Reformistas antiguos españoles, Volumen 17

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1863
 

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Página 250 - qui cum in forma Dei esset, non rapinam arbitratus est esse se cequalem Deo, sed semetipsum exinanivit formam
Página 418 - i entiendo así, que es un mismo verbo aquél del cuál dize san Juan, " In principio erat verbum, et verbum erat apud Deum, et Deus erat verbum:" i mas abajo, " Et verbum carofactum est;" i aquél del cuál dize san Pablo,
Página 728 - la injuria rezebida. Dízeles Jesu Cristo, que den sus limosnas secretamente, en manera, que no sepa la izquierda, lo que da la derecha ; i ellos, solamente hazen secreto, las malas obras, dignas de castigo : i si dan, alguna limosna, o hazen alguna obra pía; luego, las armas pintadas, o entalladas,
Página 134 - tampoco les libra de los males de tal manera, que no les toquen, mas los habilita a sacar de estos males el bien. La otra cosa que entiendo, es, que el continuo jemido del hombre que siente, o comienza a sentir en sí, el benefizio de Cristo, debe ser, deseando i demandando
Página 474 - LEÍDAS I EXPLICADAS HÁZIA EL AÑO DE 1538 I 1539. POR JUAN DE VALDÉS. CONFORME A UN MS. CASTELLANO ESCRITO EL A. 1558 EXISTENTE EN LA BIBLIOTECA DE HAMBURGO, I ahora publicado por vez primera con un facsímile.
Página 150 - aquellos que han estado, i están en ella: i el que sintiere en su ánimo un amor a la vida eterna, no contentándose con la vida presente, téngase por pío, i por predestinado a la vida eterna, aunque tema la muerte: considerando todo lo que se ha dicho, i sobre todo, que también temió la muerte el
Página 55 - el ánimo de toda mala inclinazión, i apartando el cuerpo de todo mal ejerzizio, i de toda mala costumbre. Entiendo además, que para desnudar el ánimo de toda inclinazión mala, conviene que el hombre, animosa i jenerosamente se haya con el mundo, volviendo las espaldas a toda honra suya, a toda gloria suya, ia toda
Página 85 - El cuál entiendo que consiste, no en la ejecuzión de aquella cosa que el hombre desea, sino en el conozimiento del inconveniente en el que después de la ejecuzión se vé caído. Todavía en semejantes casos conozen las personas piadosas la voluntad de Dios, mas aquella que es con ira, i con furor: i
Página 722 - aquellos días, en que, él mismo, hubiera podido exclamar diziendo:— " Monarcas, que los pérsicos tesoros, Ostentáis con magnífica porfía, Copiad el brillo de un sereno día, Sobre el azul del mar.
Página 67 - del ánimo. Considerando que asi son peores las recaídas en las enfermedades del ánimo, como las recaídas en las enfermedades del cuerpo. Bien que de este recaer, guarda siempre Dios, por sí mismo, a los que han adquirido la sanidad por la rejenerazión, i renovazión que haze el Espíritu santo en los que

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