Conde de Hornes hermano de este confesante viniese á estos reinos Despaña, y despues que volvió dellos á Flandes, haberse hallado este confesante en muchas y diversas veces en compañía de los dichos Príncipe de Orangues, Conde de Hornes hermano de este confesante, y Degmont, de Ostraten, Marqués de Bergas y de otros principales señores de los Paises Bajos, como son Duque de Azcote, Conde de Arambergue, Conde de Mega, Mosior de Brederrode, Mosior de Noyrcarmes, Conde de Manfelt, Musior de Glajon, Musior de Berlemont y otros muchos caballeros amigos y parientes deste confesante, y de los demas caballeros contenidos en la pregunta que se le hace, unas veces en casa de unos y otras veces en casa de otros, donde comian y jugaban y se holgaban, como es de costumbre en aquella tierra visitarse unos á otros, y que esto no era á manera de juntas ni asembleas sino por via de buena conversacion visitándose unos á otros como tiene dicho por via de amistad y parentesco conforme al uso de aquella tierra, y que unas veces inviaban á llamar los caballeros que tiene dichos y declarados en esta pregunta á este confesante, y otras veces este confesante iba á visitallos por ser como tiene dicho sus amigos y deudos, y algunos del Consejo de S. M. Preguntado si en las dichas asembleas este confesante ha oido diversas veces platicarse del estado y gobierno de los dichos Paises: dijo que ya tiene dicho que no se juntaban de manera de asembleas porquestas son para cosa cierta y de propósito que invian á llamar los que tienen mando y superioridad á otros para que se junten á cierta hora; pero que en las compañías y conversaciones queste confesante y los demas señores y caballeros declarados en la pregunta precedente se hallaban, confiesa que entre otras muchas pláticas trataban del gobierno de los Estados de Flandes, y esto responde á esta pregunta. Preguntado qué cosas son las que se trataban tocantes al gobierno, y cómo y de qué manera las trataban: dijo que en particular no sabrá decir las cosas que se trataban, mas de que trataban en general de muchas cosas conforme á las ocasiones y los tiempos como aconteció muchas veces cuando personas principales estan en alguna buena conversacion, que unos hablan de unas cosas y otros de otras. Fuéle dicho que responde confusa y oscuramente á lo que se le pregunta, y que en particular refiera los negocios y cosas de que se trataba entre este confesante y los demas señores y caballeros que tiene nombrados, y la resolucion que entre ellos se tomaba, y lo que se acordaba dijo que es verdad que algunas veces trataban de negocios estando en buena conversacion y particularmente se acuerda que trataban de las enemistades y par cialidades entrel Cardenal de Granvela y el Príncipe de Orangues y Conde Degmont, y Conde de Hornes hermano deste confesante, y de otros muchos como es cosa pública y notoria, y tambien trataban de la ambicion del dicho Cardenal. Ꭹ Preguntado qué cosas eran las que ansí trataban cerca de la dicha enemistad y parcialidad que tiene dicho, de la ambicion del dicho Cardenal de Granvela: dijo que como el Príncipe de Orangues y el Conde de Agamont y el Conde de Hornes hermano deste confesante, eran del Consejo de S. M., trataban de la ambicion del dicho Cardenal de Granvela y de como lo queria mandar todo, y de aquí resultaba la enemistad y parcialidad entre unos y otros, y que este confesante como hermano del dicho Conde de Hornes, y deudo y amigo de los demas se allegaba á la parte dellos, los cuales escribieron á S. M. sobre ello y hablaron á la Duqnesa de Parma, y dieron parte á este confesante de lo que escribieron á S. M., en que mostraban descontento del gobierno del dicho Cardenal, y se remite á lo que ansí se escribió á S. M., de lo cual no se acuerda este confesante, aunque como dicho tiene lo comunicaron con este confesante y con otros caballeros de la Orden del Tuson y de otros Gobernadores de aquellas provincias. Preguntado si en las pláticas que pasaron entre este confesante y los dichos caballeros que tiene nombrados ó otros, se tocó y produjo cosa contra el honor y servicio de S. M., especialmente en respecto de los dichos paises, estados y súditos de por allá: dijo que no se trató ni platicó cosa que fuese en deservicio de S. M., antes se trató y platicó de las cosas de su servicio donde quiera queste confesante se hallaba. Preguntado qué cosas eran las del servicio de S. M. de que se trataba donde este confesante se hallaba: dijo que se trataba muchas veces del remedio que habria contra los herejes de aquella tierra y del favor de la religion, y como seria bueno socorrer á S. M. con dineros para remediar las necesidades que tienen aquellos Estados de fortificar villas y pagar la gente de guerra y deudas que S. M. debe á mercaderes de parte de los dichos Estados, y otras cosas semejantes. Preguntado si en las dichas comunicaciones y asembleas este confesante ha oido platicar sobre la mudanza del gobierno de aquellos Paises: dijo ques verdad queste confesante oia tratar algunas veces de las que se hallaban juntos este confesante y los demas que tiene dichos de cosa de gobernacion, y como seria bueno que S. M. proveyese muchas cosas en todos los Consejos de hacienda y de estado y de justicia en cada provincia, lo que parecia convenia porque habia mucha desórden en mu-chas partes, y que en particular no podria referir cosa alguna de lo que se platicaba porque como este confesante no era del Consejo se remitia en todo á lo que pareciese á los del Consejo que convenia al servicio de S. M. y al bien de aquellos Estados. Preguntado si en las dichas pláticas este confesante y los susodichos de quien se le ha preguntado, han tratado y comunicado de haber y obtener comision y facultad en escripto de los dichos Paises para los rejir á su modo y voluntad en cuanto á lo principal del gobierno: dijo que nunca tal cosa se trató en presencia deste confesante, ni supo ni oyó que tal se tratase. Preguntado si para venir á lo del capítulo precedente han procurado de hacer ansí mismo mudanza de los prin cipales Consejos de la corte y otros provinciales de por allá, y especialmente de quitar del todo los Consejos privado y de finanzas, y por el consiguiente que todas las materias dependientes dellos se aplicasen y determinasen en Consejo de Estado: dijo ques verdad que en Consejo Destado vió este confesante tratar que seria bien que hobiese alguna mudanza en la forma de los Consejos, y sobre ello la Duquesa de Parma invió á llamar algunas vcces á este confesante y á otros caballeros de la Orden y gobernadores de provincias, y cree que la Duquesa advirtió á S. M. de la órden y mudanza que se pretendia, de lo cual no se acuerda este confesante, y no sabe la intencion que otros tenian mas de que publicaban todos que convenia ansí para el servicio de S. M. y para el buen gobierno destos Estados, y que este confesante no tenia voto en estos negocios como no era de los Consejos, mas que se remitia á lo que paresciese á los del Consejo y que avisasen á S. M. de lo que acordasen. le Preguntado si haciéndose los dichos discursos que han sido preguntados, ha oido este confesante proponer se hiciese quitar del dicho Consejo de Estado al Cardenal de Granvela: dijo que no sabe mas cerca de lo que se le pregunta de que como la enemistad y parcialidad que habia entre el dicho Cardenal de Granvela y algunos del Consejo de S. M. de aquellos Estados era tan grande, se trataba y platicaba convenia al servicio de S. M. de que saliesen del Consejo unos ó otros por la poca conformidad que entre ellos habia. Preguntado si es verdad queste confesante y otros de los dichos señores de quien se le ha preguntado, procuraban dar alguna causa por la cual como ellos decian el dicho Cardenal habia merecido ser echado del Consejo, |