Hacia una pedagogía de las experiencias de las mujeres

Hay algo de "provocación" en los textos que componen este libro. Varias lecturas sobre "circulación de saberes" en ámbitos no tradicionalmente "educativos," lo que de por sí conforma una cuña desafiante para la reflexión pedagógica. Trata de mujeres que se juntan. Salen, dejan la casa, cruzan la puerta, se dan cuenta, encuentran, valoran y rompen los silencios. Estas son expresiones sobre las que se conforman experiencias de vida, experiencias que les pasan a mujeres que buscan salir del lugar de no-saber que se les ha asignado. "Saberes" y "experiencias" aparecen nombrados repetidas veces a lo largo de estas páginas, al igual que "pedagogía." El intento es el de abrir estos conceptos a otras miradas y subvertir el sedentarismo de las palabras, las significaciones estáticas del poder hegemónico, en una especie de tajo, una herida por la que corra un flujo y reflujo de aquellas significaciones silenciadas, renovadas... Dislocar las preocupaciones tradicionales del pensamiento pedagógico con las palabras negadas, prohibidas, peligrosas, esas que no tocan puertas hacia lo conocido sino hacia "lo por conocer" o hacia "lo que no se quiere hacer conocer." Gusta este libro. Y gusta también la idea de pensarlo como "provocando" al campo educativo y a los estudios de sexo-género. "Provocar..". "excitar, incitar, inducir, mover, estimular" y también "irritar, hostigar, impacientar, retar, enojar." Son los procesos que desencadena su lectura.